I'm Allison Montgomery

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-No tienes que hacer esto.- La chica trataba de alejarse de la horrible figura que tenía enfrente, topándose con un árbol en el intento.

-Creeme, no quiero hacerlo.- Se agachó frente a ella y la tomó con delicadeza de la cara, examinandola mientras ella temblaba, con sudor y tierra revueltos en su cara, manos, uñas y partes de su cuerpo.- Pero tengo que hacerlo, por que si no lo hago- la soltó y vio sus lágrimas caer, sacándole una sonrisa digna de un psicópata.- todo se echará a perder, tendré que empezar desde el principio, con más muertes y mas sangre, sin un puto error más.- Se levantó y sacó una navaja en su bolsillo.- ¿Estas dispuesta a dar tu vida para salvar la de muchos otros o quieres que te deje vivir a cambio de la vida de una docena de personas?- La vio sollozar y sonrió más fuerte, si eso era posible.- Serás recordada como un héroe.

La arrastró de las piernas mientras ella gritaba, gritaba y gritaba, sintiendo como su garganta se desgarraba al mismo tiempo que sus manos al tratar de buscar algo de lo cual sostenerse...

Despertó

Despertó sudando frío y con... ¿Un bracket despegado? El mejor día de su vida.

Miró el reloj a su derecha.

4:59 a.m.

Se frotó la cara con las manos y las llevó a su cabello, recordando que en unas horas empezarían un nuevo ciclo escolar.

Se levantó a duras penas y tomó una ropa interior nueva y una toalla, para luego adentrarse en el baño y cerrar la puerta con seguro.

Se acercó a la ducha e hizo a un lado la cortina.

Sus ojos se abrieron de par en par, sintió como su cuerpo se petrificaba completamente, tirando al suelo lo que llevaba en sus manos.

El enmascarado estaba ahí, o más bien... ¿La enmascarada?

Su cabello era largo, sujetado por una coleta, usaba una chamarra negra deportiva al igual que unos leggins y unas botas gruesas del mismo color.

Era un poco más baja que Paige, pero aun así sintió miedo de tenerla bajo el mismo techo.

-¿Qué quieres?- Preguntó mientras temblaba.

-Alguien mucho más importante para ti sigue, Paige.- Su voz era fina, comprobando así su teoría de la enmascarada.- Necesitas atar cabos, seguir las pistas, necesitas... ser paciente.

Seré paciente por ti, papá.

-Date prisa, o de lo contrario será muy tarde.- Dio un paso fuera de la tina y se acercó a la ventana en su habitación.- Cuando es muy tarde... inocentes salen heridos.- Saltó de esta, dejando respirar por primera vez a la chica, que sintió como sus lágrimas se aproximaban y mojaban sus mejillas para después caer sobre la alfombra de su habitación.

El sentimiento de angustia, tristeza, ansiedad, escalofrío, soledad, pánico... todos volvieron en una fiesta.

Ella era la fiesta.

***

-¡Imbécil!- Le dio una bofetada que resonó por todo el salón. Por suerte estaba solos.- ¿Quien vergas no distingue entre un cuerpo femenino y uno masculino? ¡Estas bien ojete!

La pelirosa paseaba de un lado a otro por el salón, tomándose la frente con una mano y la cintura con la otra.

-¡Estaba tomado! ¿bien? ¡Estaba levantándome de una fiesta de universitarios! ¿Entiendes la palabra? ¡Universitarios! -Se agarró el cabello con fuerza y lo apretó, deseando que el sentimiento de culpa se fuera.

-¡Ojete!

-¡Idiota!

-¡Tu eres el único idiota aquí!

Ambos soplaron y golpearon lo primero que tenían cerca, luego se sentaron en silencio mientras veían sus manos.

-No vamos a decirle.- Decidió Paige por fin.

-¿No es mejor decir la verdad?- Su paranoia solo se hacia mas grande con cada decisión.

-Matthew, con todo respeto.- Rayan habló por fin.- Deberías hacerle caso a Paige. Creeme cuando te digo que no estás en condiciones de tomar decisiones... u opinar.

-Bien, dejen de recordarme mi miseria, por favor.- El castaño se volvió a poner su gorra y vio su celular.- Las clases ya van a empezar, larguémonos de aquí.

Los tres se levantaron al mismo tiempo y salieron del salón de química, pero Rayan detuvo a la pelirosa.

-Paige, emm, yo pensaba si...- Tomó los extremos de su mochila aún más fuerte y cerró los ojos unos segundos.

Vamos, solo escupelo, si no acepta dile que es un reto, la vieja confiable ¿cierto?

-Si podiamos ir a comer algo después de la escuela.- Se sonrojó un poco y se acomodó las gafas para disimular.

-Oh, claro. Pero no a los mariscos, Brook se pondrá del tamaño de un globo.- Tuvo intenciones de irse pero Rayan la detuvo por segunda vez.

-Yo hablaba de... tu y yo, sin Brook o Matthew.

-¿Rayan Bennet me está invitando a una cita?- Dijo en tono de burla para después reír un poco.

-Solo olvidalo ¿Quieres?- Rodó los ojos y el sentimiento de rechazo se hizo presente, irritandolo un poco.

-Hey...- Lo detuvo y la volteo a ver por última vez.- Claro que quiero salir contigo, idiota.

Le dio un abrazo y un beso en la mejilla, luego se fue del lugar dejando a Rayan en su lugar, petrificado ¿Aceptó ir con él a una cita?

Al instante se emocionó y se fue del lugar, a primera hora le tocaba con el señor Waters, el profesor de Álgebra.

-Buenos días.- Su entusiasmo era igual que el de todos esa mañana.- Bien, saquen sus cuadernos.

El profesor se dio la vuelta y empezó a escribir en el pizarrón, dando paso a la clase del día.

Mientras explicaba y nadie prestaba atención, una chica entró al salón de clases, llamando la atención del profesor.

-Buenos días ¿Puedo pasar?

-Adelante.- La chica se acercó y le tendió un pequeño papel, que luego dejó sobre su escritorio y miró a su clase.- Bueno, al parecer tenemos una compañera nueva. Presentate.

-Yo soy Allison Montgomery, un gusto conocerlos.- Les regaló una sonrisa cálida a sus compañeros, que le sonrieron de vuelta de manera boba o solo le miraban las piernas y trataban de ver más allá.

-Bien, siéntate donde sea, no interesa.- Respondió con indiferencia para seguir su clase.

***

-Es en serio, hay algo extraño con ella.

-¿Que? ¿Es una asesina serial y nosotras somos sus próximas víctimas o...?- Brook hizo cara de sorpresa fingida.- ¿Acaso ella es la enmascarada?

-No se ni para que les platico.- El azabache se dio media vuelta y se dirigió a la máquina expendedora, dejando a Matthew y Brook hablando solos.

Le enojaba que nadie le prestara atención en eso, el estaba seguro de que esa chica no estaba ahí solo por que decidió cambiar la ciudad por un pueblo en medio de la nada.

Allison era alta, puede que de la misma estatura que Paige, también era bonita, con ojos color azul grisáceo que, hasta ahora, tienen hechizados a media escuela -En su mayoría hombres-. Tiene un buen cuerpo y su cabello color café claro es lo que mas llama la atención al verla por primera vez.

-¡Allison va a competir contra Paige!- Un chico salió corriendo por los pasillos mientras gritaba, el era compañero de Rayan en Educación Física.- ¡Allison acaba de retar a Paige en Poker!

"¿Acaso dijo poker?"

"¿Allison? ¿la nueva? Oí que viene de la ciudad, tal vez por fin alguien le gane a Paige."

"¿Será que alguien por fin la derrote? Cristine murió en el intento."

"¡¿Poker?! Esto se va a poner bueno."

Personas susurraban mientras corrían en la misma dirección que el chico, emocionados por ver quien le ganara por primera vez a Paige en Poker, que se ganó la medalla de oro por derrotar a cada uno de los estudiantes de su escuela, fueran o no de su grado.

-Bien, empecemos.- Liam iba a repartir las cartas, quedando a la izquierda de Paige y a la derecha de Allison.- Nada de trampas, por favor. Abra muchas personas viendo.

Liam sacó un juego de cartas nuevo, revolviendo y repartiendo dos a cada jugadora.

-Dijiste que vienes de la ciudad ¿No es cierto?- Dijo Paige, tranquila. Ella estaba segura de que iba ganar viera sus cartas o no.

