Después de aquello cada uno se fue a su cuarto, ni siquiera podíamos hablar o al menos yo no tenía la necesidad de hacerlo, sabía que una palabra podría dar la duda o desmoralizar a todos, por esa razón la mejor opción era no hablar. Me acosté en aquella cama y apagué el teléfono móvil, lo menos que quería era escuchar aquel ruido incesante del mismo.
Cuando salí de la casa, aún no había amanecido, pero era lo mejor. Me dirigí hacia dónde había dejado el coche la otra vez y después caminé hacia la parada del bus. Cuando llegué a la empresa, el sol ya estaba puesto, me introduje al interior de la misma cuando vi a Ahn en la entrada. Mi ira se incrementaba por momento, pero a la vez mis también crecían mis ganas de venganza.
- Ian te está esperando. - me estaba analizando de arriba a abajo, podía notarlo su orgullo estaba herido.
- Bien, entonces llévame hasta él. Dime Ahn, ¿Hace cuanto tiempo estás sirviendo a Ian? - pregunté tras levantar la vista hacia él.
- Hace unos 20 años. - pronunció mientras que me miraba.
Sin duda aquel hombre estaba bajo la influencia de Ian, hacer que me reconociera y que se apegara a mí era algo que iba a costar, sobre todo, porque mi plan no era más que otro que hacerle sufrir y después desecharlo. Sonaba macabro, pero era lo que se merecía, o al menos lo mínimo que se merecía, porque si hubiera sido otra persona, eso hubiera acabado con un ojo por ojo, diente por diente.
- Sin duda eras joven cuando te hiciste su guardaespaldas. - pronuncié mientras que lo miraba. Ni siquiera llegaba a los 32 años, de hecho apostaría que tendría 29 años, aunque no estaba muy segura de aquello.
- Lo era, pero me enseñó un montón de cosas. - entramos en el ascensor por lo que le seguí.
- ¿A matar? - pensé mientras que me contenía, si hubiera sido en otro momento. Ahora mismo estaría contra aquel espejo y con mi arma en su garganta.
- Sin duda debes de estarle muy agradecido. - pronuncié tras lograr calmarme ligeramente.
- Sí, él me acogió cuando nadie estaba dispuesto hacerlo. - pronunció un tanto pensativo. Sin embargo, en aquellas palabras no había verdad. Blake jamás le hubiera abandonado, porque jamás fue capaz de hacerlo conmigo.
- Entiendo, te dio la libertad que otros te arrebataron. Sabes, sé que él te dio la orden de cuidarme, pero ¿Esta bien que confié en ti? - en ese momento lo miré a los ojos. La gente comenzó a entrar en el mismo por lo que ambos nos apartamos hacia atrás. Mi cuerpo estaba a apenas a unos pocos centímetros de él. Me era repugnante, pero era la forma adecuada de llegar hasta él.
- Mi trabajo, es protegerte. - me susurró. Aquel acto me desagradó de sobre manera, por esa razón cerré mis ojos e imaginé que Namjoon me estaba hablando y también imaginé que era él el que estaba detrás de mí. Sin duda si hubiera sido él, me hubiera gustado provocarlo.
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Secretos del pasado (BTS Y Tu)
FanfictionTN una chica de apena 20 años, decide escapar de todo cuanto ha vivido hasta ahora. Una vida llena de oscuridad, de catástrofe y de terror. No obstante, todo cambia cuando BTS se presenta en la puerta de su casa. Sin duda algo que en un primer mome...