¡No te dejes llevar!

Capítulo 2. Un padre estupendo.

El vapor del agua empañaba todos los cristales. Con las burbujas hasta la barbilla y con el agua caliente, por fin pude tener un momento tranquilo para serenar mi mente. Analicemos la situación, mi hermana se estaba enrollando con un tipo cuando llegué, después ella huyó y me dejó el marrón a mi y más tarde me encuentro precisamente a ese "marrón" haciéndose un sándwich en mi cocina. En realidad no es para tanto pero, si no es para tanto ¿por qué no puedo dejar de pensar en lo que pasó? Seré estúpido. Seguramente la causa de que me latiera el corazón así es taquicardia, sí, seguro que es eso. Esa tonta de Amanda,  cuando la vea... le voy a quitar hasta el tinte rubio de un sopapo.

Me sumergí en la bañera por completo, entonces un sonido me alarmó. Escuché la puerta abrirse. ¡Qué bien! Ya ha llegado mi querida hermanita, creo que debería tener unas amables palabras con ella. (^◇^)

Salí de la bañera, me enrollé una toalla alrededor de la cintura y salí del baño. Cuando me giré para cerrar la puerta alguien me abrazó por detrás.

-¡Mamá! ¿pero que haces aquí? ¿no estabas de viaje?  -exclamé devolviéndole el abrazo a mi madre. -

-Sí,  pero al final el juicio se canceló por que el acusado confesó.

Mi madre es una abogada muy reconocida por su fama de no fallar ningún caso. La verdad que tener una madre abogada no es nada bueno, es IMPOSIBLE llevarle la contraria y siempre se sale con la suya. (-_- )

-Valla,  eso es genial.

-Sí la verdad,  ¿y tú hermana?

-Me dijo que la llamaron de la universidad.

-Estará de compras con sus amigas.

-Eso mismo pensé.

En ese momento la puerta se abre y entra mi hermana cargada de bolsas.

-Te lo dije. -Me susurró mi madre. -

-¡MAMÁ!  -Exclamó mi hermana eufórica, tirando todo lo que llevaba en las manos al suelo. -

-¡Cariño!

Las dos se abrazaron como si no se hubieran visto en años.

La verdad es que ellas tienen un vínculo increíble. Son como dos niñas, se quieren a rabiar.

Cuando mi madre estudiaba en la universidad de derecho se enamoró de un estudiante del extranjero que acababa de llegar de Japón (Sí señores,  JAPÓN.)

Tras insistirle mucho, mi madre aceptó tener una cita con el japonés. Supongo que la cita salió bien porque se enamoraron y semanas después mi madre estaba embarazada de mi hermana. En fin, que se casaron y todo precioso y bla bla bla, hasta que llegué yo. Cuando mi madre estaba de 5 meses mi padre murió en un accidente de tráfico. Mi madre calló en depresión pero gracias a mi hermana consiguieron salir a delante,  juntas.  Es por eso que se aman tanto.  A veces pienso que no pinto nada en la ecuación. Jamás vi a mi padre,  ni en fotos.  Aunque creo que es mejor así,  mi madre dice que era un padre estupendo.

-Bueno,  para cuando acabéis con vuestra ñoñería,  estoy en mi habitación. -dije mientras subía por las escaleras. -

-Por cierto Eric,  Bruno me pidió tú número. -soltó mi hermana de repente sin dejar de abrazar a mi madre.-

Me paré en seco.

-Y no se te habrá ocurrido la genial idea de dárselo ¿verdad? -pregunté retóricamente rezando por que la respuesta no sea la que creo. -

-¿Y qué problema hay?

-¡¿QUÉ? ! ¡¿LE DISTE MI NÚMERO A ESE TÍO? !

-Cariño,  ¿quien es Bruno?  -preguntó mi madre.-

-El ligue de Eric.

-Cielo, ¿eres gay?

-¡¿QUÉ? ! ¡NO!

-Bueno,  la verdad es que siempre me lo imaginé.  -le dijo mi madre a mi hermana.-

-¡Qué no soy gay!

-Sí, tienes razón,  nunca lo he visto con ninguna chica. -respondió mi hermana. -

-¡Porque no he encontrado a la adecuada y punto!

-Qué sepas cielo,  que puedes contar con nuestro apoyo.  -Me dijo mi madre.-

-¿Alguien me está escuchando?

-Sí,  te ayudaremos a salir del armario.

-Aaaaag...me rindo, pensad lo que queráis. -Y subí a mi habitación.-

Lo mejor en estas ocasiones es ignorarlas. Mi madre vendrá mareada del vuelo y mi hermana...bueno,  ella nació así.

Cuando entré en mi cuarto,  me quité la toalla y me vestí con ropa cómoda. Mi móvil, que estaba en la cómoda comenzó a vibrar. Descolgué sin mirar el número,  algo de lo que en seguida me arrepentí.

-¿Sí?

-Hola Eric.

-¿Quien eres?

-¿No sabes quién soy? No sé si debería ofenderme.

-Ah...Bruno.

-Entonces sí te acuerdas.

-¿Qué quieres?

-A ti.

-Está bien, voy a colgar.

-No, es broma. ¿Qué te parece si salimos a tomar algo?

-No. ¿algo más antes de que cualgue?

-Sí,  paso a buscarte a las 21:30. Estate listo.

-¿Qué?  Te he dicho qu...

Y encima me cuelga. Chsss, pues lo lleva claro si se cree que voy a salir con él.

(Que equivocado estaba...)

¡Konbanwa mis unicornios!

Estoy emocionada porque el segundo capítulo de mi novela. *0*  (o porque me emociono por todo, una de dos.)
¿Qué tal el capítulo?  Espero que bien -_-
Porfis dejen sus comentarios y díganme que al menos la habéis leído por pena xD

Un beso con saliva.♡

Oyasumi ☆