Capítulo 14. Pelea hasta morir

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Inuyasha y yo estamos en un bar en cual terminamos cuando la policía se enteró que huí de ahí. La chica rosa dijo que no era mal lugar para quedarse, razón por la cual se quedó ahí y no quiso espacar con nosotros. En realidad sus palabras fueron:

Me da flojera irme de aquí, luego huir, no, no puedo hacer eso. Mejor me quedo aquí, total tiene una cama no está nada mal, además, mi deseo es que el jodido policía me lama no solo los pies.

Aunque estoy considerando que terminar aquí fue una mala idea. Este lugar está inundado de hombres y mujeres muy fuertes, con músculos. Estoy pensando que este es un bar para solo gente que boxear porque ¡joder! Un abrazo de estás mujeres y creo que varios de mis huesos terminarían rotos.

Estoy bebiendo mi segunda cerveza viendo a Inuyasha quien coquetea con la mesera que es la única que parece una chica normal. En realidad la chica es muy bonita, una dulzura en su mirada me hace considerar que ella es muy ingenua y dulce para estar trabajando en este lugar. Suspiro apartando esos pensamientos cuando ella de manera muy abierta le muestra más que sus servicios como mesera a Inuyasha. Estoy por decirle que se quite la camisa para que así Inuyasha pueda disfrutar de sus tetas mejor.

Miro a mi "esposo" y luego miro en anillo en mi dedo. ¿Cómo terminé de esta manera? Cierro los ojos al sentir que el alcohol está haciendo su efecto. Lamo mis labios viendo como estos hombres y mujeres tienen un jodido karaoke, pero ninguno lo usa, creo que en realidad le da vergüenza que alguien los vea cantar, parecen tan masculimos incluso las mujeres, supongo que ganarse el respeto de estos hombres no es tarea fácil es por eso que muchas hacen cosas más masculinas que los mismos hombres.

Recuerdo que antes de que Inuyasha sea un bastardo traidor era realmente bueno en el karaoke. De hecho, nos encantaba ir al karaoke y hacer dúos, claro que no tengo la mejor voz, pero él hacía que mi voz se oiga decente con la suya. Miro la pequeña tarima de karaoke con nostalgia. Creo que el alcohol me está poniendo nostálgica. Que ridículo.

Miro de nuevo a mi tan fiel esposo que se acerca para besar a la chica y es entonces cuando sonrío. Un hombre robusto sujeta su hombro de una manera para nada amable, Inuyasha hace una mueca girandose con pose de chico malo y que matará a alguien, a una dócil cubado ve a
la estatura gigante y musculosa que es este hombre. Cruzo mis piernas para ver este espectáculo en primera fila.

—¿Quién demonios te crees para estar tan cerca de mi florecita?—pregunta el hombre fuerte e inmediatamente todo el lugar queda en silencio, la música para y todos miran a Inuyasha fomo si fuese una cucaracha que van a pisar.

—Ella consintió eso—dice dandoselas de macho alfa pecho peludo, pero puedo ver que es mentita, de seguro esta apretando fuerte su vejiga para no orinarse.

—¿Eso es cierto hijita de mis ojos?—su voz suena que si confirma eso se las verá con él.

—Es mentira papá, este tipo está loco—chilla mirándolo con una cara de horror. Bebo otro vaso de cerveza viendo el ritmo que lleva esto.

—¿Te crees muy macho para mentirme a la cara?—le grita y hago una mueca de asco al ver que algo de su saliva cae em el rosteo de Inuyasha quien limpia de manera tranquila donde cayó esa cosa pegajosa que se ve muy mal.

—Yo no me lo creo, lo soy—el hombre se acerca de manera peligrosa dejando su rostro cerca de Inuyasha. Su cara permanece dura y su cuerpo tenso.

—¿Eso crees?—pregunta y me acomodo para ver como harán papillas a Inuyasha esta vez.

—Claro—responde sin titubear y quiero aplaudirle por lo valiente que se ve. El jodido idiota es bueno en su papel de hacerse el macho alfa pecho peludo.

Alocado Matrimonio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora