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"Está, es la primera vez que me siento así. Parecería que fue un monólogo escrito para nuestro encuentro, pero, como fuiste tu quien sufrió al final entonces me encargaré de transcribirlo, hasta que ambos seamos uno solo"

Desde hace media hora me había quedado dormido en la junta. Estaba aburrido y quería llegar lo más rápido a casa, mi pequeño Mika me recibiría con una cena porque el postre era él. Mientras los demás hablaban y proponían ideas comencé a jugar con mi bolígrafo, hacia rayones y garabatos a la nada en la mesa. Estaba tan concentrado que hasta me cree una historia, era la historia de un gato y un perro que estaban enamorados pero eran tan diferentes que nunca concordaban en qué hacer, así que el perro se suicido y fin.

-Jeremy -Levanté la vista para ver quien me llama. Mi padre estaba ahí con los brazos cruzados mirándome seriamente.


-¿Qué? Sólo dividan las transacciones y depositenlo en una cuenta bancaria en el extranjero. -Todos se miraron sorprendidos y comenzaron a susurrar diciendo que era una buena idea. Yo en cambio me levante de mi lugar y camine hacia la puerta de salida.

-Hijo, ¿a dónde vas? -Preguntó mi padre, me gire para verlo aún estresado. -Ya sabes que hoy vendrá tu hermano y su prometida Alisson.

-Hermanastro -Corregí. -¿Y eso qué? ¿Crees que me importa el compromiso de una persona que ni veo? Adiós, nos vemos después. -Dije, pero mi padre me volvió a llamar la atención, azote la puerta y volví a mi lugar enojado. -La puta madre, solo acaben con esto y ya. -Les dije a los planeadores que estaban haciendo más ruido del necesario.

Mi padre recibió una llamada que inmediatamente contestó, no fuera yo porque, ¡ay! Se me olvido. Sonrió alegré e hizo que pasaran a dos, "visitantes" a la sala.

-Buenos días. -Saludaron, mi hermanastro me cae pésimo, lo odio en serio, y ahora su prometida, Alisson Kick, debe se una maldita broma.

-Buenos días a todos. -Saludó esa bruja y abrazo a mi padre amablemente. -Hola rata. -Dijo en susurro refiriéndose a mí.

-Hola, trepadora.

-Rata de alcantarilla.

-Perra sucia.

-Gato en celo.

-Lesbiana con aires de grandeza.

-¡Oye!

-Bien, ya que tenemos a toda la familia aquí-

-¡No estamos todos! -Grité interrumpiendo de nuevo a mi padre.

-¡Jeremy ya basta! -Gritó está vez mi hermanastro.

-¡Tu cállate Rick! ¡Maldito estorbo!

-¡Niño imbécil!

-¡¿Ese fue un insulto?! ¡Pues que asco de insulto! -Volví a gritar.

-¡Ya basta, ambos! -Grito nuevamente el hombre frente a nosotros. -¡¿No se pueden comportar por cinco minutos?!

-¡No, porque este imbécil sigue aquí! -Apunté hacia Rick.

-¡Tu sigues aquí!

-¡¿Qué no tienes nada bueno que decir ojete?! -Alisson estalló en risas mientras que su prometido la miraba mal.

-¡¿Ah, si?! ¡Pues tu igual! -Que tonto es, con razón se fue y que bien por él.

-¡Ya basta! -Volvieron a gritar. -¡Jeremy, Rick, sentados! -Ambos no sentamos nuevamente molestos.

No sé si era la tensión del momento o es porque no nos hemos visto en un buen tiempo, pero si Rick y yo quisiéramos pelear, esto se resuelve en el campo de tiro.

Rick volvió a mirarme realmente furioso a lo que ambos comenzamos una batalla de miradas.

-¿Podrían dejar de hacer eso? -Habló Alisson.

-¡Ay! ¿Qué quieres niña? -Dije sin apartar la mirada.

-Se comportan como niños, sean los adultos que son y dejen sus juegos. -Estaba molesta, o avergonzada, alguna de las dos, ¿pero qué mas da?

-No gracias, mejor aprovecha y vete con tu novia Myler. -Se tenso al escuchar ese nombre. Se levantó, me tomó del brazo y me arrastro fuera de la oficina sin decir nada. -¡Oye! ¿Qué te pasa?

-¿Qué sabes de ella? -Me tomó fuertemente del sacó a lo que yo aparte sus manos de un golpe.

-Más cuidado, y no sé nada al respecto sobre tu novia, ¿crees que tengo tiempo para ver a que hora cagan esos imbéciles? -Me sincere. No tengo nada que ver con esa familia.

-No digas por todos, que aún sé que te sigue gustando Nai Vander. -Ay, ese nombre, esta tan hundido en mi corazón... pero por la vergüenza que me hizo pasar.

-A ese idiota lo supere desde ese día, Además, estoy comprometido y muy feliz, cosa que deberías hacer tu y dejar atrás el pasado, ¿por qué sigues arrastrándolo contigo?

-Pues porque...

-No me contestes, era una pregunta retorica no quiero saber el porque ni me interesa. -Arregle mi traje, y volví a peinarme nuevamente.

-Qué imbécil eres. -Soltó como una víbora y entro nuevamente a la oficina.

-¿Qué?

En algo me equivoque. Ella no es la única enganchada al pasado, yo también lo estoy, pero ese chico no se compara con nadie, dejo esa espina tan hundida dentro de mi que no he podido sacarla en todos estos años, realmente estaba enamorado de él, y debía ser realista conmigo mismo, Nai Vander era el único que habitaba completamente en mi corazón.

El chico de la falda Rosada. [Yaoi/Gay] [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora