Sincerity

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La escalera de incendios se había convertido en el rincón de pensar para mí. Las noches aquí eran mucho más frías, sin embargo, son totalmente soportables. Mañana sería nuestro último día aquí y tenía demasiados pensamientos en mi cabeza sin respuesta. Seokmin era uno de ellos. Aquel chico me estaba volviendo completamente loco y no quería pensar en irme de vuelta a casa sin él a mi lado. Estaba siendo un jodido egoísta, lo admito, pero mi madre me dijo una vez que es normal comportarse así de vez en cuando porque así es como funciona el ser humano. Por otro lado, está Penny. Aquella chica iba a sufrir mucho si Seokmin no vuelve. No quiero decir que el resto no suframos porque es evidente que lo haremos, sin embargo, ella está  enamorada y ese es otro tema completamente diferente. Y por último pero no por ello menos importante, Luna y sobre todo lo que me dijo Jihoon.

Suspiré cansado, formando una nube de vaho saliendo de mi boca por el cambio de temperatura. Abracé mis piernas, escondiendo mi rostro en ellas. Mi corazón estaba siendo una montaña rusa estos últimos días y era demasiado cansado sobrellevar todo eso.

Las escaleras crujieron detrás de mí, sobresaltándome y haciéndome olvidar por un momento mis pensamientos. Penny tenía la mirada perdida en las estrellas, que se veían mil veces mejor al estar en el campo y no en la ciudad. El pequeño reflejo en sus ojos de las lágrimas intentando no salir delante de mí, se hicieron presentes, aunque una de ellas se escapó, reflejando el brillo del cielo. Penny no hizo nada por ocultarla ni tampoco dijo nada sobre ellas.

-Es precioso, ¿verdad?—volví mi mirada al cielo, apreciando cada estrella que brillaban para otorgarnos unas vistas maravillosas—En la ciudad es complicado verlas. Hace mucho que no disfruto de esto—sus palabras eran susurros lanzados al viento. Sabía que por ella misma no iba a sacar el tema. Supuse que necesitaba a alguien con el que hablar.

-Oye, Penny. A ti—fui cortado por la voz de Penny algo cansada, aspirando un poco a causa de su llanto que se había vuelto más fuerte.

-Sí, Joshua. Me gusta Seokmin y me duele, no puedes imaginar cuánto quiero a ese mocoso—ella ahora me miraba a los ojos, rompiéndome el corazón con su rostro completamente lleno de lágrimas y los ojos rojos. Además, su rostro se veía cansado, con ciertas ojeras que llevan apareciendo desde que Seokmin se fue—Sin embargo, porque lo quiero tanto, sé que no puedo obligarle a que vuelva. Él-él tiene aquí lo que quiere. No puedo hacer nada por ello, simplemente tendré que aceptar la realidad y sanar el pobre corazón roto que tengo.

-Eres increíble, Penny—susurré, como si fuera ilegal alzar la voz en la oscuridad de la noche. Aquella chica tenía el valor que yo no tengo y aún así enfrenta sus días con una sonrisa. Todo esto sonará muy MrWonderful pero ojalá poder ser igual que ella, la admiro tanto, ya que ha cambiado mucho como persona.

-Joshua, ya sé que no me incumbe y que soy la menos indicada para hablar pero—sus palabras cesaron por un momento, como si estuviera pensando si estaba bien decir lo que tenía planeado—Dime si me equivoco pero creo que a ti te gusta Luna. Por favor, no pierdas el tiempo como lo he perdido yo. Dile lo que sientes, te aseguro que las cosas te irán mejor—su sonrisa iluminó su rostro a pesar de su desastre.

-Ven aquí—dije señalando el hueco a mi lado de la escalera. Ella se sentó allí deprisa y se apoyó en mí, encontrando el lugar donde desahogarse y yo encontrando el ánimo que necesitaba el día de hoy—Ojalá fuera tan fácil, ojalá pudiera.

-Puedes—dijo mientras se separaba de mí por un momento para mirarme a los ojos y volver a su posición de antes segundos después—No le digas que te lo dije pero ella está loquitamente enamorada. Sois unos estúpidos al no hacer nada ninguno de los dos.

-Eres la segunda persona que me dice estúpido hoy—dije mientras reía— ¿Te puedes creer que Jihoon intentó hacerme ver celoso hoy para demostrarle a Luna mis sentimientos por ella?

-Joshua, no es por llamarte estúpido por tercera vez en el día de hoy pero, se notaba demasiado que lo hacía para ponerte celoso. Del día a la noche no te conviertes así con una persona—dijo riéndose muy probablemente de mí. Es que hasta yo tengo ganas de llamarme estúpido.

-¿Interrumpo algo?—la voz de Luna se escuchó detrás de nosotros, separándonos al escucharla.

-No, yo ya me iba—Penny se levantó abrazándose a ella misma, sonriéndome como despedida y dejándonos solos a Luna y a mí. Ella se sentó en el lugar de Penny y yo aparté la vista sintiéndome avergonzado por el comportamiento de hoy.

-Así que...celos, ¿eh?—mi voz sonó un poco más fuerte intentando que mis palabras no se trabaran solas. Los ojos de Luna se abrieron un poco y me miró asustada.

-¿Lo sabes?—dijo algo avergonzada—Lo siento, fue una estupidez. Jihoon—Luna comenzó a sentirse nerviosa y la simple vista me parecía tierna. ¿Cómo alguien en su sano juicio no se iba a enamorar de ella?

-Está bien, Luna. Supongo que yo también te debo una disculpa-moví mis brazos hacia atrás para apoyarlos en la escalera que se encontraban a escasos centímetros de mí para estirarme un poco en el sitio.

-¿Por qué?-ahora estaba dudosa y lo único que quería hacer es abrazarla tanto hasta que me pidiera que me alejara.

-Porque no has tenido el resultado que has querido—Luna intentó interrumpirme pero continué hablando—Deja, sólo déjame continuar, no sé cuándo tendré el valor de decirte esto de nuevo. Mira, soy lo más estúpido que ha pisado este planeta, no sólo lo digo yo sino que otras dos personas más me lo han dicho hoy. ¿Sabes por qué no he actuado celoso hoy? Porque pensé que te estabas divirtiendo más con él de lo que podías divertirte conmigo, pero no sabes la rabia que me corría por dentro por no ser lo suficientemente valiente como para decirte que me gustas. ¿Lo he dicho? ¡Oh Dios mío, que lo he dicho! Vale, bueno, de perdidos al río. Mira Luna, no sabes cuánto tiempo llevo sintiendo esta cosa extraña en mi pecho cada vez que te veo, cada vez que sonríes o cuando te apoyas en mí. Me di cuenta cuando fuimos a tu casa, gracias a Seokmin. Yo, pensé y pienso que no sientes nada por mí porque sería una locura total, pero ya no sé qué hacer con mi corazón. Ese pequeño no para de latir cada vez más rápido cuando estás cerca y a hacer cosas extrañas que nunca ha hecho—Joshua respiró tras haber estado hablando demasiado. Se giró para ver el rostro de Luna y la vio completamente sonrojada. Sus orejas también tenían un pequeño tono rojizo al final de estas y sus labios se convertían en una sonrisa tímida.

-¿Sabes?—se animó a decir Luna—¿Sabes lo que sí que es una locura?—mis hombros se movieron en un gesto de no tener ni idea de la respuesta—La locura es lo jodidamente enamorada que estoy de ti.  

  

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