Narra _____:
-¡Detente me estás lastimando! ¡por favor Gerard!... basta- lloraba deseando que me soltara.
-Shhh... deja de llorar cariño- tiro de mi cabello haciendo que mi cara se levantara y el accediera mas a mi cuello -Te haré mía - gruñó acorralandome contra una de las paredes -completamente-.
Besaba mis hombros e intentaba deshacerse de mi brassier, quería huir, desaparecer, morir, o algo odiaba esa sensación de impotencia que me provocaba. Quitó mi brassier y besó mis pechos sin cuidado, me dolía y me provocaba gemidos de dolor pues los mordisqueba fuertemente.
-Me gustan, eres perfecta- decía apenas entendible.
-Te odio- logré decir.
-No nena, tu me quieres y me deseas- me miró sonriendo.
Y le escupí la cara.
Para luego arrepentirme.
Pues sus ojos se tornaron obscuros y jamás lo había visto tan furioso, esto dejó de ser un juego desde hace minutos y estaba comprobado. Limpió su cara con su camisa y tiró de mi cabello con fuerza.
-Jamás lo vuelvas hacer- me gritó y me cargó dirigiéndose a su recámara.
Moría de miedo, estaba tan atacada en llanto que no podía hablar. Cerró la puerta tras el y me empujó, caí en el piso llorando sin parar. Se acercó a mi y me levantó tomándome del cuello.
-No te quedarán ganas de volver a escupirme- me tiró a la cama y se puso sobre mi -Te foll.aré aquí mismo- metió su mano en mis jeans.
-No... no Ge.. Gerard- le rogé -Por favor cariño basta -intenté ser amable para detenerlo.
El no tenía freno estaba mas que cabreado y me lastimaba con cada movimiento. Desabrochó mis jeans y metió mas su mano frotandola sobre mis pantis. Era brusco y no dejaba de susurrar maldiciones y cosas sucias. No sabía como detenerlo, nunca pensé en perder mi virginidad de esta forma, no con él, no así.
-Soy Virgen-.
Dije y paró en seco.
-¿Que?- me miró incrédulo.
-Soy virgen- susurré y maldijo de igual forma. Miró mis ojos por unos segundos mas y luego se quitó de encima.
Abandonando la habitación y terminando la peor pesadilla de mi vida.
¿Que diablos habia pasado? Me acomodé en la cama, debía buscar una camisa o algo para cubrirme e inmediatamente tomar un baño, pero tenía miedo de salir ¿que tal si Gerard estaba afuera? Podía arrepentirse y regresar a la cama. No sabía que hacer tenía frio y ganas de llorar, un maldito vacío ocupaba mi pecho. ¿Que había pasado? No lograba asimilarlo... Gerard intentó violarme, comprendí y me hundí en llanto.