-Si, vengo de Nueva York.- Respondió, con indiferencia.

-Mmm... nada mal.

Paige tenía un Diez y un nueve de corazones, mientras que Allison seguía con una "Q" de trébol y una "K" de diamantes.

Liam dejó sobre la mesa tres cartas, un ocho de tréboles y una "Q y una "J" de corazones.

-Hagan sus apuestas.- Liam habló por segunda vez, llamando su atención.

-Subo cinco mil.- Dijo Paige por fin, haciendo que todos dejaran un grito ahogado y empezaran a susurrar entre ellos.

-¿Estás segura?- Preguntó Liam.

-¿Que? ¿Es muy poco?- Estaba más tranquila de lo normal, como si fuera un día cualquiera y ese dinero no significaba nada.-Subo diez más.

Los gritos y susurros se hicieron más fuertes y eso emocionó a Paige, que dejó escapar una sonrisa cínica de su rostro, que se agrandó aún más cuando vio que Allison tenía la misma expresión.

-Subo treinta mil.- Declaró la de pelo café, haciendo que se desatara una tormenta en ese pequeño salón donde llevaban Lengua los de primer grado.

Paige sintió admiración hacia la chica ¿Aun sabiendo que iba a perder, iba a apostar aún más de lo que probablemente pueda pagar? ¿Estaba... tratando de intimidarla?

Claramente perdió la cordura, al igual que ella.

Liam acercó otra carta y la giró.

Un seis de diamantes.

Paige sintió la adrenalina por su cuerpo. Estaban apostando cuarenta y cinco mil dólares, lo que la ponía cada vez más emocionada, haciendo que su corazón latiera rápidamente.

Ella sabía que Allison sentía lo mismo que ella.

Ambas eran iguales.

-Aumento diez mil.- Los murmullos ya la tenían harta pero aun así decidió no perder la calma a media partida.

-Igual.- Dijo Allison, mientras ambas sonreían de la misma manera.

-Esto está yendo demasiado lejos.- Rayan empezó a preocuparse, cruzado de brazos mientras veía la escena al final del salón.

-Paige es Paige, lo tiene controlado.- Lowell se recargó a un lado de él y habló.- Ella verá que le conviene, si ganar o perder.

-En este momento estoy más preocupado por la idea de que están apostando sesenta y cinco mil dólares.- Se acomodó sus gafas y ambos se acercaron un poco más a la mesa.

Liam, con la mano temblando, dejó otra carta en la mesa.

Miró a todos los que estaban a su alrededor, incluyendo las caras de los que no estaban jugando, que parecían más preocupados por el dinero que las personas jugando.

Estaba a punto de voltearla...

-Me retiro.

Unos gritaron.

Otros se tomaron el cabello.

-¡¿Que te sucede?! ¡Lo tienes ganado!- Hasta Liam le estaba reclamando a Paige por su estúpida conducta.

-Me retiro.- movió sus cartas para adelante y se levantó de la silla con una sonrisa de triunfo, como si perder todo ese dinero no significara nada para ella.- Fue un gusto jugar contigo.

-Lo mismo digo.- Allison se levantó de su silla y le tendió la mano, ambas con la expresión de "Tengo el mundo entero en la palma de mi mano".

Paige salió de la sala, con toda la multitud detrás de ella, ahora solo quedaba ella, ella y la carta que Liam estaba a punto de voltear.

Allison tomó la carta, volteandola.

Un "A" de tréboles.

Aunque haya ganado todo ese dinero, sintió curiosidad hacia la de pelo rosa. Se hubiera retirado o no, Paige hubiera ganado.

¿Por qué lo hizo? ¿Por que con tanto dinero en juego?

-Paige...

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N/A: Hola, soy salsa y esto es disney chanel *tututuruuuu*

Ustedes: PerO SAlSa QuIeN VeRgAz Es AllisOn¿

yo: Otra loca igual que Paige xD

¿Estamos de acuerdo cuando decimos que Paige es toda una loquilla?

¿Paige está de acuerdo en que haya alguien igual que ella :0?

Y si les esta gustando hasta ahora, no se olviden de votar uwu


~S

Secrets of a Sin_Donde viven las historias. Descúbrelo ahora