—¿La Tetrodotoxina B está haciendo efecto?—preguntó el hombre mirando a la chica acostada en una camilla con doctores atendiendo sus heridas de bala rápidamente.
—Por supuesto que sí—contestó la mujer a su lado mirando la escena igual desde un cuarto con un vidrio que permitía ver lo que ocurría en la otra habitación.
—Bien—sonrió levemente.
La mujer que le disparó a la chica miró a el hombre con sólo un lente en su ojo.—Aún no comprendo porque la quieres viva—suspiró frustrada.—¿Sólo por la tonta idea de destruir a los Vengadores?
—Porque, mi querida Alice—miró a la mujer castaña a su lado.—puedo utilizarla cómo utilizaron a Barnes para así poder crear algo más grande—regresó su vista a lo que antes observaba.—pero además...—sonrió.—también para destruirlos. Dos pájaros de un sólo tiro de gatillo.
—Ésto puede acabar mal—mordió su labio inferior.
—Para eso está el cetro—rió para después caminar a la salida de la habitación dejando a la castaña que soltaba un suspiro preocupada a pesar de todo.
—Estás loco, Barón—susurró mirando a la hija de Stark frunciendo el ceño.
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Después de una pérdida tan dolorosa e imprevista cómo la de María Stark, nada siguió igual.
La chica que llegó a unir la familia de Los Vengadores ya no estaba entre ellos dejando un vacío en los corazones de todos.
Ya había pasado un año y aún así los sentimientos de culpa, dolor y tristeza era latente en los individuos aunque algunos encontraron manejar mejor la situación que otros.
La Torre Stark, era ahora llamada y mejorada; Torre Vengadores, a la cuál Tony hizo varios arreglos mejorando la seguridad del lugar y cambiando todo.
Tony Stark aún lloraba la muerte de su hija aunque conseguía contrarrestar el dolor atendiendo a Anthony. Pepper era de gran apoyo para él y se lo hacía saber todos los días.
Clint y Natasha se entristecían aún más por Steve quién muy poco salía de su habitación o de la habitación de María. Cuando había misiones repentinas se le notaba un poco desenfocado pero lograba completar con éxito todo.
El dolor de Steve era fuerte, no se podía explicar cuánto extrañaba a la persona que le devolvió la vida. En las noches los insomnios se hacían presentes no dejándolo dormir y cuándo lo lograba, las pesadillas sobre la muerte de María y él no pudiendo hacer nada lo levantaban asustado y sudado, después de enfocarse el sentimiento de culpa lo asfixiaba haciéndolo llorar sin consuelo alguno.
Amanda, después de unos días de la muerte de su hija, decidió regresar a Chicago para intentar distraerse con los deberes de las sucursales, aunque a ella se le veía peor que todos y nadie la culpaba, había perdido a su única hija. Elizabeth, John y Ice regresaron a misiones con Fury, las cuatro personas también tenían los sentimientos encontrados.
Bruce se la mantenía en su laboratorio distrayendose aunque a veces recordaba unas cuantas cosas que comenzaría a hacer con la chica que causaba una presión en el pecho del Vengador.
Todos los días era una tortura.
Thor llegó a ir unos tres meses después, cuando se le informó, se lamentó mucho el no haber estado presente.
Ahora, un años después de la muerte de la chica, aún seguían los planes de venganza hacía el detectado; Barón Strucker. También intentaban localizar el cetro de Loki que fué robado después de lo acontecido en SHIELD, y todo tenía relación con el hombre de un sólo lente en un ojo. Con más razón querían encontrarlo.
Aunque, que pasará cuando se enteren de que María está ¿Viva?.
