[Guerreros de Marley] Ataque a los titanes

Capítulo 26 -La lucha de nuestras vidas-

Un aviso muy rápido del autor... es un capítulo bastante largo, aseguraos de que disponéis de tiempo libre suficiente para leerlo sin problemas. Quería dividirlo en dos, pero no sabía cuando cortarlo... así que mejor entero. Espero que puedan leerlo hasta el final, esta es mi propia ''reinterpretación'' de la batalla de Shiganshina. ¡Disfrutad y gracias por el apoyo!

Reiner comenzó a avanzar por las calles de Shiganshina en su forma titán, haciendo temblar el suelo con sus pisadas, mientras estas lograban tirar varias tejas de los tejados cercanos a él en el distrito amurallado, todo mientras a su izquierda la titán hembra caminaba hacia la reunión con Marcel y él.

El titán acorazado volvió la mirada a sus espaldas, justo encima de él, viendo mientras avanzaba como era que el comandante Erwin lo observaba fijamente. El guerrero devolvió la mirada al frente, viendo como Marcel había alcanzado ya el punto clave gracias a su tremenda velocidad.

-Marcel...- pensó Reiner adentró de su titán mientras veía al mandíbulas mirándole de reojo, pareciendo estar pensativo aún transformado. -¿En qué estás pensando?

[Dos horas antes...]

-¿Tú tampoco duermes hoy?- preguntó Marcel a su rubio compañero, quien lo miró de reojo sentado en la muralla, viendo como se sentaba junto a él con cierto aura de misterio.

-Supongo que nadie duerme bien últimamente...- dijo Reiner con una leve sonrisa, estando Marcel observando pensativo el oscuro horizonte.

-¿Crees... crees que conseguiremos acabar con esto?- preguntó Marcel con cierto nerviosismo, viendo como Reiner lo miraba confundido por su extraña pregunta.

-¿Qué quieres decir?

-Ya sabes... acabar con esto... cumplir por fin nuestra misión.

-Cumplimos nuestra misión hace un año, Marcel. Devolvimos el fundador a Marley y además encontramos al atacante... cumplimos con creces.- dijo Reiner con total seguridad, escuchando una pequeña risa de Marcel que le hizo fruncir el ceño.

-Sabes tan bien como yo que eso es mentira...- dijo Marcel mirando al frente con la mirada perdida. -Hemos pasado por muchas cosas, Reiner. Te dejé a tu suerte en la legión... sin ningún tipo de protección... podrías haber sido capturado o asesinado por culpa de mi incompetencia.

-Marcel...

-Solo quería pedirte disculpas por ello.- dijo el guerrero con cierta melancolía y arrepentimiento en su voz, viendo Reiner como su amigo resoplaba agobiado. -Solo quiero que sepas que lo hice pensando en el bien de la misión.

-Sé que lo hiciste por eso...- dijo Reiner aun confundido por los últimos comportamientos de Marcel.

-Bien...- dijo Marcel mientras miraba fijamente sus manos, estando Reiner observando a su amigo con claros signos de estrés.

-Marcel... creo que...

-Tengo un sueño recurrente estos últimos días, ¿sabes?- dijo Marcel mientras devolvía la mirada al horizonte, estando Reiner mirándolo de reojo. -En él, mi hermano y yo combatimos juntos... como si fuéramos uno... tenemos una gran coordinación. Luego cambia todo, el ambiente se vuelve oscuro y lleno de hollín... y no paro de oír cañones disparando... cañones y... gritos de dolor.

Reiner escuchaba asombrado a un Marcel que parecía haber entrado en una especie de trance, estando este con la mirada perdida mientras hablaba casi balbuceando cosas sin sentido.

El guerrero más bajo se dio cuenta entonces de sus locuras, mirando a un Reiner que parecía estar mirando a un fantasma en vez de a su amigo, quien observaba la cara de susto del rubio.