El pasado siempre vuelve |Marco Asensio|

CAPITULO 6

Ahí estaba Igor, que se encontraba en uno de los sillones que había en el dormitorio, y su hermano estaba sentado en la cama apoyando su espalda en la pared y lógicamente con su pierna extendida. Estaba vestido con una camiseta blanca de manga corta y un pantalón corto de estos que suele usar para jugar con la selección. En su pierna tenia como una especie de rodillera, que supongo que le ayudaría a no mover la rodilla. Los dos hermanos parecían muy sorprendidos de verme ahí.

-¡Amber!- Igor se levanto de su sitio y vino a darme dos besos seguidos de un abrazo- ¿que haces tu aquí? - me dijo una vez que nos separamos y volvió a su sitio-.

-Pues nada, vine a ver al cojo- intenté ser lo mas graciosa posible, mas que nada para quitarle hierro al asunto y ademas romper un poco el hielo.

Pude ver como habían pillado mi broma porque Igor se rió y su hermano sonrió. Me acerqué a él, quien no me quitaba la mirada de encima y no se por qué. Me agaché hasta su altura para darle dos besos.

-¿Como estas?- me senté a su lado en la cama y le miré directo a los ojos, solo de esa forma sabría si me mentía o no.

Marco suspiró

-Que quieres que te diga, para nada bien- negó con la cabeza para luego agacharla.

Se notaba que no le gustaba hablar mucho del tema pero tenia que saber si estaba bien.

-Pero...¿la operación salió bien?- cuestioné con todo el tacto que podía porque presentía que todo era muy reciente y no le agradaba el monotema.

-Que va, si todavía no le han operado.- intervino su hermano mayor mientras andaba con el telefono.

Fruncí mi ceño extrañada. Eso no era lo que me había contado la ultima vez que hablé con el.

-¿Que? ¿Por qué?- exclamé a la vez que paseaba mi mirada de uno a otro, esperando una respuesta.

-Están buscando a el mejor medico para que me opere-Marco capturó mi mirada y me quedé unos cuantos segundos mirandole diractamente a los ojos sin decir nada.

Hago una mueca con mis labios, sinceramente no se que decir.

-Y, ¿te duele?- observo con mas detalle su rodilla que estaba inmovil sobre el colchon.

-Ahora mismo no, depende del momento también, si camino o si estoy quieto-. Hizo una mueca con su boca.

-Bueno, por eso debes quedarte quietecito y no liarla...- no me dió tiempo a terminar la frase cuando habló el mayor de los Asensio.

-¿Que tal por Ibiza, Am?- Igor intentó cambiar de tema mientras dejaba el telfono a un lado y se incorporaba un poco colocando los codos sobre sus rodillas.

-Mucho guiri por allí. -bromeo rodando los ojos. Hace unos años siempre haciamos chistes sobre ello- bien, en Ibiza siempre te lo pasas bien. - le contesto ya en plan algo mas serio-.

Llamadme loca, pero en cierta parte me veía obligada a intentar hacerles olvidar todo lo ocurrido, aunque fuera por unos minutos. Se que no soy nada graciosa y que mis chistes son lo peor pero la intencion es lo que cuenta. Ademas, habia conseguido que se rieran, aun que sea por compromiso...

-Siempre te gustó Ibiza- mencionó Marco volteando a verme con una sonrisa espectacular en la cara-.

Fui incapaz de devolverle la mirada. Su comentario hizo que mil mariposas se revolvieran en mi estomago. Habia vuelto esa sensacion de adolescente que solo conseguía sacarme el.

Únicamente asentí con mi cabeza, mirando a todos sitios, menos a el.

-Emm y ¿cuando volvisteis?- ahí estaba Igor metiéndome en un aprieto. Mordisqueo mi labio inferior un tanto nerviosa-.