Deja de correr... - Sonadow (FanFic En Español).

Sentimientos

Sonic comía un par de waffles con frutas y crema batida, estaba feliz por alguna razón, aunque la noche anterior no podía conciliar el sueño pues había sido demasiado incómodo, hoy tenía un aire de ser un día que prometía, y prometía bastante. Rouge le había confirmado las sospechas que el mayor y él tuvieron, Dayan era nieta de Danay, estaba esperando decírselo a su compañero cuando bajase a desayunar, era seguro que estaría contento de poder deshacerse de aquel cuatro ojos engreído que estaba dañando a la anciana. Danay estaba limpiando el lobby con su música como cada mañana, aspirando delicadamente cada espacio que tenía la alfombra, estaba muy alegre por la plática de aquella noche, aquel chico al fin estaba madurando como debía y estaba realmente orgullosa de que estuviese tomando sus sentimientos en serio. Mientras tanto, arriba en el cuarto, Shadow miraba hacia el jardín reflexionando todo lo que había pasado en tan poco tiempo, ¿qué tendría que hacer ahora? Seguía tan confuso en ese instante; ya había aceptado la verdad, incluso lo pudo admitir ante dos personas, pero todo en sí estaba hecho un revoltijo. Tomó aire, mucho, miró aquella cangurera de donde salía el collar; se abofeteó a si mismo, tenía que concentrarse, la reliquia le recordó su misión, nada de lo que sentirse era relevante para recuperar a Silver. Tenía que seguir con todo, el problema era que estaba seguro que ya no podía sostener esa situación más, cada día se sentía más débil ante aquél azulado.

Al bajar las escaleras notó a aquella anciana con una sonrisa que parecía que nadie se la quitaría. Cuando ella lo observó no pudo evitar sonrojarse, sabía lo que sentía y, aun sabiendo que no le diría nada a Sonic, no podía evitar pensar en todas las insinuaciones que le haría de ahora en adelante. Le dió los buenos días y caminó hacia la cocina; lo primero que miró al entrar fue aquella sonrisa llena de crema batida, con sus mejillas hinchadas por la comida dentro de su boca y aquellos ojos cerrados, pero notablemente alegres. Cerró la puerta rápidamente antes de que notará de que lo veía, tomó aire conteniendo sus emociones y lo soltó recordándose a sí mismo que actuara normal. Entró de nuevo, trató con todas sus ganas de ver a Sonic como un inmaduro por llenar su boca de esa forma y no limpiarse las mejillas; pero por dentro no podía evitar sentir que le latía el corazón por verlo de forma adorable.

–¿No puedes comer como la gente normal? – pronunció buscando una taza para café y un plato para su desayuno, el otro se sorprendió al oírlo, lo miró de espaldas, esperaba no tener un momento incomodo después de la noche anterior así que tragó

–Lo haría si esto no supiera tan rico. – se excusó el otro, aunque apenas se le entendía por tener aún el bocado.

–Eres solo un niño...– se sentó frente suyo sirviéndose y dando un sorbo de cafeína. Sonic tomó su vaso lleno de leche y tragó todo lo que tenía en boca sólo para poder hablar.

–Bueno, señor maduro amaneció de buenas. – colocó su codo en la mesa y su mejilla en su mano mirándolo pícaramente, cosa que no servía pues se había dejado un bigote de leche y, gracias a ello, Shadow casi escupe su café.

–Realmente eres un niño. – retuvo una carcajada y cubrió su boca con una servilleta. Tras cerciorarse de no tener alguna gota escurriéndole de los labios ofreció una servilleta al menor el cual la tomó y se limpió lo mejor que pudo... sin éxito pues aún tenía esa mancha blanca.

–Y tú eres un erizo amargado de cincuenta y tantos años.

–Los años que me mantuve criogenizado no cuentan más que como horas, así que no tengo tantos años.

–¿Entonces solo eres 2 años mayor que yo?

–Y cincuenta horas. – terminó su oración dándole una probada a los waffles, Sonic río tranquilo y limpió su boca con su brazo, cosa que Shadow prefirió no reprocharle.