Capítulo XXVIII

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El paisaje pasa un poco rápido a través de la ventana del auto, voy de regreso a casa. Michael se ha ofrecido a llevarnos a todos, ya todos han llegado a sus casas, menos yo, así que Michael me lleva de camino a casa.

Hemos ido en silencio, sólo entre veces hablamos de cualquier cosa.

Cuando por fin hemos llegado, me dispongo a salir, Michael también lo hace, pero me freno en seco al ver a Dylan en mi puerta.

Me examina completamente, y luego a Michael.

—hola hermanito— dice Michael

Dylan ríe sarcásticamente y hace una sonrisa fingida.

—¿Qué haces aquí?— pregunto

—vine a verte, pero tus padres dijeron que habías salido— responde

—¿Vas a entrar?— pregunto

—oh si claro— responde Michael, —no te preguntaron a ti— espeta Dylan

—Bueno, pueden entrar los dos, pero solo si no empiezan con sus indirectas— digo cruzandome de hombros

—no, es él o yo— dice Dylan

Hay por Dios Dylan, ¿Por qué eres tan infantil?

—¿Por qué, cuál es el problema que hay entre los dos? ¿Por qué quieres alejarme de Michael?— le pregunto a Dylan con tono acusatorio

—si, anda, di por qué no quieres que esté cerca de mi— interviene Michael, —o creo ya saber, ¿Tienes miedo que le cuente los verdad?—

—¿De qué verdad hablas Michael?— pregunto

—dile a Dylan que te lo diga, ¿A caso no es tu novio?—

¿Cómo sabe que Dylan es mi novio?

—Backy lo dijo— dice Michael encogiéndose de hombros.

Dylan hace unos días, poco antes que apareciera Karla me pidió que fuera su novia, así que acepté.

—ya basta, no le creas— dice Dylan, sacándome de mis pensamientos

—no— le gritó, —dime la verdad— ahora me dirijo hacia Michael, —¿Cuál es la verdad?— indago a Michael

—bueno, primero que todo— Michael aclara su garganta, —Dylan, debe saber que Mille es hermana de Rebeca

—eso no es cierto— espeta con furia Dylan

—vamos Mille, dile si es cierto a tu novio— pausa, —dile si miento— repone

—si, es verdad— digo, se que no son ideas mías, pero a Dylan está rojo, y se ve triste, no deja de mirar a todos lados, —¿Qué pasa con mi hermana— miro a Michael.

—es que tú querido novio, él— señala a Dylan con su dedo, —él, asesinó a tu hermana— continúa

—¿es eso cierto Dylan?— es la hora de saberlo por él mismo

—Mille, no sabía que era tu hermana, lo juro, solo déjame explicarte todo— la voz de Dylan suena ronca

—¿Es cierto eso o no?— espeto casi en un grito, —¿Cómo sabes que Rebeca es mi hermana? ¿Cómo sabes que ella murió y que Dylan es el asesino?— esta vez pregunto a Michael

—yo conocí a Rebeca, el mismo me la presentó— señala a Dylan, —y yo vi cuando él y su familia huyeron por eso, él mismo me dijo cuando la asesinó, ¿Dime si no es cierto Dylan?— le pregunta a Dylan

—ya basta— grita Dylan, —dejanos en paz, ¿A qué haz venido?—

Lágrimas ruedan de mis ojos sin parar, ya he confirmado de que Dylan si es el asesino, Michael acaba de confirmarlo todo, pero el debe saber más.

—eres un monstruo, no quiero volverte a ver en mi vida, pagarás por haberle hecho eso a mí hermana— le gritó a Dylan con todas mis fuerzas.

Michael me toma del brazo y me lleva hasta mi casa, y ambos entramos.

Se dirige hasta la cocina y me da un vaso de agua, agradezco que mis padre y Verónica no estén.

—realmente siento que te hayas enterado de esta forma— Michael baja un poco su cabeza, —pero es que no podía soportar más que estuvieras con ese mal hombre—

—Michael, gracias, realmente te lo agradezco— debo decirle mi plan, —si no es mucho pedir, necesito que me des más información—

—si claro— dice

—debes contarme todo desde el principio— reitero

—bueno, todo empezó cuando ellos se conocieron, realmente no sé cómo, sólo me la presentó, sólo hablaba un poco con ella, pero varias veces me habló de ti y de tu familia, ahí fue cuando te conocí— tuerce un poco su boca, a manera de pensando

—luego no lo sé, no me decía nada, es como si ya no tuviera confianza en mí, de hecho en nadie, se alejó de todos—

—¿Quiénes son todos?— interrumpo

—su familia y amigos, luego un día llegó a mi apartamento lleno de sangre y llorando, y fue cuando me confesó que la había asesinado, llamé a su familia, llegó la policía, sus padres la sobornaron, y fue cuando el caso quedó impune—

En realidad no pude soportar cuando me enteré que Dylan tenía una nueva novia, tuve miedo que corrieras con la misma suerte que ella, así que decidí acercarme a ti para  poder ayudarte y salvarte de algo malo.

Es por eso que te cuento la verdad, no pretendo ser el héroe de la historia, ya que primero salvé a tu mejor amiga y ahora a ti.

Simplemente siento que es mi deber ayudar, sabes que no soy una mala persona— concluye.

Me quedo viendo al vacío, procesando todo lo que me ha dicho, y es cierto, no es una mala persona, no ha hecho nada malo, es como si fuera un ángel.

Lazos Peligrosos [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora