FIRST LOVE ; bts TERMINADA

Capítulo 30. «Hermano mayor»

— ¡Kim Namjoon!

Eso fue lo que grité tras dar un portazo al entrar en mi casa. Con cada pisotón, dejaba claro la rabia que sentía. Sudaba de ira a pesar de que estábamos a tres grados Celsius.

— ¡Diablos, hija! —Se quejó mi padre desde la cocina. Llevaba una pila de platos mojados que, gracias a Dios, no tiró tras el susto de aquel ruido seco.

— ¿¡Dónde narices te encontrabas!? —En la voz de mi madre había una mezcla de preocupación e ira. Más eso último que otra cosa, pero sus manos temblaban de miedo.— ¡Te he llamado cincuenta veces! Y cuando por fin deja de comunicar, ¡Taehyung dice que te lo has dejado en su casa!

Obvié ese dato porque oír aquel nombre en boca de mi madre me dio demasiadas nauseas. La aparté de mi camino dándole un golpe en su hombro con el mío. No me hizo falta voltearme para saber que los ojos de papá estarían saliéndose de sus cuencas, y es que no podía soportar cuando mi hermano y yo nos pasábamos de brutos o listos con ella. Qué galán...

Con la ligereza y agilidad de una bailarina de ballet, me zafé del agarre de mi madre y me adentré al pasillo en busca del malnacido de Namjoon. Oía las pisadas rápidas de papá y mamá a mis espaldas, tapadas por sus ensordecedoras voces pero tenía un objetivo, y nada ni nadie me haría parar.

— Eres un hijo de puta. —Fueron las palabras que escupió mi boca tras abrir la puerta de su habitación. Provoqué sorpresa en el rostro de todos los presentes. Sorpresa amarga, he de decir, y es que no acostumbraba a decir tales obscenidades en casa.

— ¿Quieres que te pegue una hostia? —Contestó Namjoon poniéndose de pie y acercándose a paso ligero a mí.— ¿A qué ha venido...?

— ¿¡POR QUÉ MIERDAS NO ME DIJISTE QUE TAEHYUNG ME FUE INFIEL CON TU MALDITA NOVIA!?

Ahí, alzando la voz como nunca antes lo había hecho, derramando un mar de lágrimas y siendo irrespetuosa a mi hermano mayor, fue cuando, por fin, le cerré la maldita boca. No solo a él, también mis padres se quedaron rígidos como estatuas. El único movimiento que pude percibir a mi vera fue la mano derecha de mi madre siendo llevada hasta su boca.

— ¿¡POR QUÉ NO ME DIJISTE NADA!? LLEVO CREYENDO MESES QUE POR FIN LO HABÍA RECORDADO TODO, Y AHORA DE REPENTE, RECUERDO LO JODIDA QUE ESE MALNACIDO ME HIZO ESTAR. —Las palabras salían escopeteadas, pisándose unas con otras, creando un mar de balbuceos sin sentido.— ERES MI PUTO HERMANO, ¿NO? ¿¡ENTONCES POR QUÉ COJONES NO ME AVISASTE!?

— Hija... —Fue mi madre con su voz temblorosa la que, sin ningún resultado por mi parte, intentó tranquilizarme.

¿Pero cómo iba a conseguirlo? Todos los integrantes de esta familia me habían ocultado la verdad. Todos le conocían, sabían de nuestra historia y jamás me dijeron nada al respecto una vez desperté del coma. Namjoon fue un hijo de puta por no haberme contado nada, pero aquellas personas que decían ser "mis padres" habían sido igual de cobardes que mi hermano. Eso era lo que más me dolía, y por lo que no me atreví a mirarles a los ojos en ningún momento.

— Mamá... —Dijo Namjoon en un suspiro.— ¿Os importaría dejarnos solos?— Vi como agarró con su diestra la puerta, invitándome a entrar con su mano izquierda, temblorosa. Yo, cruzada de brazos, la aparté de mala manera con un codazo pero acepté su invitación.— Ya me ocupo yo de ella.

— Tsk...

Me senté en su cama sin miedo a romperla e hice oídos sordos a lo que aquellas personas cuchicheaban en el marco de la puerta. Pude escuchar un leve gimoteo por parte de mamá y la suave voz de papá. Pero nada de eso me ablandó ni un ápice. Estaba tan cabreada por culpa de lo sucedido con Taehyung y tan aturdida por haber encontrado otra pieza del puzzle de mi vida que ni ver a cincuenta cachorritos me ablandaría lo más mínimo.