Lo fácil y lo simple

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Andrea vio entrar a Vania al salón algo tarde, aunque como la profesora no había llegado todavía ella pudo pasar sin problemas "Qué raro que no llegues a tiempo" "Tenía algo que hacer" Alejandro entró justo unos segundos antes que llegase la maestra de matemáticas "Disculpen por la demora, había mucha cola en la impresora" traía consigo las copias para la clase de ese día, era el tipo de profesora que no quería que sus estudiantes fueran a recoger los materiales ni le hicieran favores. 

"Hoy, a pedido de la directora, vamos a trabajar problemas en los grupos de tutoría, no solo queremos que se conozcan sino que sean capaces de hacer sinergia" Entre algunas quejas y murmullos subversivos, todos cambiaron de sitios para agruparse "¿Alguien aquí es bueno en mats?" Beatriz estaba ansiosa por saber si alguien podía ayudarla, a lo que Vania, Andrea y Leonardo levantaron la mano inocentemente sin saber que gracias a eso serían esclavizados para hacer los ejercicios en su mayoría. 

Esa vez Alejandro no dijo ni una palabra, estaba en su mundo, cosa que extrañó a Hans "...este... ¿sucede algo?...¿Alejandro?" el futbolista volvió a la realidad y se apresuró a contestarle a su amigo "¡Ah! No es nada, me siento algo cansado... no he dormido bien..." la perspicaz Vania interrumpió la conversación "Deberías aprender a mentir mejor, si no te sientes bien es mejor que vayas a la enfermería en lugar de venir a clases" La ligera hostilidad de Vania tomó desprevenido a Alejandro, quien hizo un esfuerzo para aterrizar completamente en la Tierra y apoyar a Archi. 

Tal y como pretendía la dinámica, todos los ejercicios tenían más de una forma de ser resueltos y requerían de muchos tipos de enfoques para llegar a la respuesta correcta, por lo que el subgrupo de tres personas en Archi fracasó a los diez minutos de empezar y se tuvo que integrar el resto para resolver un problema. 

Finalmente, el único grupo en terminar toda la ficha era Archi, el cual estaba empezando a ganar popularidad a nivel de todo el grado, se estaba convirtiendo en el grupo de mayor unión y efectividad jamás visto, todos aportaban de alguna manera y resultaba increíble creer que cada uno podía convivir con personas distintas. Andrea hizo una acotación ante ese hecho "En el fondo todos somos seres humanos corrientes, puede suceder que nosotros apelamos al lado común en cada quien y es por ello que no podemos llevarnos mal, porque eso significaría que no te soportas a ti mismo".

Ya era hora de la salida, Andrea salió embalada con Leonardo para su reunión del consejo "¿Avisaste a tus padres?" "Estoy en ello" "Verdad que no tienes un celular con internet... te sería útil". 

Apenas llegaron al aula designada se toparon con la noticia de que eran los primeros en llegar "Leo, ¿Qué se supone que debemos hacer?" "Ah, es simple, como se acercan las vacaciones y todos los clubes quieren hacer algo, debemos apuntar todo lo que se vaya a hacer y su finalidad educativa, designar un presupuesto dentro de los márgenes que nos pone el colegio, fijar horarios de tal manera que no afecten las clases regulares y promocionar la actividad para incentivar la integración" "Eso no suena simple..." "Se hace todos los años al parecer, ya existen formatos que deben ser repartidos a cada club que los solicite. El tema es que una actividad como esta abarca a todas las comisiones del consejo, por eso trabajamos juntos. Quizás hoy conozcas al tesorero del consejo, es el trabajo más simple, así que no lo vemos muy seguido con nosotros" "Que sea simple no significa que sea fácil..."

Leonardo salió a conseguir copias del formato de solicitud de presupuesto y en eso entró Óscar en el aula "Hola, Andrea, ¿Desde cuándo estás aquí? ¿Y Leonardo? No importa, ya todo fluirá, seguramente ya ha empezado a trabajar, sinceramente, él debería descansar un poco de vez en cuando..." "Conoces bien a Leo" "Algo así, él siempre es así cuando se trata del consejo, es el que más se esfuerza y el que menos brilla, siempre algún encargado de las comisiones o el mismo presidente se llevan el crédito, pero por alguna razón a Leonardo no parece molestarle... Bueno ya, mucha charla, Katia debe estar por llegar

Mi tiempo y el nuestroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora