La Heredera De Dioses

Temblores

Cuando ambos chicos llegaron al campamento, no había pasado ni siquiera un minuto de su llegada y la tierra empezaba a temblar de manera sobrenatural. Atheneisa y Dementer tuvieron que tirarse al suelo y gatear porque no podían moverse por el temblor. El campamento se veía que estaba desalojado en esa área y era un alivio para ambos, ya que ramas de los árboles caían al suelo y destruía algunas cabañas, equipos de entrenamiento y enfermerías. Atheneisa y Dementer tuvieron que alejarse del agua, y árboles por precaución. 

- Atheneisa ¿no podrás usar uno de tus poderes?- preguntó Dementer 

- No puedo. Solo manipulo la naturaleza de plantas y animales, además no me parece correcto que tenga que detener este terremoto.

- Solo inténtalo por favor, la tierra se podría abrir y nosotros podríamos caer.

Atheneisa aún de rodilladas, coloco ambas manos en el suelo y sintió en la misma tierra una especie de fuerza o aura que no era de la naturaleza en si. Trato de parar el terremoto pero, no estaba ocurriendo un terremoto de tierra, la tierra estaba tranquila. Lo que pasaba no era por la misma naturaleza era por otra cosa. 

- Dementer, esto no es un terremoto de tierra.

- ¿Cómo que no es un terremoto? todo el campamento esta temblando.- miro confundido a Atheneisa.- ¿quieres decir que esto esta pasando por alguien?

- No creo que sea alguien... creo que mas bien es un algo.

Ella a través de sus manos envió energía a la tierra, por una fracción de segundo todo lo que se creía que era un temblor paro para de nuevo volver hacerlo. 

- No sé que hiciste pero, esta claro que funciono. ¿Crees que podrás poder hacerlo hasta que busquemos a todos?

- No estoy segura pero, si me concentro creo que lo podré lograr.

Ella despego sus manos y trato de levantarse del suelo, el equilibrio no era muy bueno porque aún seguía el temblor. Al estar parada, de sus manos salió una luz color verde y mientras pensaba en el mismo temblor todo paro. Ambos lograron salir de esa área del campamento, algunas cosas estaban destruidas, pero se veían que se podían reparar o reemplazar por algo mejor. Había ramas muy grandes en el suelo, por lo que Dementer tuvo que quemarlas o moverlas del camino para seguir el camino y buscar a los demás semidioses, y dioses del campamento. El área más afectada fue el de los dioses, Dementer pensó lo peor porque Hades y Perséfone seguían heridos, no había rastros de heridos o muertos y para ambos fue un alivio grande en no tener que encontrarse con un amigo o conocido muerto o herido por lo que este causando el temblor. 

- No hay nadie en todo el campamento, por lo que se puede ver ellos lograron salir.

- ¿Dónde... c-crees que... ell-llos estén?- decía con dificultad. Todo el esfuerzo la estaba agotando porque tenía que mandar una gran cantidad de energía para calmar la "tierra".

- Hay un refugio cerca del monte pero, tenemos que caminar un poco más y por lo que veo no sera posible si estas teniendo que mandar esa gran cantidad de energía.- él la aguantó por los brazos- ¿podrás aguantar en lo que los busco?

- No te dejaré solo, yo... po-podré llegar.

- Eres terca y eso te va a matar, pero aún a si no cambiaras de parecer ¿verdad?.- ella negó- me lo temía... esta bien, ya vámonos. 

Fueron a paso lento por Atheneisa. Aveces las luz verde que salía de sus manos parpadeaban y se podía sentir que temblaba, Atheneisa mandaba aun más energía cuando eso pasaba y Dementer la tuvo que cargar estilo princesa para poder seguir en el camino. 

- Debes de parar Atheneisa, deja que todo tiemble un poco para que descanses. Es demasiada energía incluso para un dios del Olimpo.- dijo preocupado

- N-No pararé... sigue ca-caminando.- ella aun con una de sus manos apuntando al piso.- solo llega rápido.