[Guerreros de Marley] Ataque a los titanes

Capítulo 21 -La fuerza de Marley-

-Los héroes de Liberio se encargarán de asediar la ciudad, manteneros a la espera de nuevas órdenes.- dijo el teniente Olivier desde el puente de mando del dirigible, recibiendo la transmisión Zeke e Historia, los cuales miraban a sus pies como los titanes caían desde los cielos, comenzando a estrellarse contra los múltiples edificios y estructuras que conformaban la amurallada ciudad.

Historia observaba de brazos cruzados y con su paracaídas equipado a su espalda como era que, desde la altura a la que se encontraba, podía ver el campo de batalla con total claridad, observando como Reiner y Marcel accedían de nuevo en sus respectivas formas titán a la ciudad de Trost desde el portón interior.

El titán mandíbula estaba subido sobre el hombro izquierdo del titán acorazado, comenzando el último de estos dos a caminar por la asediada ciudad tras el bombardeo titán. El mas pequeño de los dos comenzó entonces a usar los edificios como perfectos puntos sobre los que saltar, dejando a Reiner solo mientras este buscaba una forma de acabar con las defensas enemigas.

Reiner observaba con detenimiento la destrucción que tenía frente a él, todo mientras avanzaba caminando en su forma titán por las calles de Trost, dirigiéndose al cuartel general de la nombrada ciudad, que para su buena suerte parecía haber sido parcialmente dañado por el primer ataque de Bertholdt.

Veía soldados por todas partes tratando de hacer frente a los múltiples titanes que habían sobrevivido al fortísimo impacto del bombardeo, todo mientras civiles huían aterrorizados por la presencia de los titanes y la suya propia.

Alzó entonces la vista para ver a varios soldados volando por los aires con el uso de su equipo de maniobras, portando unas extrañas varillas de hierro, las cuales no recordaba de sus años de Paradise.

-Solo tendremos una oportunidad...- dijo Jean mientras elevaba el vuelo junto a Mikasa y Marco, teniendo bajo sus pies al titán acorazado observándoles. -Esperaremos al momento adecuado, y destrozaremos a ese bastardo...

*-¡La guarnición se encargará de evacuar a la población civil de Trost y de dar la voz de alarma a todo el muro Rose! ¡La legión se quedará aquí hasta que la batalla se decante por uno de los dos bandos!- exclamaba el comandante Erwin ante los múltiples soldados que lo escuchaban desde los tejados de Trost. -Usaremos el nuevo armamento para hacer frente al acorazado, el factor sorpresa es nuestra mayor arma contra él. El titán mandíbula será el titán primordial a abatir debido a su tremenda velocidad... por último cabe recordar que el paradero del titán colosal sigue siendo un misterio, no sabemos si puede volver a transformarse así que mantened los ojos abiertos. Y recordad...- decía Erwin mientras observaba los dirigibles volando sobre ellos. -No sabemos tampoco si disponen de refuerzos, pero lo más probable es que sí. Sabemos que se llevaron a Historia Reiss y Eren Jaeger, ambos con un poder titán cada uno según los informes del escuadrón Levi. Una vez más, toca darlo todo por la humanidad... ¡¡¡Ofreced vuestros corazones!!!*

-Te seguiremos, Jean...- dijo Marco mientras preparaba en el aire la lanza relámpago, estando Mikasa ya lista para el combate.

-No pienso terminar hasta saber qué le ha pasado a Eren...

Jean observó de reojo algo frustrado la afirmación de Mikasa. Estaba llevando el asunto a una índole incluso más personal de lo que era de por si. Si algo tenía claro... es que eso solo podría significar una cosa...

De pronto, los tres soldados de élite de Paradise observaron como el titán acorazado comenzaba a correr, acelerando el ritmo por las calles de Trost, hasta tal punto de que no pareciera que su armadura pesase.

-Esta acelerando el ritmo...- dijo Mikasa con el ceño fruncido mientras reducían la altura a la que se encontraban, poniéndose a la misma altura que el titán acorazado mientras este atravesaba las calles de la amurallada ciudad.