-Capítulo 43-

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-Narra Mateo-

Ya se había formado un gran grupo de marinería. El resto irían en helicóptero

Mateo: Bien muchachos, este es el plan, necesitaré que algunos barcos se estacionen en el lado Este, otros en el Oeste y otros en el Sur. Eso hará que tengamos una escapada rápida desde el sur para poder traer a Sofia a la ciudad lo antes posible. Sana y salva. Nacho, Manu y Joaquin, ustedes ocuparán el barco en el que llevaremos a Sofia a la ciudad. Ustedes junto a algunos más, se quedarán cuidando ese barco, que será el transporte a casa -ellos asintieron- Los helicópteros aterrizarán en el techo del edificio. Volaremos bien alto para que no escuchen el ruido del helicóptero. El techo es llano así que no habrá problemas. Nos ubicaremos desde allí, noté que hay una puerta que va hacia abajo, así que esa será la puerta hacia el último piso, que será el primero que ataquemos. Iremos de arriba para abajo. No sé exactamente donde X tiene a Sofia, así que hay que tener los ojos bien abiertos. Necesitaré franco tiradores que inicien el ataque por piso. Los francos asesinarán a los más fuertes y luego, los que quedan irán por el resto. Nuestro clan ya tiene un grupo de francos, no sé el de ustedes -pregunté mirando a los del otro clan. El líder del otro clan se me acercó. Y señaló un grupo de gente-

X: Ellos son nuestros francos -dijo y asentí-

Mateo: Vayan con ellos -dije y señalé a los francos tiradores de mi clan- Bien, sigamos -dije e hice una pausa- los francos viajaran de piso en piso por los conductos, los que los hará "invisibles" y para hacer eso, más silencioso, sus armas de franco tirador tendrán silenciador. Luego de que vayan piso por piso, asesinando a los que vean que son más fuertes o a los guardias de cada piso, el resto tomará el elevador o las escaleras y bajarán hasta el otro piso haciendo una entrada sorpresiva, disparando a quemarropa -hice una pausa-no se exactamente cuántos pisos tiene el edificio y tampoco en que piso se encuentra Sofia, así que vamos a tener que tener los ojos bien abiertos. Los tomaremos por sorpresa y eso nos permitirá estudiar bien los pisos del edificio. ¿Alguna duda? –nadia hablo- por favor, si existe la mas minima duda, pregúntenme

Camilo: ¿Alguien? –reiteró-

Nacho: Yo no entendí nada –Suspiré-

Mateo: Tu solo quédate en el barco y vigila que nadie se acerque.

Joaquin: ¿Y qué tal si confundo a uno de los nuestros con uno de los suyos?

Mateo: Creo que es la pregunta más ingeniosa que has hecho durante toda tu estadía aquí. Llevaremos uniformes que nos identificarán. Serán verdes algo oscuros. Para camuflarnos. Nos diferenciaremos de ellos porque ellos siempre usan negro. Unas camperas negras. Y acabas de darme una idea, Joaquin, gracias -dije y él se alagó a sí mismo- luego de que asesinemos a todos los del último piso, les quitaremos sus camperas pero las dejaremos sin abrochar y además... -dije y agarré una de las boinas que solemos usar- usaremos esto que nos identificará mejor unos de otros y un escudo de nuestro clan, que lo abrocharemos a la campera negra que "pediremos prestada". ¿Entendido?

- Entendido – dijeron todos al unísono.

Mateo: Bien, ahora quiero que se separen por los grupos -dije y todos obedecieron-

Eramos muchos, lo que me relajo bastante

Nombré quienes irían al barco este, al oeste y al sur. Estos se separaron por este, oeste y sur. Los francos tiradores se pusieron en otro grupo apartado de los navegantes y de los que llevarían armas simples, como yo.

Mateo: Recomiendo que lleven todos ropa muy abrigada ya que el frío en esa zona es demasiado. Por arriba de esa ropa, llevarán un chaleco antibalas y por encima, llevarán esto -dije y les mostré el uniforme de nuestro clan- Traten de no llevar ropa en exceso porque les impedirá la movilidad. El escudo del clan irá en el lado del corazón y todos usarán obligatoriamente el gorro que los identificará. En caso de los navegantes, usarán salvavidas, además.

Dichas esas palabras me dirigi hacia las armas

Mateo: Todos tendrán un arma fuerte. Característica de su rol y aparte de eso, tendrán una navaja y otra arma más pequeña escondida en alguna parte del cuerpo, solo por si acaso. Los francos utilizarán las armas características de su rol. Armas de largo alcance y con mira. Luego de que los francos disparen a los que aparentan ser los más fuertes, obviamente, seguirán disparando al resto, pero tiraremos gas lacrimógeno que hará que ellos se mareen, vean menos y nosotros les dispararemos a las sombras que veamos, es por eso que todos buscaremos un lugar para escondernos al disparar a quemarropa. ¿Entendido? ¿Preguntas?

Manu: ¿Qué hacemos luego de llevarnos a Sofia y asesinar a todos o amordazarlos?

Mateo: Nos iremos por donde vinimos. Los barcos tienen bote salva vida, así que no habrá grandes problemas. Tu, Nacho y Joaquin, asegúrense de llegar a tierra con Sofia a salvo.

Nacho: ¿Tú no vendrás? -Se hizo un silencio-

Mateo: No, me quedaré para ver a quienes de nuestros heridos podremos salvar y de más –dije- así que necesito que la cuiden. Llevarán provisiones en el barco y también en el helicóptero porque no será un viaje de cinco minutos.

Camilo: ¿Dudas? -preguntó en voz alta, luego de un rato. Nadie contestó- ¿Nadie? -reiteró y el silencio abundó-

Mateo: Bien, vayan a descansar y a prepararse, en dos días partimos. Si tienen dudas durante todo el periodo, pregúntenos. Pueden retirarse -dije y todos se movieron hacia sus cabañas-

Camilo: Excelente plan, Mateo -me dijo cuando ya todos se marcharon a sus cabañas- me impresionas, hermano.

Mateo: Pues no quiero hacer lo que hice la última vez, con Anne.

Camilo: No habías pensado en nada

Mateo: Por eso -Él me miró con entendimiento-

Nacho: Y bueno, ¿cuándo nos vamos a casa?

Mateo: Ustedes se quedarán aquí

Joaquin: ¿Qué? Claro que no, tengo que ver cómo está Cata, llamarla aunque sea.

Camilo: Aquí no podrán llamar ni nada, pueden rastrear su teléfono

Nacho: ¿Es broma cierto? -Camilo y yo nos miramos y luego, volvimos la vista a ellos-

Mateo: ¿Nos ves cara de broma? -Ellos nos miraron sorprendidos-

Camilo: Vengan, esta será nuestra cabaña -dijo y nos dirigimos a una de las cabañas más grandes-

Manu: ¿Nuestra?

Mateo: Si, tuya, de Nacho, Joaquin, Manu y mía –dije-

Joaquin: Pero no tenemos ropa.

Camilo: Nosotros tenemos ropa para ustedes, no se preocupen

Nacho: ¿Y qué hay de Juli y Cata?

Mateo: Mañana iremos y les avisaremos

Joaquin: Quiero despedirme de ella, quizá no la vuelva a ver -Camilo y yo nos miramos-

Mateo: Lo hablaremos mañana -dije y les pedí que entraran y se acomodaran-

Kriptonita -Mateo Palacios y Sofia Pevensie (1ra temporada)- FanfictionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora