Capítulo 12 ••SERIA UN PLACER SER FOLLADA POR TI••

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Capítulo#12 SERIA UN PLACER SER FOLLADA POR TI

Hoy era viernes y las clases están por culminar, todos están hablando de la gran fiesta que está organizando Liana y a la cual se suponía que tenía que ir con mi novio.

Terminé de guardar mis cosas en mi mochila y le mandé un último mensaje a Alex preguntándole si iría conmigo pero él me dejó en visto y no respondió.

—Que te pasa Blue.

—Tu primo, eso es lo que me pasa.— respondí enojada.

—¿Y ahora que hizo Alex?

—Se supone que el tendría que ir conmigo a la fiesta y hasta ahora no tengo noticias suyas.

—¿Quieres que hable con él?— asentí ante su pregunta.

—Harías eso por mi Romina.

—Por supuesto que sí tonta.

—Te amo y supongo que irás con las chicas.

—No pensamos dejarte sola.

La abracé y le di un beso, después salimos del salón donde nos encontramos a Liana.

—Hola Azul, espero verte en la fiesta y obviamente acompañada de tu novio.— quería romperle la cara de burla que tenía.

—Claro Liana ahí estaremos Alex y yo.

—Muy bien los vemos más tarde.— ella desapareció de mi vista.

En la salida me encontré con Valeria que ya estaba en el auto.

—¿Porque tardas tanto? Llegaré tarde a mi clase de ballet.

—Lo siento Vale— me disculpé con ella y nos fuimos.

Justo llegando a casa me llegó un WhatsApp de Alex diciéndome que nos veríamos a las 8 pm en la fiesta, estaba que brincaba de la felicidad y ahora el problema sería pedir permiso.

Estuve hablando por un largo rato con mi papá porque mi madre era un manojo de nervios, él me dijo que debido a mi buen comportamiento tenía derecho a salir a la fiesta con mis amigas y hasta me dió permiso de quedarme en casa de Laura, hasta ahora todo iba perfecto.

Guarde mi cosas en mi mochila y el chófer me llevo a casa de Laura. Al llegar Romina y Jenna ya habían llegado, entonces nos comenzamos a alistar ya que teníamos poco tiempo.

Después de un par de horas estamos completamente listas, le mandé un WhatsApp a Alex avisandole que nos veríamos en la entrada de la casa de playa de Liana y él me mandó una carita feliz en respuesta, él sí que era un chico raro.

Yo me había puesto unos shorts color blanco con un top azul rey y unas sandalias blancas llenas de piedritas de colores, el cabello me lo alciaron y me aplicaron un poco de pintura en la cara.

El conjunto de Laura era un vestido verde menta y unas zapatillas de plataforma beige, con su peculiar cabello rebelde.
Jenna llegaba una mini falda rosa, blusa gris con una chaqueta blanca y sus sandalias casi como las mías. La que si iba hechando tiros era Romina, ella era la más hermosa de las cuatro se pusiera lo que se pusiera siempre se miraba hermosa; hoy llevaba un vestido amarillo que se amoldaba perfectamente a su cuerpo acompañado de unas zapatillas plateadas y su cabello en una coleta.

La gran mentirosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora