Mi teléfono suena en mis pantalones.
Intento secarme las lagrimas y calmar mi respiro mientras miro la pantalla con horror y descubro justo lo que esperaba.—Son mis padres. -Digo sin fuerzas.
—Puedes explicárselo, tranquila, cariño. ¿Quieres que te ayude?Yo niego con la cabeza.
—Ahora vuelvo.
Me doy la vuelta y voy a la cocina.
Respiro hondo cuando cojo el móvil.—¿Kate? -Es mi padre.
—Hola papá.
—¿Qué haces con el tío de las fotos?
—Se llama Adam. -De repente estoy furiosa. Lleva días sin llamarme ni preocuparse por mi ¿y ahora me habla así?- Me sorprende que me hayas llamado tan rápido. El día de mi cumpleaños no te preocupaste en hacerlo.
—Hija, tú madre y yo hemos... estado ocupados. Con cosas importantes.
—¿Qué hay más importante que felicitar a tu hija el día de su veintiún cumpleaños?Mi padre resopla al otro lado de la línea.
—Te lo contaremos cuando vuelvas a casa. Tienes que volver ya, ¿dónde has vivido todos estos días? ¿Con el cantante ese?
—No voy a volver papá. Ya no vivo allí. -Respondo firme aunque con miedo.
—Claro que si, eres mi hija y harás lo que yo te diga.
—¡Ya soy mayor de edad y puedo tomar mis decisiones!
—Me importa una mierda tu edad, te estoy diciendo que vuelvas a casa. -Escucho que mi madre le regaña por sus palabras.- Por las buenas, o por las malas. Si no vienes -hace una pausa- denunciaremos al mamón con el que estás.Abro la boca y aprieto los puños.
Mi propio padre no puede estar haciéndome esto.Sé que es capaz de denunciar a Adam, y no puedo permitirlo.
Me giro y le miro, está en el salón, con expresión preocupada y caminando de aquí para allá.—Está bien. -Me rindo.- Voy ha hablar con vosotros, en media hora estoy allí,
—De acuerdo. -Me cuelga.Miro el móvil sin creerme lo que acaba de pasar.
Camino hacia Adam, despacio, derrotada.—¿Qué te han dicho? -Pregunta al instante.
—Voy a ir a casa para hablar con ellos.
—¿Están enfadados?
—Están furiosos, Adam. -Levanto las manos con exasperación.Resopla y se pasa las manos por el pelo.
—¿Quieres que te lleve?
Niego con la cabeza.
—Lo último que quieren ahora es vernos juntos.
Me dirijo a la puerta sin perder el tiempo.
—Los Grammy's empiezan a las diez, pero tenemos que salir a las nueve y media.
—Volveré antes. -Espero.
—Llámame cuando llegues.Adam se acerca y pone sus manos alrededor de mi cara.
Me besa con fuerza, exasperación, miedo...—Todo irá bien. -Susurra.
Yo asiento con la cabeza y salgo de casa.
Por primera vez, vuelvo a sentir el pánico que tenía antes de conocer a Adam mientras me dirijo a casa de mis padres.
Y es aterrador.Narra Adam:
No puedo quedarme en casa sin hacer nada.
Estoy demasiado acojonado.Así que me dirijo a la habitación con grandes zancadas y me cambio de ropa para ir al gimnasio.
Hace mucho que no voy y necesito descargar la tensión que se a acumulado en mi pecho.
¿Quién coño hizo las fotos?
Quiero encontrarlo y partirle la cara por hacer que nuestra relación peligre de esta manera.
ESTÁS LEYENDO
Stay (Adam Levine)
Romantik"Y entonces llegó él, y consiguió que la sonrisa de la chica, no estuviera rota nunca más"