-Capítulo 45-

528 27 0
                                    

Sofia: ¿Estás enojado?

Joaquin: ¿Por eso? -preguntó señalando mi vientre-

Sofia: Ajam -asentí-

Joaquin: No Sofia

Sofia: ¿Seguro?

Joaquin: Más que enojado estoy preocupado –dijo- enojarme no cambiará nada, pero no quiero que te pase lo mismo que a mamá

Sofia: No pensemos eso ahora –sonreí- tócalo -me miró- anda -insistí. Joaquin tocó mi vientre y sonrió al instante-

Joaquin: ¿Se mueve mucho?

Sofia: Creo que esta algo nervioso en estos momentos -Nos quedamos mirando un rato el mar, hasta que Camilo interrumpió-

Camilo: Sofia -me llamó- ya puedes ver a Mateo.

Me paré, con dificultades, ya que mi panza me pesaba. Camilo me ayudo y luego me dejó a solas con Mateo, que ahora parecía haber mejorado.

Sofia: Hola -sonreí-

Mateo: Hola princesa

Él "princesa" suena tan lindo cuando viene de sus labios. Me acosté a su lado y ambos nos tapamos. Yo no podía girar ya que mi panza me demandaba a quedarme boca arriba y Mateo no podía moverse por su pierna. Pero giramos nuestras cabezas mirándonos a los ojos.

Sofia: ¿Cómo te sientes?

Mateo: Mejor ahora que estás conmigo -dijo y me sonrió-

Sofia. ¿Por qué estas tan tierno conmigo?

Mateo: Porque te extrañé mucho y comprendí la falta que me haces

Sofia: Ya no me extrañarás mas -le sonreí tiernamente- cuando lleguemos, vamos a tener a nuestro bebé y vamos a estar por siempre juntos -Su rostro cambió a serio-

Mateo: Sofia... -dijo y lo miré atento-

Sofia: Dime...

Mateo: Yo... le prometí a Manu que si él y sus amigos, que son un clan bastante bueno, me ayudaban a salvarte... yo... me entregaría

Sofia: ¿A X? -pregunté extrañada-

Mateo: A la policía

Mi cara cambio por completo. Él no puede dejarme en este momento. Simplemente, no puede

Sofia: No lo harás ¿cierto? -pregunté con la voz entrecortada-

Mateo: Si no lo hago, Manuel me delatará

Sofia: No, no lo haría -dije con un hilo de voz-

Mateo: SI lo hará, Sofia. Y quizá sea lo mejor, amor -dijo y ese "amor" me mató, justamente, de amor- Si pago todas mis deudas ahora, luego viviremos tranquilos.

Sofia: ¿Y qué hago yo? ¿Me quedo sola? -dije con lágrimas en los ojos- ¿Qué hago Mateo?

Mateo: Camilo, Nacho, Manuel y Joaquin te ayudarán.

Mateo: No, quiero que seas tú quien esté conmigo, me abrace cuando sienta frío o cuando las cosas estén mal, quiero que seas tú quien me ayude, no ellos -dije llorando-

Mateo: Tranquila, mi vida -dijo acariciándome- no me encerrarán por siempre -La puerta se abrió brutalmente-

Camilo: Esto se está complicando -dijo al entrar- se avecina una fuerte tormenta

Mateo: Yo voy -dijo e intentó pararse pero lo frené con una mano en su pecho-

Sofia: Te quedas aquí, yo voy.

Mateo. No, tú no irás.

Camilo: Ambos se quedan -sentenció- nosotros nos ocuparemos, Mateo

Camilo salió del pequeño cuartito y Mateo y yo nos miramos.

Sofia: ¿Qué haré sin ti? -le pregunté. Él solo me miró con brillo en los ojos-

Mateo: Te amo tanto -me confesó sin rodeos y le sonreí- ven aquí -dijo y abrió sus brazos para que me acostara en su pecho y fue así como ambos nos quedamos dormidos, pero no sin un "Te amo" nuevamente, de parte de los dos-

-----------------------------------

Despertamos por el ruido de la puerta

Nacho: Buenos días -dijo al entrar- necesitamos un poco de comida... -dijo y tomó algo de provisiones- ¿Cómo te sientes, Mateo? –preguntó-

Mateo. Siento algo dormida la pierna pero bien.

Nacho: Bueno, los esperamos arriba -dijo y volvió a subir-

Me senté en la pequeña cama improvisada. Mateo seguía acostado

Sofia: Auch -me quejé por un dolor-

Mateo: ¿Qué sucede?

Sofia: Patea -le dije y toqué mi vientre- ¿quieres sentirlo?

Él me miro con brillito en sus ojos y una débil sonrisa. Entrego su mano y dejo que yo la guiara hacia su hijo.

Tocó mi vientre y sentí descargas eléctricas correr por él. Mateo se sentó, con algo de esfuerzo y volvió a tocar mi vientre por sí solo. Sentí una patada y al parecer Mateo también.

Mateo: Eso debió doler -dijo sonriendo-

Sofia: Créeme que si, será un buen jugador de futbol -sonreí-

Mateo: o una bonita bailarina -dijo sonriendo-

Sofia: Creo que será jugador de futbol

Mateo: ¿Tú crees que será varón? -preguntó con una sonrisa-

Sofia: No lo creo, lo siento -le sonreí y me abrazó-

El resto del viaje se pasó rápido. Por suerte, llegamos a casa sin problemas. Mateo nos dejó a Joaquin y a mí en nuestra casa. El resto del embarazo que viví con Mateo fue de lo más tierno. Joaquin lo aceptó ya que sabía que Mateo me protegería de todo. Mateo no pasaba un minuto sin hablarle a su hijo. Si, hijo. Lo comprobamos con una ecografía. Discutimos entre muchos nombres, John me parecía muy normal, Alex no le quedaba, Phillip me sonaba a la marca de electrodomésticos Phillips y no me gustaba, en fin, lo llamaríamos Nathan (pronunciación Neithan). El parto fue duro para mí y terminó debilitándome muchísimo. Por eso me internaron por un tiempo. Me sentía muy débil, y Mateo muy nervioso por todo.

Kriptonita -Mateo Palacios y Sofia Pevensie (1ra temporada)- FanfictionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora