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-- ¡No puedo creerlo!-- Dijo Krel con enojo.

-- ¿Qué sucede?-- Madre se acercó al moreno.

-- Adrien vino aquí, no hay forma de que pueda pelear con él.

-- Los golpes no revuelven nada, su alteza.

-- No me refiero a golpes. Sólo míralo.-- Le enseñó una foto se su celular.

-- Investigando en la red... Adrien Agreste. Famoso modelo de París, Francia. Con tan sólo catorce años debutó en la carrera de modelaje.

-- ¿Ves? Cuando Mari comenzaba a acercarse a mi aparece.-- Dijo con tristeza.

-- Descuide su alteza, recuerda lo que ella le dijo. Pero pase lo que pase, ella decidirá con quien quedarse. No quiero que se ponga triste si ella decide quedarse con Adrien.

-- ... Haré que se enamore de mi.-- Corrió a su laboratorio.

-- ¿Qué piensa hacer?-- Madre lo siguió.

-- Retomar mi creación de los lentes que leían la mente.-- Comenzó a hacerlos.

-- Recuerde que mañana tiene clase, no puede desvelarse.

-- No pasará, aunque si es necesario... Mañana en la mañana quiero probarlos.

Madre suspiró y salió del lugar. Cuando se hizo de día, Aja se levantó y notó que Krel no venía, así que decidió ir a su cuarto, pero no estaba. Fue al laboratorio y estaba dormido recargando su cabeza en la mesa.

-- ¡Krel!-- Gritó la joven haciendo que el chico se despertara de inmediato.

-- ¿¡Qué?!-- Dijo aún adormilado.

-- Llegarás tarde a clases, cerebrito.

-- ¿Clases? ¡Es verdad! ¡Los lentes!-- Los tomó.

-- ¿Volverás a usarlos? Es por Mari ¿No?

-- Si, necesito despejar mis dudas.

-- Está bien, sólo no te metas en problemas.

-- No lo haré, ahora a probarlos.-- Se los puso y miró a su hermana. -- Piensa en un número.

--...-- La chica le hizo caso.

Arriba de su cabeza se encontraba el número seis.

-- ¿Seis?

-- Bueno, si funcionan. Úsalos con responsabilidad, hermanito.

-- Descuida, sólo necesito despejar dudas.

-- Pues vámonos porque ya es tarde.

Los chicos guardaron sus cosas y fueron a la escuela, Krel tenía los lentes en sus manos, cuando puso su vista al frente, Marinette estaba parada en la entrada del plantel.

-- Mari ¿porqué no entras?-- Se acercaron.

-- Los estaba esperando.

-- ¿Y Adrien?

-- Aún no vienen.

-- Vamos al salón.

Los tres chicos estaban caminando, cuando una voz masculina les llamó la atención.

-- ¡Mi Lady!-- Adrien fue con ellos.

Se encontraban en medio del patio.

-- Hola, llegaste justo a tiempo. Ya nos íbamos al salón ¿En dónde te tocó?

-- Esto...-- Le da la hoja a Marinette.

-- Es el mismo que el mío, genial.-- Sonrio.

-- Si, es grandioso. No estarás solo.-- Dijo Clara.

-- Bueno, será mejor irnos ya.-- Jim se acercó a Marinette.

-- Oh, es verdad. Jim, te presento a Adrien.

-- Un gusto.-- El rubio extendió su mano.

-- Lo mismo digo.-- le acepta el gesto.

Los chicos ya estaban en el salón, después de dos horas les tocaba clase de educación física.

-- ¿Que les parece? Ya tenemos uniforme.-- Dijo Marinette mientras daba una vuelta.

-- Me queda perfecto Mari, conoces mi talla.-- Adrien le sonrio.

-- Obvio, eres mi amigo.-- Le sonrio.

Krel y Jim miraron a la chica sorprendidos.

-- Te ves bien.-- Dijo el moreno con un sonrojo.

-- Gracias.

-- Toby, ven tantito.-- Dijo Jim.

Toby lo siguió lejos del grupo.

-- Tienes que ayudarme.

-- ¿Qué sucede?

-- Mira, desde hace mucho estaba enamorado de Clara, pero desde que vi a Marinette siento que estoy enamorado de ella, pero no dejo de querer a Clara.

-- Pues escoge Jimbo, no puedes coquetearle a las dos, eso es grosero.

-- Lo sé lo sé, por eso quiero ayuda.

-- Marinette dice que no le interesa ninguna relación y Clara se ve que le gusta el chico nuevo. Con quien quieras estar a su lado, debes de pelear por su amor.

-- ¿Porqué dices que Clara le gusta el chico nuevo?

-- Sólo mira, es obvio, pero parece que el chico nuevo no se entera.

-- Mari me contó que estuvo enamorada de él y por mucho que se lo quería hacer saber nunca se enteró de eso hasta ahora.

-- Él es atractivo, miles de chicas lo aman, debe de estar acostumbrado a eso.

-- ¡Adrien Agreste!-- Varias chicas corrieron hacia él.

-- ¡Danos tu autógrafo!-- Dijo una de ellas.

-- Oh, claro.-- Sonrio.

-- ... ¿Ves?

--...

-- Vaya, si que eres muy famoso.-- Dijo Clara.

-- Muchas gracias, si. Aunque no suele ser algo bueno a veces.-- Sonrio nervioso.

-- Sonrio nervioso

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LIMÓN & SAL ■ KRELNETTE °•▪︎°'•▪︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora