Y aunque te amé, necesito liberarte.
Podía escuchar, eso era fácil, lo difícil era abrir los ojos, incluso moverme, aunque sentía una mano cálida tomar la mía no lograba que mis dedos se cerraran, por momentos escuchaba mucha gente cerca de mí, conversaciones silenciosas, como si temieran molestar a alguien y por otros el silencio absoluto.
Cálidos besos llenaban mi cara, y manos firmes frotaban mis brazos, como si fuera un enfermo carente de calor, podía sentir dolor en muchas ocasiones, pero nunca duraba demasiado, no sabía cuánto tiempo había pasado, podrían ser días o incluso años o tal vez solo era yo despertando una y otra vez. Las palabras ahora las escuchaba con tranquilidad en mis oídos y en una de esas veces, que el sueño se había retirado, una mano froto la mía y un beso se posó en mi frente, la imagen de una cara blanca y ojos negros vino a mí y me encontré en la desesperación de abrir los ojos, quería verle, quería escucharlo susurrar de nuevo palabras de amor, la mano calidad que sostenía la mía me soltó, y yo trate de agarrarla pero no sentí mi cuerpo moverse.
Abrí los ojos y mi vista tardó un poco en enfocar lo que me rodaba, las cortinas del cuarto que compartía con Sasuke están cerradas pero no a totalidad, la luz seguía pasando por ellas, una de las ventanas se encontraba abierta, y desde mi lugar podía escuchar a las pequeñas aves cantar.
Moví mi cuerpo de lado y encontré a Sasuke dormido, había ojeras en sus ojos de nuevo, cuando estire mi mano para tocarlo vi que esta tenía una venda, estaba confundido, me volví a poner boca a arriba y estire mi brazo para observar mejor mi mano y los recuerdos del baño volvieron a mí.
Sentí una mano tocar mi mejilla y mire a Sasuke.
-Despertaste-dijo con una pequeña sonrisa adornando su rostro.- me acerco a él y beso mi cabeza.- te dije que no me espantaras de nuevo.
Pase mi brazo sobre su pecho y negué, el nudo en mi garganta me impidió hablar.
Permanecimos acostados hasta medio día o por lo menos eso fue lo que Sasuke anuncio cuando se paró de la cama para ir por un poco de comida, me ayudo a incorporarme, pero extrañamente me sentía mucho mejor, no sentía dolor alguno e incluso me atrevía a pensar que si me ponían una vaca enfrente me la acabaría completa.
Cuando regreso Sasuke puso una charola en mis piernas y un tenedor en mi mano izquierda ya que la derecha dudaba demasiado que pudiera cerrarla para tomar el utensilio, mire la comida en la charola y comencé a picar la verdura con el tenedor.
Sasuke se sentó frente a mí en la cama, su mano tomo el tenedor y capturo pedazos de melón para ofrecérmelos, yo abrí la boca sin quejarme, mastique y los pases disfrutando del sabor.
-¿Cómo te sientes?- pregunto después de meterme más comida en la boca.
Mastique un poco para después pasar el alimento.
-Bastante bien- dije antes de aceptar más comida en la boca.
Su mano bajo el tenedor y se acercó para besar mis labios, cuando se separó sus ojos estaban húmedos.
-Confía en mí, no solo trates de hacerlo tú solo, cuando pudimos entrar al baño, dios, no sabía si moverte, es la primera vez que no sabía qué hacer, mi corazón latía rápido, mis manos te tocaron y estabas tan frio.
-Lo sien...
-No. No, no me pidas perdón si no vas a decirme cuando no puedes más.
Baje mi vista a mis manos, el nudo volvió a mi garganta apretándola con fuerza y vi las lágrimas chocar con la fina tela que me cubría las piernas. La mano de Sasuke tomo mi barbilla para levantarme la cara y sus ojos seguían brillosos.
ESTÁS LEYENDO
- LA UlTIMA RONDA - (Sasunaru)
FanfictionEs curioso que una vez que te enteras que vas a morir, todo parece un sueño, irreal, todo pierde sentido, haces las mismas cosas una y otra vez, siguiendo una rutina ya establecida, te enfadas por cosas tontas y no te preocupas por vivir, hasta que...