Aries

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El chico al escuchar esas palabras comienza a reírse y es que no podía creer lo que decía la mujer. Un signo tan poderoso, temido más que el signo de Escorpio. Un signo que representaba la fuerza, la voluntad y el carácter, el fuego mismo hecho en persona era del sexo femenino.

— Me estás jodiendo, ¿verdad? — le pregunta él sin parar de reír. Su estómago ya estaba doliendo por tanta risa.

— ¿Jodiendo? No conozco el concepto de esa palabra. ¿Por qué te ríes tanto? No te he contado ningún chiste — la mujer le reclama furiosa, entonces une sus dos armas en una sola, creando una hermosa lanza, donde su bastón era de oro sólido y el filo de la lanza fue creada por rubíes precioso, esa lanza desprendía un poder asombroso.

Sin decirle nada gira el arma por encima de su cabeza, para luego agitarla a dirección del castaño. De la lanza sale un fuego que le da en el pecho, haciendo que el joven dejará de reír y lo tumbara a varios metro de distancia.

— Está lanza fue creada por los tres signos de fuego — le  explica ella — Lanza fuego que viene directamente del sol, su bastón fue creado por tres flechas del Centauro que fue inspiración para el signo de Sagitario y su lanza es un rubí creada por la sangre derramada del Dios de la guerra. Es letal y sus quemaduras son mortales, porque te quema desde adentro. Claro al menos que seas el signo para quién fue creada. Aries, pero como aquí hay dos Aries, la lanza está un poco confundida. Si te quieres curar y salir con vida, la lanza tú me debes de quitar.

Aries que escuchaba todo eso trata de levantarse, pero no podía. Le ardía mucho el pecho, como si lo estuvieran quemando desde adentro. Como ella dijo, por subestimarla ahora iba a morir como idiota.

— Muevete — le escucha decir — Al menos que quieras más quemadura en tú hermoso cuerpo.

Aries con esfuerzo logra levantarse, pero al hacerlo se sorprende por lo que ve. La mujer estaba demasiado cerca de él y lo peor es que le da un rodillazo en la boca del estómago, provocando que le sacará todo el aire. Una vez más cae, pero está vez ella le sostiene por los cabellos para que la viera a la cara.

— Que patético eres — se burla ella — ¿En verdad tú fuiste escogido para ser mi reemplazo? No se que pensaba mí Leo cuando te escogió.

— ¿Leo? — pregunta él con dificultad

— No te equivoques mocoso, mí Leo es muy diferente al tuyo. Nuestro líder si sabia hacer las cosas y no estaba desmayándose a cada rato. Nuestro Leo sí era un líder en todos los sentidos, no como tú. Era fuerte, valiente y muy noble de corazón. También era un presumido de primera y todas las peleas las batallaba él sólo, ganaba y no se iba desmayando como una damisela en apuros.

Aries siente una quemadura en el estómago, pero no a causa de las heridas. Si no por lo que decía ella, el antiguo líder era un Leo. Aunque eso no era lo peor, lo más grave es que se estaba metiendo con su amigo, con su hermano.

Sonríe y la mira a la cara para contestarle — Si tú jefe era tan bueno, ¿Por qué se murió?

Ve como la morena cambia su expresión a una de enojo y le da un cabezazo, regresandolo al suelo. No se arrepentía, había válido la pena.

— Por que el muy imbécil se enamoró, el peor error que puede cometer un signo es enamorarse. Leo lo hizo y nos puso en peligro a todos — le dice enoja, ve como gira su lanza una vez más y se prepara para atacar.

Pero el chico sabía muy bien que hacer, para que se olvidará de su dichosa lanza y comenzó a hablar — Nuestro Leo es mil veces mejor que el tuyo, es desinteresado y sabe trabajar en equipo. ¿Sabe lo que es mejor? Que no se ha enamorado como un imbécil.

Los Herederos del Zodiaco.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora