What if...? || Marvel || Hijos de Los Vengadores

16.

22 de Julio de 2016, base de los Nuevos Vengadores, 23:00 p.m.
Steve, James, Nate, Morgan y Tony habían ido a una misión, en realidad Katia también iba a ir pero como estaba Nate pasó y les dijo que no le apetecía ir a una misión sobre narcotraficantes, les dijo que eran aburridas y sorprendentemente (con ayuda de su padre) coló.

Natasha estaba caminando hacia su habitación, para tumbarse y ver una película, aunque fuese un poco deprimente sin Steve, cuando vio a su hija tumbada boca arriba sobre una barandilla, con una pierna fuera.

—Creía que te habías ido a dormir.

—Creías mal entonces.

Se acercó y se apoyó a su lado en la barandilla.

—¿Qué haces?

—Pensar hasta que has llegado, ¿por qué?

—Por nada.

Eso iba a ser más difícil de lo que Natasha había pensado, Katia estaba especialmente cortante.

—¿Te pasa algo?

Katia inspiró profundamente, cerró los ojos por un instante y luego contestó.

—Hoy no es un buen día.

—¿Por qué?

La menor pareció observarla, como si la analizase antes de contestar.

—Mataron a mi mejor amigo hace un año. No vuestro sino nuestro.

—Lo siento.

—Si bueno, no lo conocías, en realidad ni siquiera ha nacido todavía así que... — suspiró — era un idiota, estaba seguro de que no se iba a quedar calvo cuando todo el mundo sabía que sí que iba a pasar — puso una mueca de dolor — habría parado un disparo por ese idiota. Él fue más rápido...

Negó con la cabeza y se incorporó, sentada en la barandilla con las piernas cruzadas mientras observaba a su madre.

—¿Y tú qué? ¿No puedes dormir sin papá?

Natasha lo entendió perfectamente, no quería seguir hablando de eso.

—No lo he intentado.

Katia miró el suelo.

—¿Puedo pedirte una cosa?

—Claro, lo que quieras.

La menor se mordió el labio.

—¿Puedo dormir contigo?

Una sonrisa se dibujó en los labios de Natasha.

—Pues claro. ¿Vamos?

Katia sonrió levemente y la siguió.

—Siempre dormís juntos, ¿verdad? Tú y James.

—Si, desde niños. En realidad... es la primera vez que no.

Eso sorprendió a Natasha, se había dado cuenta de que los dos estaban muy unidos pero nunca se había dado cuenta de cuánto. Habían pasado catorce años de sus vidas teniéndose únicamente el uno al otro y seguían comportándose igual.

Entraron al cuatro de Natasha que James y Katia compartían y la mayor descubrió que encima de las mesas habían acumulado una serie de planos, papeles con datos y fechas, informes...

—Creo que no lo tenemos tan ordenado como tú — comentó Katia — lo usamos de Cuartel General.

—¿Qué es el plan suicida? — preguntó cogiendo una carpeta.