La Heredera De Dioses

Amor y ¿un bebé?

- Hija ¿puedes ayudarme con Poseidón?- ¿Estás de broma? ¿Yo y Poseidón juntos?- Atenea, solo... por hoy, por amor a los dioses.- Esta bien...padre.

Atenea se fue un poco enojada, nunca logró encajar con Poseidón y demás se llevan fatal. Ella antes de hacerle el favor a su padre se fue al cuarto de una de sus tías. Hestia estaba de lo más normal en su cuarto hasta que, escucha que alguien abre la puerta fuertemente.

- ¿Porque a mi?- Eso mismo diría la puerta ahora mismo- Tía Hestia...¿porque me tiene que poner a trabajar con Poseidón? ¿No puede ser con otro?- Atenea, afrontalo ya...él te gusta desde hace mucho pero, no puedes aceptarlo porque- Está mal tía- Zeus está casado con su hermana...HERMANA ¿lo sabes verdad?.

Atenea le iba a dar la razón a su tía Hestia pero, piensalo un minuto Atenea y Poseidón juntos como pareja...seria raro porque ello se llevan horriblemente mal.

- Tía, estás más loca que un sátiro. Adiós tía.- Adiós Atenea.

Cuando Atenea salió del cuarto de su tía Hestia, no se dio de cuenta que alguien las escuchaba y ese era Poseidón, él tenía una sonrisa triunfadora como si hubiera ganado un premio o algo valioso. Él estaba enamorado de ella desde que Atenea quedó embarazada de un mortal y tuviera a una hija Annabeth Chase pero, el punto es que ahora la podría conquistar. Después de un rato, Atenea fue hacerle el favor a su padre que era junto con Poseidón.

- Hola sobrinita ¿estás lista?- Poseidón le extendió la mano y ella temblorosamente la cogió- ¿Para donde vamos? ¿no íbamos hacer lo que nos pidio mi padre? - No pero quiero mostrarte algo muy especial para mi.

Atenea y Poseidón salieron del Olimpo para el mundo mortal. Ya en el mundo mortal, sus ropas cambiaron por algo humano y tamaño adecuado. Ellos fueron a un muelle que les quedaba cerca de un pequeño bosque, ahí Poseidón se metió en el agua haciendo que su ropa cambiara. Atenea al ver eso se sorprendió por la forma en que su poder hacia eso.

- Sobrinita, no te quedes ahí ven.

Atenea se metió en el agua para, que después Poseidón con su poder controla el agua haciendo que, Atenea obtenga un traje de cuerpo completo con escamas verdes y de calzado unos tacones a juego con el traje, su cabello recogido finamente con caracolas y una pequeña corona en su cabeza.

- Te queda el estilo Atlanteano, Atenea.- Gracias...a ti tampoco te queda mal.

Él tenía un traje de cuerpo completo color gris y su tridente a la mano, para Atenea eso era lo más atractivo posible pero, rapido quito esas ideas de su cabeza. Poseidón hizo que ella pudiera respirar agua pero, no podía nadar sin ayuda así que para suerte de Atenea, tenían que estar agarrados de mano pero, al tacto de este él se impuso y fue a gran velocidad. En el camino para Atlantis segun ella, ella veía todo con asombro y belleza. En el mar se sentía como en casa, todo era pacífico y en perfecta armonía.

- Nunca imagine que el mar fuera tan...- ¿Pacífico?- dijo él yendo más lento- Exacto. De alguna manera me siento en casa.

Poseidón paro y como ella no puede nadar sola, él la agarró por la cadera y la pegó a él de tal manera que sus cuerpos se tocasen uno con el otro, por puro instinto ella puso sus manos en el pecho de este con sus miradas conectadas.

- ¿Porque me miras así?- preguntó temerosa Atenea- ¿Qué me has hecho.... mi pequeña sobrinita?.

Poseidón se acercó a ella y le beso, para Atenea fue una gran sorpresa pero, no podía negar que el besaba muy bien. Atenea subió sus manos hasta su cuello, en el cual hizo un poco de presión para profundizar el beso. Poseidón la atrajo más a él si eso era posible, él bajó sus manos desde la cadera hasta sus muslos para que ella los enrollara en su cintura, y este nadando la llevó a un arrecife de coral que estaba allí. Con suma delicadeza la puso entre las algas marinas.