Ay~ El amor ꒰⑅ᵕ༚ᵕ꒱˖♡

🇲🇽 Solo tú y yo 🇷🇺

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Rusia caminaba por las frías calles de Moscú. Todo estaba en silencio, un sobrio paisaje gris ante sus ojos.

Copos de nieve caían lentamente, los pocos que no se acumulaban en su ushanka se le enredaban en el cabello.
Vaho salía de entre sus labios ante cada suspiro, perdiéndose en el ambiente a los pocos segundos.

A lo lejos, divisó su casa, la fachada aburrida y triste le daba la bienvenida. Una vez en la puerta, saco sus llaves con lentitud y entró.

El interior era cálido y hogareño, con colores más alegres y muchas fotos descansando en las paredes; sin prestar atención, se quitó el pesado abrigo y el gorro, dejándolos en el perchero.

Avanzó arrastrando sus pies hasta su cuarto; se sacó las botas y los pantalones, lanzándolos a una esquina. Después desabrochó su blanca camisa y la cambio por una cómoda blusa de tirantes. Finalmente, se arrojó a la cama, lista para dormir un poco.

Una hora después de que llegó la mujer, un hombre repetía el mismo trayecto, gorro y abrigo en el perchero, pasos perezosos hasta la habitación, zapatos y pantalones al mismo rincón y otra camisa de botones arrojada en el cesto.

Con cuidado se sentó a la orilla de la cama y admiraba a la eslava. No sé resistió al deseo de pasar su mano entre los largos cabellos de Rusia. Se veía tan tranquila descansando.

Su vista recorrió con ternura su cuerpo. Los delicados pies que daban paso a unas tonificadas (y sexys) piernas; las redondas caderas, cubiertas por unas panties negras, unidas a un abdomen plano y definido. Los dulces y perfectos pechos que subían y bajaban ante cada respiración; los delgados brazos de la mujer, que daban paso a un par de hermosas manos, y en una de ellas, la izquierda para ser exactos, se mostraba orgulloso un anillo, símbolo del compromiso entre ambos.

Un suspiro enamorado salió de los labios del latino, mientras sus ojos se posaban en el rostro de su prometida. Era tan hermosa, su frente blanca y lisa, un hermoso color azul donde estaban sus ojitos, enmarcados por unas largas y femeninas pestañas. Después el color rojo que se adueñaba del resto de su cuerpo; su hermosa boca, entreabierta para dar paso a su respiración, se veía tan tentadora.

Agachándose ligeramente, comenzó a repartir besos por toda la carita de la fémina, su frente, sus mejillas, incluso en sus ojitos cerrados. Por último, unió sus labios en un tierno beso que terminó por despertar a la mujer.

Un poco desorientada por el sueño, correspondió suavemente a la caricia, separándose después de unos momentos.

- Buen día, chikistrikis.- saludo México recargando su frente en la de ella

- Buen día, cielito.- correspondió mientras abría sus ojos para ver los del norteamericano.

- ¿Te he dicho hoy, lo hermosa que te ves?- pregunto separándose lentamente.

- No, aún no me lo dices, taquito.- susurro con una melodiosa risita.

- Pues déjame decirte que hoy luces bellísima, princesa.- dichas esas palabras, tomo una de sus manos y beso con cariño sus nudillos.- Te amo, Rusia.- dijo acercándose nuevamente a su rostro.

- Yo también te amo, México

Porque no importaba si ese fue un día de mierda y a ambos les fue de la chingada.

Si México y Rusia escuchaban un te amo, de los labios del contrario...

El día se volvía el mejor de todos

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Pues no quedo tan mal, es la primera vez que llegó tan lejos :^)

Sugerencias o comentarios son bien recibidos ╰(*´︶'*)╯

Muchas gracias por leer, espero que tengas un día excelente!

Te mando mucho amor y nos leemos en la próxima

(｡･ω･｡)ﾉ♡