¡No te dejes llevar!

Capítulo 49. Soy adicto a ti.

Metí la llave en la cerradura y abrí la puerta. Entré tranquilamente al salón después de quitarme los zapatos, y me llevé la sorpresa de que Bruno estaba en casa. Se hallaba sentado en el sofá, con el pijama ya puesto, y fumándose su habitual cigarrillo.

-¿Qué haces en casa tan pronto? -curioseé.-

-Me tomé el día libre. -respondió fríamente y sin mirarme.-

-¿Y llevas todo el día aquí solo?

No me contestó, ni siquiera me miró.

-¿Te pasa algo? -pregunté extrañado.-

-¿Sabes qué día es hoy? -contestó dando una calada a su cigarrillo con la mirada fija al frente.-

Yo me detuve a pensar por un instante, sabía que no era su cumpleaños, pues para este todavía faltaba un poco. Tampoco era Navidad, ni San Valentín, ni Pascuas, ni Carnaval... entonces, ¿qué podía ser?

-La verdad es que ando un poco perdido. ¿Por qué? ¿es importante? -dije.-

Entonces Bruno apagó el cigarrillo y se levantó del sofá.

-Olvídalo. -dijo entrando en la habitación.- Buenas noches.

Yo lo seguí preocupado, y vi como se tumbaba en la cama, dándome la espalda.

-Bruno, ¿se me está olvidando algo importante? De verdad que no tengo ni idea de que día es hoy. Dímelo tú, por favor. -insistí.-

Lo escuché suspirar, se sentó y me miró fijamente.

-Hoy hace exactamente un año desde que nos conocimos.

Yo me sorprendí bastante. ¿Cómo había podido recordar esa fecha? ¿tan importante era?. A lo mejor sí, pero yo, que no sé ni en qué mundo vivo, ¿cómo iba a saberlo?

-¿Y cómo se supone que debería haberme acordado de eso? -dije.-

-Cierto, no tenías por qué, total es una tontería. Buenas noches.

Y se volvió a tumbar dándome la espalda. Joder, soy un gilipollas, cada vez que abro la boca la cago. Seguro que Bruno pidió hoy el día libre para pasarlo conmigo, y no sólo llego a las once de la noche, sino que encima no me acuerdo. Joder.

Entonces me senté junto a él y suspiré.

-¿De verdad es tan importante para ti ese día? -pregunté apenado.-

-Es el día que conocí al amor de mi vida, ¿cómo no iba a ser importante?

Fue entonces cuando me sentí la peor persona del mundo. Aunque no lo parezca y aunque no lo recordara, para mí ese día también es importante, no es por que esté enamorado de Bruno ni ninguna mariconada de esas, eh (que no soy gay) si no, porque Bruno es una persona muy importante para mí.

-Lo siento, Bruno. Aunque no lo creas, tu también eres importante para mí. -aseguré nervioso.- El año que viene no lo olvidaré. Lo prometo.

Él se levantó sorprendido y me miró por un segundo. Luego agarró mi nuca, pegó mi cara a la suya y besó mis labios con fuerza. Me gustaría poder decir que me negué, que lo alejé de mí de un empujón y salí corriendo, pero no fue así para nada, es más, fue todo lo contrario. Cuando me besó yo rodeé su cuello con mi brazos. Él bajó sus manos a mi cintura y la rodeó también.
A ver, sé que siempre ando negándome a que se acerque a mí e insultándolo pero, pensandlo. Yo había estado saliendo de casa porque él no me prestaba atención, y ahora que lo estaba haciendo (no era el tipo de atención que quería, pero bueno...) ¿iba a rechazarlo? No por dios, que tampoco soy tan bipolar.