La fórmula para que te quedes a mi lado

Parte 21

Ya en la actualidad, hubo una reunión de las naciones, las cuales estaban preocupadas, ya que, había un tema delicado sobre la mesa, era la solicitud de Reino Unido para retirarse de la Unión Europea, siendo la primera vez que uno de los países que la conforman lo solicitaba desde su creación.
El hecho fue desconcertante para muchos países, pero, más para Francia, ya que, el conocia mejor que nadie el actuar del británico y está acción no parecía algo que haría, por eso, luego de la presentación de la decisión de retiro de Inglaterra con sus aliados y la promesa de mantener los beneficios que tenían con los países de Europa para no afectar a ningún ciudadano implicado, Francia se reunió con el inglés en su despacho, entrando de manera apresurada y enojado.
Francia:Dime, ¿Qué rayos significa está decisión?
Inglaterra: Lo que oíste, me retiro de la Unión Europea, creo que será una buena decisión para mis ciudadanos y me abrirá más puertas de tratados sin perder la que tengo con ustedes.
Francia: Es estúpido lo que estas haciendo, piensalo ...hemos vivido de manera pacifica en Europa gracias a la creación de este grupo, ¿no es eso lo que todos deseábamos?
Inglaterra: Solo ustedes, por mí, esos años estuvieron bien...pero, mi sistema económico es sostenible y el apoyo que tenemos de manera recíproca no se va a acabar, así que, puedo remontar solo y de buena manera. No veo inconvenientes.
Francia: ¿Que te pasa? Te éstas volviendo como eras en la época que te aislaste de los demás. Escuchame...actúas como un novato o es que éstas siendo manipulado? (Se sorprendió de sus propias conclusiones y más por pensar quien estaría detrás de este accionar).
Inglaterra: Escuchame idiota, está decisión es solo mía, nadie ha intervenido en mi elección ni mucho menos me están manipulando. Simplemente creo que es hora de afrontar las futuras decisiones que me depare el futuro solo y si puedo ayudar a Europa no objetare ello.
Francia: ¿Pretendes salvarnos si estamos en dificultades? Todos somos grandes potencias ¿acaso no te haz acordado de eso?
Inglaterra: Tú eres el que no recuerda quien me arrastro en la segunda guerra mundial.
Francia: Esos son errores del pasado, ahora podemos sostenernos y que mejor acción si nos apoyamos entre nosotros.
Inglaterra: Mi decisión está tomada y no pienso dar marcha atrás, además, mis ciudadanos han apoyado está moción. No hay nadie quien me obligue a realizar cualquier tipo de acción.
Francia no pudo contenerse más y agarró del saco del inglés llevándolo contra la mesa del escritorio, desprendiéndose dos botones de su camisa, lo cual, dejo en evidencia un collar del cual colgaba un anillo, cuando iba a pronunciar una palabra, entró en la habitación América, quién de manera inmediata los separó poniendo a su espalda al británico.
Inglaterra: Idiota, no te metas en mis asuntos.
América: Lo siento, pero pensaba que necesitabas ayuda.
Inglaterra: Si la necesitará hubiera gritado, tú nunca piensas antes de actuar, eres una molestia.
Francia (sorprendido): Inglaterra ¿ese collar? ¿Qué hiciste?
Inglaterra al darse cuenta de ello se sonrojo y guardo el collar entre sus prendas, a lo que, América se apersono a Francis para susurrarle algo al oído, por lo que, pudo observar su anillo en el cuello que tenía igual al del inglés.
América: Alejate de Inglaterra y no digas nada, o sino, tus ciudadanos van a sufrir las consecuencias.
El francés palideció al oír ello y más al observar la cara de sonrisa despiadada del americano.
América se alejó de él tocando su hombro.
Inglaterra: No digas tonterías América.
América mirando al inglés sonrió de manera gentil: No le dije nada.
Inglaterra: Francia, será mejor que no te metas en mis asuntos.
Francia tocándose el rostro: No te dirá nada
Inglaterra lo miró y América lo tocó de la cintura haciéndose que ambos se marchen.
Francia: Inglaterra...el hecho de que estés alejado de él lo mantenía inseguro, ahora ese mocoso contigo a su lado no va a tener escrúpulos con nadie.
Ya en la casa de América, el joven comenzó a besar al británico mientras lo sostenía abrazado de la cintura, a lo que intentaba safarse, pero los besos del joven eran más intensos que se entrelazaban sus lenguas que hacían que el inglés no pueda respirar.
Inglaterra comenzó a apartar al amerincano: Escuchame...que le dijiste a Francia...