Mi tiempo y el nuestro

El final de la fiesta

Alejandro no se había separado de Celeste en toda la noche, habían conversado de todo, bailado más de la mitad de las canciones y probado todos los bocaditos que la anfitriona había dispuesto; pero a pesar de todo no estaban cansados de tenerse al lado. 

Los dos se habían alejado del barullo para poder tomar aire "Me había olvidado lo divertido que es estar contigo" ella sonrojó ligeramente "Tonto... ya sabes cómo me pongo cuando dices esas cosas" "¿Tonto yo?" La pareja rio y luego hubo silencio, ambas miradas se encontraron y ninguno apartó la vista por algunos segundos "Sí... tonto tú" repentinamente, Celeste se acercó e inclinó hacia arriba colocando un beso sobre los labios de Alejandro. Él estaba sorprendido y atónito, y ella aprovechó ese instante para regresar rápidamente a la fiesta y huir así de la vergüenza.

Alejandro tardó un rato en reaccionar y decidir volver adentro, pensó que probablemente Celeste no estaría cómoda con él cerca por un rato, así que decidió ir a ver a sus amigos de Archi, pero solo encontró a Vania, a su hermano, Beatriz y a Gianfranco "Buen día" Los hermanos alzaron la cabeza en señal de saludo y Beatriz estaba hipnotizada viendo la pista de baile "Ale, ¿qué tal? ¿Y Celeste? ¿Se han peleado o algo?" su amigo lo amenazó en broma con el puño "No, no... nada de eso" Vania alzó una ceja "Estás rojo" "Pues sí... hace calor" "Acabas de entrar, no es posible que tengas calor" "¡Pues sí lo tengo!" "Tampoco te veo molesto, es más, diría que eres feliz" Alejandro sonrió "Es verdad, lo soy". 

Celeste estaba a lo lejos chismeando con sus amigas, quienes parecían asediarla de preguntas "Amigo, ¿qué has hecho?" "Técnicamente yo no hice nada..." Vania se dio cuenta finalmente de todo "Ah ¿Se acaban de besar por primera vez?" Gianfranco volteó inmediatamente a ver al capitán a la cara "¿Es cierto eso?" "Este..." Beatriz se incorporó a la conversación ni bien escuchó el comentario de Vania "¡¿Se besaron?! ¿Recién? Llevan olmost a yir" "Este..." Alejandro estaba aturdido y con los pensamientos revueltos "A juzgar por tus respuestas y reacción diría que fue ella quien tuvo la iniciativa" "Pienso lo mismo que mi hermana" "Este... voy por algo de tomar" la huida de Alejandro fue un éxito, nadie quiso interrogarlo más.

***

Gianfranco estaba pensativo mientras veía a su amigo alejarse "No sé cuándo es que Celeste creció tanto..." Vania se levantó de su asiento y se le acercó "Así funciona el tiempo, aunque solo se lleven un año..." Beatriz dijo que iría a chismear con las amigas de Celeste y que pronto regresaría, pero a nadie más que a ella le importaba realmente ese asunto. 

Después de un rato, Andrea y Leonardo regresaron a donde ellos se encontraban, ella se fue directo a sentar al lado de Francisco y revisar que sus padres no le hayan escrito nada al celular, pero Leonardo se topó con Gianfranco "Te vi bailar, no sabía que lo hacías tan bien" "Tampoco es para tanto ¡Ja! ¿Sigues aquí? ¿No quieres intentarlo tú también?" "En un rato, quiero tomar algo de aire ahorita" el ex tesorero salió de la habitación para refrescarse mientras que Leonardo se sentaba al lado de Vania "¿Seguro que te quieres sentar aquí? Hay un sitio más allá" "¿Eh? ¿Eso a qué viene?" Francisco, el hermano de Vania, empezó a reírse ligeramente "¿Tus amigos son así de despistados siempre?" "No todos son como nosotros, hermano".

Ya era de madrugada, Andrea había estado conversando con Leonardo casi todo el tiempo y apenas había probado los bocaditos que Beatriz había dispuesto; Vania y Francisco se quedaron sentados casi toda la noche observando y tomando un vaso de refresco; Gianfranco había desaparecido entre la multitud y ahora andaba con el equipo de básquetbol conversando; y Alejandro se la pasó divagando con sus amigos del equipo de fútbol mientras veía de reojo a Celeste, quien se mantuvo, asimismo, con sus amigas.

La fiesta estaba por terminar, ya los invitados y los colados empezaban a retirarse, incluso Vania y su hermano se fueron, pero los últimos en quedarse eran los amigos de Leonardo de otros colegios, la mayoría estaba bajo los efectos del alcohol echados en el piso o desparramados en una silla "Leo... tus frends están algo..." "Me lo imaginaba..." 

Alejandro y Celeste por fin se encontraron de nuevo, cada uno ligeramente incómodo, pero conforme conversaban esta sensación iba desapareciendo; Gianfranco esperaba a su hermana para poder volver; y Andrea tenía que irse, ya era bastante tarde y había pedido un taxi para regresar a su casa, así que se despidió de todos y Beatriz la abrazó "Gracias por venir, sis, avísame cuando llegues a casa seif" Leonardo hizo una acotación "Avisemos por el grupo cuando cada uno llegue". 

La susodicha se retiró y dejó al resto encargarse de los borrachos. El ex bohemio conocía las direcciones de la mayoría y muchos de ellos todavía se podían poner de pie y caminar, así que ya casi todos estaban embarcados a sus hogares "Solo quedan ellos dos" Leonardo se acercó a los dos estudiantes alcoholizados "'Migos, y'acabó el tono, ¡vuelvan a su jato ya oe! Que hay que ordenar esta wea" "¿Ya me botan? Ñafo pes" Uno de los borrachos le pasó la voz a su compañero de que debían irse y se marchó, pero este no se quería mover "¡Chúpame la pinga, 'chatumare!" "Bea... creo que este es violento..." "¡Akguort!" 

Gianfranco se acercó al grupo "Ey, tengo que irme ya, pero Celeste sigue con Alejandro... ¿podrías pasarle la voz, Leo?" él acató la petición y fue a buscar a la pareja dejando a Beatriz con el borracho y Gianfranco "¿Qué tiene este?" "No se quiere ir y... ¡aj! ¡Its dirti! También es violento" el ex tesorero se acercó al chico "Ey, tienes que irte ya" "¡Bótame pes, mongol!" "¡Te boto pes!" el borracho le escupió a Gianfranco "¡Calla triste gil! 'cha me vas a botar 'chesumare!" 

En eso Leonardo regresa con Celeste y Alejandro "Gianfranco, aquí te traigo a tu hermana y tu cuñado" La pareja enrojeció "¿Nos tenemos que ir ya, hermano?" "Así es... pero primero, ¡Ale! ¡Leo! Ayúdenme con este sujeto" Entre los tres cargaron al borracho por sus brazos, se despidieron de Beatriz y lo llevaron a la calle "¡Aquí te quedas! Leo ¿No sabes su dirección?" "Noup, no lo conozco siquiera, debe ser algún colado" Todos se encogieron de hombros y dejaron al alcohólico en la calle con una casaca encima "¡Qué los jodan a todos!". Luego cada quien pidió un taxi y se fue por su camino.