Mackenzie y el cáliz de fuego | [MEH #4]

Capítulo 18: ¿Quién es ella?

- Estoy aquí por Hermione, Madame Pomfrey.

Me encontraba frente a la enfermería. No había llegado a tiempo para detener a mi mejor amiga, pero toqué la puerta y la enfermera salió. Me examinó por unos segundos y me dejó pasar. Hermione estaba llorando tapándose la cara y juntando sus piernas a su pecho. Me acerqué lentamente y coloqué una de mis manos en su hombro.

- Mione, todo va a estar bien... Madame Ponfrey te curará y...

- ¡Me burlarán durante todo un mes, o más! ¡Y todo por el imbécil de Malfoy! - exclamó y se detuvo un momento. - ¡Además ahora no podré ir al baile de Navidad!

- Hermione... Tranquilízate... En serio que mi primo es un estúpido y Snape un insensible pero debes demostrarle a los demás que no te interesa, tienes que mostrarte indiferente.

- ¿Por qué? - sollozó ella.

- Porque sino se alimentan de tu mal estar y disfrutan verte mal cuando ellos fueron los que lo causaron... - le expliqué mirándola a los ojos con mucha sinceridad. - Haz como si nada hubiera pasado y, si te llegan a decir algo, tú los ignoras o... puedes insultarlos con algo peor - dije y nos reímos. - Por favor, Mione.

Ella asintió por última vez y me abrazó con fuerza para luego susurrarme:

- Pansy se lo merecía totalmente.

Sonreí.

- Al menos me quedo aquí y no entre el lío de ropa de nuestra nueva compañera de cuarto.

- Es un poco... desordenada, ¿no?

Stella. Una de las alumnas que fue seleccionada junto con los de primer año a principio de curso. Pero, realmente, era de cuarto año.

- ¿No te parece raro?

- ¿Qué? - preguntó Hermione.

- No sé, que vaya tan a su mundo... No habla con las chicas de Gryffindor.

- Pero está mucho con tu hermano - agregó Hermione.

Pestañé varias veces.

- ¿No lo habías notado?

- Pues no - negué. - ¿En serio?

- Está claro que a ella le gusta.

- ¿Pero qué dices?

- En serio.

- No, no... ¿Dean lo sabe? - pestañé varias veces.

- No lo creo - Hermione alzó los hombros. - Siempre está observando hacia la mesa de Hufflepuff.

¿A quién conocía mi hermano que fuera de Hufflepuff?, pensé, pero Madame Ponfrey me distrajo cuando me pidió que me fuera, diciéndome que Hermione estaría mejor para la noche.

Me perdí el almuerzo pero agarré un sándwich rápidamente del Gran Salón para después correr hacia la clase de Snape. Por suerte, no llegué tarde y me senté junto a Ron. Tendría que hablar con él en algún momento. Harry me miró y me sonrió, asintiendo con la cabeza.

- Antídotos es lo que veremos hoy, que componentes tiene, cómo elaborarlos y...

La puerta del salón se abrió dejando pasar a Colin Creevey, rojo como un tomate y sudando de los nervios.

- Profesor Snape, me pidieron que venga a buscar a Harry Potter.

Snape abrió los ojos como dos platos y miró a Harry con desprecio.

- ¿Para qué?

- Dicen que quieren a los cuatro campeones y creo que van a tomarles unas fotos.

Harry se puso más rojo que Colin y tomó sus cosas para irse de la clase. Se produjo un silencio y comenzamos a leer los libros. Miré los ingredientes: