Ahora que sabia qué tendrían a Nai más vigilado que de costumbre, debía ponerme en marcha. Necesitaba enamorarlo lo más rápido posible, eso es fácil, ya ha sufrido mucho con su relación masoquista de hace unos años. Él caerá muy fácil a mí.
-Aaron, ¿qué harás con lo que acabamos de escuchar? -Mí mejor amigo Shon preguntaba mientras comía un burrito que había comprado en la cafetería.
-Aparta esa cosa de mi cara, - Replique, no quería ensuciarme. Era muy asqueroso, -Es repugnante, ¿cómo puedes comer eso?
-Pues con la boc- ¡Auch! ¡Oye! -Le di un zape.
-Menso.
-Ya dejalo Aaron, ya sabemos que es un idiota. -Jasper se unió a la plática, -Hasta un baño de Japón es más listo que ese bruto.
-¡Dejen de burlarse de mí! -Corrio para estar frente a nosotros, casi tropezó y Troy soltó una pequeña pero audible risa.
-Ya, tranquilo niño.
Era divertido pasar con ellos pero aún seguía pensando en lo que debía hacer, ¿regalarle falditas y algunas medias le gustaría?
-A ver, diganme que le puedo regalar a Nai. -Dije en un toque serio. Todos se miraron entre sí.
-¿Acaso es tu novia? -Dijo Troy en tono burlón. Lo fulmine con la mirada. -Bueno, quizás deberías comprarle...
-¡Masculinidad! -Otra vez el pendejo de Shon interrumpía.
-¡Ya cállate!
-Lo siento, casanova. Deberías presentarle chicas.
-¿A él? - Jasper comenzó a carcajearse. Con un golpe el el hombro se calmo, gracias Shon hasta que haces algo bien, dije para mi.
-Pues no lo sé, ¿por qué nos preguntas a nosotros? No sé que le puedas regalar a un chico con falda.
-En eso tiene razón el burrito. -Jasper coloco ambas manos por detrás de su nuca. Hacia eso cuando estaba estresado.
-También deberíamos encargarnos de ese tarado de Alsy, ¡Ya sé que Troy se lo coja!
-¡Qué estúpido eres Shon! ¡Nunca haría eso! -Comenzaron a gritarse entre sí. Solo quería apartarme lo más posible de ellos. Hasta qué una melena negra se cruzó por nuestro camino.
Todos la miraron, esa pequeña complexión de su cuerpo, su cabello negro y casi notables facciones femeninas que tenía le daban un toque lindo.
-Mira eso. ¿Que no es Myler la hermana de Nai?
-Sí. Es ella.
-Qué suerte tienes Aaron, cada vez que vas a su casa puedes estar con ella.
-Ella trabaja en un club cerca de la oficina de ese tal Jeremy.
Voltee a ver al castaño que había dicho tal tesoro. Aunque iba muy seguido a la casa de Nai, su hermana siempre pasaba de largo de mí. Era muy extraña, ni siquiera su madre me había dicho dónde trabajaba.
-Oigan chicos, ¿no quieren ir está noche al bar ese?
-¡Sí! - Dijeron al unisono.
Quizás está noche podamos divertirnos mucho.
Narra Nai
Necesitaba hablar con Aaron ahora mismo, ¿cómo se atrevía a hablarle así a uno de mis mejores amigos? Alisson iba tras de mí cómo chicle pegado, había insistido en que dejara de seguirme pero no...
-¡Ay! Alisson, te dije que no vinieras.
-¿Y si te hace algo? Necesitó estar ahí para protegerte, soy cinturón negro. - sólo de su imaginación dirá.
-Como sea.
-¡Mira! -Apunto a un lado de mí cabeza al chico con el que habíamos estado en el almuerzo.
Estaba completamente solo leyendo un libro, en la portada llevaba el dibujo de una mariposa.-¡Si Alisson como sea, vámonos!
La lleve casi a arrastras, era muy pesada. Seguimos buscando por todos lados, aulas, gimnasio. Canchas, laboratorios, clubes, natación, biblioteca, teatro. En todo lugar pero no había rastro de él.
-¡Nai! -Cierta voz me llamo, al darme vuelta, aquella pelinegra se acercaba entusiasmada hacia mí.
-Myler, ¿qué haces aquí?
-Las clases ya acabaron, venia a avisarte que ya me voy a trabajar.
Por alguna razón, o por instinto de hermano no quería que fuera hoy, tenía una mala sensación.
-Mejor...vámonos juntos a casa. No vayas hoy.
-Tengo que ir. Hoy se va a presentar Laimon, sabes que he esperado porque ese grupo vaya a nuestro bar. ¡Dejame ir! ¡¿Sí?! - Agudizó la voz con tal de qué le diera permiso.
-Pero...
-Tranquilo Nai, mira yo voy con ella.
-¿En serio Alisson? -Los ojos de Myler brillaban como dos esferas en navidad.
-Claro, también me gusta esa banda. Sólo déjame ir por mi bolsa y nos vamos en mí auto.
-¡Sí!
-Ok, espera un segundo. Quedate aquí.
Alisson salio disparada hacia nuestra aula.
-Obedece a Alisson, y no llegues a casa tarde. Ella te dejara en la puerta de la casa, y por ninguna razón te separes de ella, ¿quedó claro?
-Ya Nai, te preocupas demasiado. -Solto un suspiro.
-Myler, -La tome del brazo, -No me desobedezcas, has lo que te dije, ¿estamos?
-Ya Nai sueltame, -Trato de liberarse pero no pudo.
-¿Estamos, Sí o no?
-Sí... Ya sueltame
La solté. Lo qué me había dicho Alsy me tenía un poco preocupado. Alisson venia con su bolsa en mano.
-Listo, ¿nos vamos?
-Sí. Adiós Nai. -Se despidió con un ademán y se fueron juntas hacia el estacionamiento.
Yo me iría más tarde con Alsy y Walter así que no había problema. Saqué mi teléfono y le envíe un WhatsApp a Alisson.
-Regresen con cuidado, y no le quites la vista a mí hermana. Diviertanse!-
Guarde mi teléfono y volví a mi aula.
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El chico de la falda Rosada. [Yaoi/Gay] [Editando]
Teen FictionNai Vander es el hijo mayor y cabecilla de la familia Vander, rival de la familia conocida por malas razones como los Evans. Un tanto cliché: Rivalidad convirtiéndose en un amorío juvenil. Combinando la vida empresarial con la vida privada, algo dep...