Secretos del pasado (BTS Y Tu)

Te necesito

La orden había sido emitida y la cacería había comenzado. Aunque no esperaba o más bien estaba segura de que no le atraparían. Por esa razón moví todos mis hilos, los chicos estaban en mi empresa, volviendo a la normalidad o al menos intentando hacerlo.

No los había vuelto haber desde el día que me fui para tomar el control de la empresa, pero sabía que estaban a salvo, había gente de mi confianza por todo el edificio, pero también sabía que llegada las 10 de la noche estaría sola y solo ahí, cuando Ian descubriera eso, vendría a buscarme pero sería tarde, no para mí como él podría pensar, sino para él.

- Tn. No he logrado encontrar a Ian. - Ahn interrumpió en mi despacho para decirme aquella noticia, pero estaba claro que tampoco había buscado demasiado. Aunque daba lealtad hacia él.

- No importa. No esperé que lo encontraras. Necesito que me lleves a su casa. - pronuncié tras mirarlo. - Recuerda, debemos de estar antes de la convocatoria de prensa. - Había decido dar la cara y aunque sabía que eso podía atraer enemigos, no me importaba. No en ese momento.

- Tn, siento que no confías en mí.

- Si no confiara en ti, no te llevaría conmigo. Hay una parte de mi, que aún piensa que le eres leal a Ian. No puedo dejar de pensar en eso. Ahn, tú mataste a mi familia. - En ese momento Namjoon entró por lo que ambos le miramos. Aún no le había dicho aquello y si realmente lo sabía, estaba segura que no esperaría que fuera tan cercana a él. 

- Esperarme abajo, bajaré en cuanto me desocupe iré contigo. - pronuncié tras mirar a Ahn ligeramente. Se fue del despacho, por lo que miré a Namjoon.

- Aún sigo preguntándome como haces para estar a su lado.

- A veces, hay que olvidar todo el dolor que causó una persona para poder llegar hasta donde quieres llegar. - me acerqué a él y lo miré detenidamente. Quería besarle, abrazarlo, pero y si él ya no quería.

- Siento que tengas que pasar por todo esto tu sola. - pronunció tras llevarme hasta él y abrazarlo.

- Necesitaba tanto esto. - lo abracé con fuerza y después me apoyé en él. - ¿Cómo está Blake? - pregunté tras sentarnos en el sofá y apoyarme en él, mientras que entrelazábamos nuestras manos.

- Mejor, aunque no para de maldecir. Ya sabes estar postrado en la cama no es algo que le agrade.

- No, desde luego que es nuestra mayor maldición. - expresé.

- ¿A dónde vas a ir con Ahn? 

- Voy a casa de Ian y antes de que preguntes o digas que es peligroso. No me importa, porque lo necesito. Necesito encontrar cosas que le incriminen. Porque, no quiero volver a ser la chica del pasado. No quiero matarlo, quiero que pague por lo que hizo. 

- ¿Qué harás con Ahn? - preguntó tras mirarme.

- No lo sé. Solo sé que pagará por lo que hizo, pero sabes enamorarse de la persona que debió de matar, también es un castigo. Soy el recordatorio de lo que hizo aquel día, soy la peor de las torturas. 

- Ten cuidado. - se levantó para dejarme marchar, por lo que me levanté.

- Cuida de los chicos en mi ausencia. - acaricié su rostro y después lo besé. Aquel beso dulce y era un recordatorio, una promesa aún vigente entre ambos, un volveré sana y salva ante ti.