Los Herederos del Zodiaco.

Capítulo 20

Había confundido a Orión con Ofiuco y nadie me aviso :c eso no che hace chicos.

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Los doces chicos estaban viendo la casa desde afuera, a los lejos se notaba lo descuidaba que estaba y también al mismo tiempo lo bella que era. Era una casa de tres pisos y sus ventanas eran vitrales que representaba la época media.

Escorpio que tenía unos lentes de sol se los quitas y silba — Se nota que los antiguos dueños tenían plata, pero si me lo preguntan yo le quitaría los vitrales.

— Si dan miedo — es lo que dice Tauro dejando su maleta en la acera de la casa — ¿Entramos?

— Hay un pequeño detalle — dice Aries a sus espalda — El idiota de nuestro guardián no nos dejó las llaves.

— Saltamos la reja — fue la repuesta de Leo que ya estaba montados en la reja y saltando al otro lado.

— Un día de estos sus impulsos arrebatados me van a volver loca — se queja Sagitario con sus amigos.

— Y regresará como la Patrona, para tomar venganza — se burla Piscis de su amiga.

— Yo también entraré — dice Cáncer deja sus cosas en el suelo, escala la reja y salta junto con Leo, le sonríe y luego se acuesta en el césped para dormirse.

Leo que lo veía mira a sus amigos — Yo quisiera ser tan relajado como él.

Escorpio suspira y también sube la reja, salta y camina hacia la mansión — Tal vez entremos por la ventana o las cerraduras de la puerta son tan viejas que ya no sirvan.

— Y si mejor Virgo deja de ser el niño bien y manipula el hierro para que lo obedezca — sugiere Géminis que estaba con los brazos cruzados mirando al signo de la tierra.

El joven castaño cierra los ojos, sin responder a las provocaciones de Géminis. Trata de concentrarse en las cerraduras de las puertas, para que hagan lo que el quisiera. Pero en vez de destruirla o quitarlas, hace que se abran todas las puertas de un solo golpe.

— ¡Eso es lo que en Avatar llamarían Tierra Control señores! — emocionada Piscis entra y comienza a correr por todo el jardín abandonado — Es enorme y veo una piscina vacía, también un jacuzi y una fuente.

— Yo quiero ver eso, la regresaremos a la normalidad y nadaremos en ellos. Hasta en la fuente — dice Cáncer emocionado y despertando de su sueño.

— ¡Piscis y Cáncer esperen que yo también quiero ver! — grita Escorpio olvidando el susto que le dio Virgo cuando abrió las puertas.

— El jardín es enorme, podremos nuevos árboles y que vuelvan a crecer flores — Tauro respira el aire fresco y luego mira con tristeza el césped seco.

— Mientras que no sean rosas, te ayudó — le dice Capricornio feliz de su nueva casa y ver a sus amigos tan felices — Y lo mejor de todo es que la casa fue gratis.

— A mí esas ventanas me dan miedo — se queja Libra de seis años que se escondía detrás de Acuario.

— Ya verás como rompemos esos vitrales — le dice su hermana de elemento, le sonríe y la carga — Entremos para ver que otros arreglo hacemos y así también escogemos las habitaciones.

— ¡Genial! ¿Mi habitación puede estar cerca del tuyo?

— Claro que si pequeña Libra.

— Yo voy con ustedes —  habla Géminis tomando las maletas de él y de sus amigas de elemento aire — Quiero la habitación más grande.

Los signo de fuegos se ven y esperan que los de aire entren a la casa — ¿Pondremos el escudo? — pregunta Aries a sus hermanos.

— Si, ya lo mejore para que ninguna persona que nos desee el mal entre — dice Leo sacando una bolsista roja que tenían 13 cuarzos, cada uno representaba a los signos zodiacales.

— Bien, mientras que los demás están arreglando la casa, nosotros la protegemos —  Sagitario toma la bolsista y saca las piedras — ¿13?

— Ofiuco y su elemento es el agua — explica Leo tomando las manos de sus hermanos de corazón.

Aries se ríe y concentra sus energía, su sello brillaba. Pero se sentía raro al ver que los sellos de sus hermanos no — Agua y Tierra no se llevan, ¿Quién se lo dice a Tauro?

Leo sonríe de medio lado y regaña a sus hermanos — También dicen que Aire y Fuego se la llevan de mil maravillas, pero mirarnos. Géminis y Libra nos odia.

— Ya silencio, después hablan de sus problemas con los signos de aire — lo regaña Sagitario — Concentre en hacer el campo de protección.

Los tres elementos fuegos cierran los ojos y se concentran en crear una especie de ovalo dorado que cubre la casa, purificando el agua, el aire y la tierra. Porque el fuego era eso, purificador de la magia y de los corazones.

— Listo — dicen los tres al mismo tiempo y se desmayan también al mismo tiempo.

— Eso debió doler — fue la respuesta de Libra que  regreso a la normalidad y había visto  a los signos de fuego hacer su trabajo.

— Son poderosos — dice Géminis que también lo había visto todo — Y muy peligrosos.

— Es mejor no hacerlos enojar Géminis, puede ser un gran error. Tú no vistes a Aries perder el control — le aconseja Acuario.

— Perder el control y sufrir por eso — recuerda Libra con tristeza.

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