Días de colores [Starker] EDITANDO

8. Fallas

Peter quedó conversado con Erick en lo que Tony volvía de los sanitarios, y realmente tenían bastante en común, como los gustos musicales, las películas, la física y matemáticas, etc.

Erick le comentó que es canadiense, pero que de un tiempo para acá, su familia y él se vieron obligados a mudarse a EEUU. Algo que Peter notó mientras hablaban era una bonita pulsera de la bandera gay en la muñeca de Erick. Luego el lo confirmó diciendo que es gay - lo que para Peter ya era algo obvio - y que antes tenía un novio, en Canadá, pero que terminaron por la distancia hace unos meses.

También hablaron sobre Peter, una de las primeras cosas que Fox preguntó fue "¿Hay alguna persona especial en tu vida?" A lo que Peter respondió con una mentira, No.

— ¿A quién esperas, Petepooh? — preguntó curioso

— Al... Al señor Stark, se está tardando un poco

— Ahhh, preocupado por tu amorcito, ¿No? — agregó una risa

— ¿Pe-pero qué dices? Él es solo mi... Tutor — dijo lo último con una gran desaire

— Así que le traes ganas al tutooor ¿Eh, eh? Vaya Petepooh eres todo un pícaro — Erick estalló en risas

— ¡Claro que no! Y no tienes como probarlo.

— Ah, ¿Eso crees? — Peter sintió su corazón sufrir un paro — Si es que no estás enamorado de él, ¿POR QUÉ las únicas dos veces que hablamos de él tu cara se incendió? O sino ¿Por qué tu fondo de pantalla es Tony Stark sin camiseta? O sino ¿Por qué lo tienen agregado como "Sr. Stark ❤️"? Ahora niegalo y quedarás como el mayor mentiroso de Queens

— ¡¿Cómo sabes lo de mi celular?! — Ya estaba muerto de vergüenza

— Lo ví cuando me acerque

— Oh... Ya veo... Y bueno, me descubriste, Erick. — Admitió sonrojado

— ¿Sabes Parker? Te ayudaré a conquistar a tu amorcito — Dijo con muchísima seguridad, en eso Erick vió a Tony aproximarse y decidió despedirse — Bueno, ya viene tu novio, hablamos luego, Petepooh — Erick se levantó de la banca y se perdió entre la gente.

Peter se levantó de la banca y caminó en dirección a Tony.

— Tardó bastante... Me preocupó.

— Lo siento, me distraje con algunas cosas, es todo — despeinó su cabello — ¿Me perdonas?

— Claro que sí, Tony — sonrió con calidez

El mayor se sintió cautivado, por primera vez su chico lo llamaba por su nombre y no le molestó para nada, más bien se preguntaba si sonaría tan bien si lo gemía, era todo un pervertido.

Pasaron el rato juntos. Muy juntos. En silencio, uno para nada incómodo, sino tranquilizante y agradable, Tony pasó disimuladamente su brazo sobre los hombros de Peter y lo atrajo hacia él y Peter respondió recostado un poco su cabeza hacia él, todo en completo silencio.

Tony se dejaba embriagar por el aroma del cabello de Peter, eso solo lo enamoraba más y más, en cambio Peter no podía sentir más protegido, como si en ese momento alguien chasqueara los dedos y destruyera la mitad de la vida y él no sentiría miedo.

Tony miró la rueda de la fortuna y luego miró al chico — ¿Alguna vez subiste? — preguntó. Peter negó con la cabeza — Pues es maravilloso, puedes ver mucho desde arriba, es muy bonito.

— Nosotros... ¿Podemos subir?

— Claro — contestó y ambos caminaron hacia la boletería.

Caminaron lento, mirándose de vez en cuando sin que el otro se de cuenta, ambos estaban ridículamente sonrojados.

Subieron, uno al lado del otro, muy pegados, con la excusa de que "no había espacio suficiente", las puntas de sus dedos e buscaban desesperadamente, las mejillas les ardían, ninguno sabía el porqué de sus reacciones. El corazón de Tony parecía buscar la forma de escapar de su pecho, latía demasiado fuerte. Llegaron a la sima tres veces en calma, contemplando toda la feria desde arriba y sientiendo la necesidad de besarse mientras bajaban, era como una especie de tortura que ninguno soportaba, la cuarta vuelta. Todo indicaba que por fin llegaría el tan ansiado beso para ambos, estaban tan cerca uno del otro... pero... No, hoy no era el día.

Peter sintió su piel erizarse, todos los pelos de sus brazos estaban parados. Algo malo estaba por ocurrir

— Alto. — cortó la distancia poniendo su mano en el pecho de Tony. — Algo no anda bie- — antes de poder terminar, una de las poleas, la que sostenía el lado de la banca de Peter, colapso. Un horroso estruendo se oyó desde la máquina de control y la rueda de detuvo de golpe, balanceándo peligrosamente la banca.

Tony lo tomó del brazo y lo aferró a el muy fuerte — ¡No te muevas! — dijo él

— ¡Señor Stark, tengo miedo! — confesó Peter — si caemos...

— No vamos a caer, te lo juro, te lo juro — Tony trató de calmar al niño, pero justo en ese momento la otra polea - la que sostenía el lado de Tony, y era lo único que evitaba que toquen el suelo - se soltó y Peter cayó primero soltando un grito.

Tony no tardó en reaccionar y desplegó el traje justo a tiempo, alcanzó a Peter y lo bajó en el piso. Estaba temblando. Luego volvió a subir para rescatar a las demás personas. Ya era hora de volver a casa.

Llegaron al complejo, Peter seguía temblando, pero ahora también estaba frío. Tony lo dejó en el sofá y fue por unas mantas, lo cubrió y se sentó a su lado

— ¿Estás bien...? — sabía que no.

— Lo volviste a hacer...

— ¿Qué?

— Me volviste a salvar — sonrió débilmente

Tony lo abrazó.

Peter sonrió.

— Tony... Me duele mucho el estómago... ¿Podría dormir hoy con usted? — dijo algo sonrojado.

— Claro, Pete. Ve a cambiarte ¿Ok?

Peter obedeció y fue a su cuarto a buscar su pijama de hello Kitty, el mismo que le había obsequiado Stark. Luego fue al cuarto de Tony y lo esperó sentado en el borde de la cama. Tony salió del baño y ambos se acomodaron en la cama.

— Señor Stark

— ¿Qué sucede ahora?

— Quisiera... Abrazarte — Tony sintió su corazón derretirse y accedió. Luego de eso Peter se durmió profundamente.

El mayor también lo abrazó y besó su frente — Peter Parker... definitivamente eres el amor de mi vida — dijo antes de pegar un muy suave beso en sus labios y quedar profundamente dormido, abrazado a él.