Secretos del pasado (BTS Y Tu)

Conoces a mi padre

- Ahn, ¿Nos vamos? - pregunté tras llegar hasta él.

- Sí, vamos. - nos introdujimos dentro del coche y él condujo hasta la casa de Ian, tal y como había pensado, vivía en una casa ostentosa y sobre todo segura, debía de ser un paranoico para vivir en esa clase de casa.

- No creo que podamos entrar tan fácilmente en la casa. - respondí al ver el sistema de seguridad.

- Tengo las llaves.

- ¿Cómo puedes tenerlas? alguien como él jamás le daría las llaves a otra persona.

- Parece que le conoces demasiado bien. ¿Acaso nos investigaste? - sus ojos me analizaron y su cuerpo se movió rápidamente, tanto como para evitar que lo evadiera y escapará de él. Estaba pegada a la pared y con sus ojos fijos en mí.

- No me hace falta hacerlo, para saber que él mató a mis padres y hace un montón de cosas más. La casa, solo una persona que teme ser atacado por la noche, que tiene demasiados enemigos. Es todo cuanto necesito saber.

- Ya veo. - me soltó y después se dirigió hacia la puerta de la casa. La abrió fácilmente y después entramos al interior.  La casa estaba bastante ordenada, pero lo que más me sorprendía es que siendo una fortaleza, ¿Por qué no estaba allí? - Es por aquí. - lo seguí mientras que mis ojos analizaban cada detalle, cada rincón en busca de alguien que pudiera estar escondido.

Al entrar en el despacho mis ojos se posaron en un mueble que estaba ligeramente movido. Me acerqué y terminé de correrlo cuando vi la caja fuerte en aquella pared.

- No sé como abrirlo. - pronunció tras acercarse a mí

- Pero yo sí. - me senté en el suelo y después la observé, conocía esa serie, conocía el procedimiento que debía de hacerlo. 

- ¿Quién eres realmente? - preguntó tras agacharse a mi altura, me miró fijamente y después se levantó.

- Alguien que tuvo que salvar su propia vida. - pronuncié antes de lograr abrirla. Al ver los documentos, mis manos los agarraron rápidamente y después los eché un vistazo. - Ese hijo de perra lo documentaba todo. 

No pude evitar sonreír ante aquello, tenía material necesario para poder encerrarlo, pero eso no era todo, eso solo era una de las piezas que necesitaba para poder encerrarlo, aunque algo me decía que no iba a acabar encerrado.

- ¿Y tú qué clase de persona eres? - pregunté tras alzar mis ojos hacia él.

- Yo... tuve que convertirme en esto.

- Cómo alguien que puede tener lo que quiera y ser el jefe, termina bajo las ordenes de Ian y matando a gente inocente.

- El señor Ian me dio una casa, un lugar al que pertenecer.

- Supongo que Blake no era capaz de hacerlo. Porque no creo en tus palabras. - en ese momento desvelé aquel secreto.  Agarré las cosas y después fui hacia la salida del despacho cuando me retuvo.

- Conoces a mi padre. - me agarró del brazo y me miró fijamente.