Tauro

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¿Tenía que curarlo o dejarlo morir?

No le agradaba la idea, ella siempre ha luchado por proteger a todo ser viviente, claro que estaba el pequeño detalle que ese ser que tenía al frente la trato de matar una vez. Pero todos merecen una segunda oportunidad.

- Si lo curas ella muere - dice un hombre apareciendo con un hada entre sus brazos, el chico tenía el cabello rubio y ojos de color rojos, piel bronceada y tenía unas pequeñas alas de ángel en su espalda.

Tauro lo mira extrañada - ¿Y tú quién eres?

- ¿No sabes quién soy? - pregunta él.

Ella niega con la cabeza y mira al hada que tenía la boca tapada.

- Es uno de los hijos de Afrodita - explica el herido con la respiración agitada.

Tauro lo mira dudosa -¿Pero Eros no tiene la apariencia de un bebé?

- No soy Eros niños inculto, soy Anteros dios del amor correspondido y no correspondido.

- Él ayuda a que Eros no ande en pañales.

- Mis padres solo me tuvieron para ser la niñera de mi hermano - se queja él y lo dice con tal despreció que a Tauro le causó tristeza.

- Es triste escuchar eso, pero el hada no tiene la culpa. Si la suelta y me deja curar al asesino, te puedes poner de acuerdo con él para matarme después - se expresa la castaña con una sonrisa y moviendo las pestaña.

- ¿ Sabias que ellos son tú pruebas? - le pregunta Anteros - Es una prueba de vida, el hada tiene un veneno que le está corriendo por sus venas y tienes que crear un antídoto. Pero el signo de Ofiuco fue golpeado con unos látigos que contenían ácido y le está comiendo la piel muy lentamente. Tienes que elegir cual de los dos vas a salvar y la decisión correcta te dará el sello del signo zodiacal.

- ¿Que? - es lo único que puede decir Tauro y cae de rodilla al suelo, solo una vida tiene que salva.

- Yo no importó salva a tú hada y vete de aquí, dejame morir en paz.

Anteros se ríe y mira a la castaña - Sabes muy bien que necesitas a los 13 signos zodiacales, pero el hada está bajo tú custodia. ¿Que harás?

Tauro estaba mirando sus manos que conectaba a la tierra, el elemento era vida, los árboles, las flores, la fauna y la flora, los bosques y la selva era vida pura. No podía elegir uno sólo, su madre que le enseño desde siempre a querer a todos los seres vivos y no juzgar se sentiría decepcionada si solo ayudaba a uno y dejaba morir al otro.

- Ayudame - susurra a la tierra y entierra sus manos en ella - eres vida no dejes que ninguno de los dos muera.

- Esto no depende de la madre de la naturaleza depende de ti - Anteros se arrodilla frente a ella y la sostiene por la barbilla - El milagro tendrá que venir de tú capacidad para sanar.

- No soy una doctora y tampoco mis poderes son sanadores - Tauro lo mira a los ojos, aguantando las ganas de llorar. Eso era para débiles que se rendía fácilmente...

Se queda pensativa ante esa idea - Nosotros los signos Tauro no nos rendimos, siempre logramos lo que nos proponemos.

Anteros sonríe y se levanta abriendo los abrazos - ¿Cual de los dos eliges?

Tauro sonríe y con una mirada determinada responde - A los dos, elijo sanar a los dos.

El dios del amor toma al hada y se la lanza a los brazos de la chica tierra. Tauro la sostiene antes de que el hada se golpeara contra el suelo y ella le sonríe - Felicitaciones mi señora, ahora eres oficialmente el signo Tauro.

El hada comienza a brillar de un color, Tauro cierra los ojos y siente una calidez rodeandola.

- Abre los ojos.

Tauro le hace caso a Anteros y no ve a la hada, comienza a buscar por todo el lugar, tampoco estaba Ofiuco. En eso se fija en ella misma y ve que estaba descalza, tenía un vestido corto con estampados florales. Ve que también traía puesto un collar con un pequeño dije de hada, que se parecía mucho al hada que debía sanar.

- También tienes unas hermosas alas, ese collar te da alas para poder volar y conectarte con la naturaleza - explica Anteros con una sonrisa de paz - Tenía que demostrar cuanto era tú determinación, porque la vas a necesitar.

- Yo no lo creo querido hijo - dice Afrodita que llevaba junto en ese momento, con el verdadero Ofiuco, el signo del tigre y otro mas - Te presentó mis amigos, ya los debes conocer. Ofiuco el signo de la culebra y los signos zodiacales chinos. El signo del tigre y el conejo, dos ellos y yo te mataremos en este momento para vengarnos de tus amigos.

Tauro la mira como si estuviera loca, que no lo dudaba y le dice - Primero contar los planes ya paso de moda, segundo la venganza es mala mata el alma y la envenena y tercero guerra avisada no mata soldado.

- Pero en está sí - furiosa Afrodita saca un lazo y está dispuesta en atacarla.

Antes de que le tocará un solo cabello, Antero se coloca frente de ella y forma un tipo de campo protector - Vete y busca a tus amigos.

- ¿Y tú? - le pregunta ella enojada, por alguna extraña razón odiaba que las personas siempre la defendiera y ella no tuviera más opción que huir.

Tauro enojada vuela por los cielos y comienza a brillar, estira sus manos y trata de conectarse con la madre tierra - Escuchen mi llamado, escucha mis rezos, no permitas que estás malas personas salgan con la suya. Defiende tus tierras y demuestran quién es el elemento más fuerte.

Los árboles comenzaron a temblar, las flores a crecer y las raíces de las plantas comenzaron a expandirse por todo el suelo, hadas, gnomos, ninfas salieron de su escondite y se reunieron junto con la naturaleza.

— Si no se van ahora mismo,  los convertiré a todos ustedes en árboles con olor a fresa — furiosa Tauro se coloca encima de una rama y comienza hacer magia con sus manos.

Afrodita furiosa no tiene más opción que retirarse.  Tauro y todos que la apoyaron festejan,  pero la expresión de ella cambia al ver que Ofiuco si estaba lastimando.

Cuando iba a ir detrás de él,  siente un mareo y cae de la rama.  Faltando poco para tocar el suelo, Leo aparece y la sostiene entre sus brazos.

— Perdón por llegar tarde — le dice él con culpabilidad.

Ella niega con la cabeza y sonríe — Siempre llegas en el momento que más te necesito (hermano)

Los Herederos del Zodiaco.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora