Habían pasado dos días desde aquel beso, Hermione estaba evitando a Draco, pues ella sabía que ese beso había sido un error, un simple impulso que tuvieron ambos y nada más, al menos se obligaba a pensar eso. Siempre supo que Draco era el más apuesto del colegio, de eso no había duda, pero por cómo la trataba siempre, ella no se hubiera imaginado jamás que algún día se besarían, y de esa forma tan apasionada como ellos lo hicieron.
Después del beso, ninguno supo qué decir, todo parecía muy confuso, ambos con la respiración agitada, solo se separaron y cada quien se dirigió a su dormitorio; toda la noche pensaron en eso, seguro solo fueron las hormonas, porque les parecía muy raro que eso fuera algo más. Draco debía casarse con ella en algún momento, pero sin involucrar sentimientos, por lo menos los de él, no entendía qué era eso que sintió cuando la besó, fue algo como tranquilidad en su corazón y mente, algo que nadie le había dado nunca.
Hermione y Ron habían puesto fin a su relación, él le pidió perdón y le dijo que lo que ocurrió con aquella chica no había podido evitarlo, ella estaba decepcionada de él porque le ocultó algo importante, pero en honor a la amistad que habían tenido durante largos años tratarían de llevarse bien, como antes, aunque les cueste tiempo y ella tuviera su corazón hecho pedazos.
Aún iba después de salir de clases al lago negro, veía el hermoso paisaje del atardecer y con un buen libro a la mano se sentaba junto a un árbol, estaba tan concentrada en su lectura que no notó que unos pasos se iban aproximando, pero sí que se asustó cuando esa persona sin pronunciarse, se sentó junto a ella.
- Malfoy – él ni si quiera la veía, estaba observando el paisaje y también llevaba un libro en sus manos. Hermione no dijo nada más y prefirió concentrarse en su lectura, además de que sintió un ligero rubor recorriendo su rostro, prefería que Malfoy no la viera así.
Pasaron los minutos y ninguno de los dos decía nada, Hermione ya se sentía incómoda y creyó que sería mejor marcharse.
- Espera Granger – ella lo vio, pero seguía puesta su mirada en el lago – Escuché que la comadreja y tú ya no están juntos.
- Así es, pero ¿tú qué tienes que ver con eso? ¿Acaso te importa, Malfoy?
- Para nada, es solo que me pareció extraño, eso es todo.
- ¿Por qué me besaste Malfoy? – ya no pudo aguantar más y se lo preguntó, estaba harta de andar pensando en las posibles respuestas, quería que se lo dijera él mismo.
- Un impulso, supongo. Cuántas chicas desearían haber estado en tu lugar, pero tampoco te creas tan especial por eso, Granger.
- Eres un idiota – sintió algo extraño dentro de ella cuando él se lo dijo, estaba cansada de él, no quería volver a verlo. Se alejó del lugar y lo dejó solo, pediría que sea cambiada de torre o por lo menos que le dejen regresar a su antiguo dormitorio en la casa de Gryffindor, por lo visto no iba a soportar estar junto a Malfoy todo un año.
Hermione se dirigió al despacho del director, le mencionó que no quería compartir torre con Draco, él era una persona egoísta, narcisista, ególatra y maleducada que solo buscaba ofenderla cada vez que podía. Al inicio del curso, Dumbledore le había dicho que eso era imposible, pero viendo que su enemistad continuaba, sin más remedio aceptó cambiarla a su antiguo dormitorio. Solo tendría que compartir una noche más en aquel lugar y al día siguiente se marcharía.
Los elfos le estaban ayudando a Hermione con las maletas, sería más sencillo que ellos las llevaran porque podían transportarse fácilmente de un lugar a otro en tan solo un momento, pero las maletas estarían recién arregladas para la noche. Draco había salido muy temprano esa mañana y ni estaba enterado de que Hermione se mudaría. Estaba dando unos paseos por el jardín, cuando escuchó a unos alumnos de primero haberlo mencionado a él y a Granger y se detuvo a escuchar.
- ¿Entonces es por eso que ya no vivirán juntos los premios anuales? – decía una estudiante de Ravenclaw a otros de su misma casa.
- Sí, escuché que toda su estancia en el colegio fueron enemigos, además de que él fue un mortífago.
- Entiendo el por qué ella no quiere vivir en su misma torre, debe ser horrible tratar de convivir con un mortífago, ¿cómo es que no está en Azkabán? – Draco los escuchaba de cerca, ¿por qué dicen que ya no vivirán juntos? Con suerte los alumnos no conocen el rostro de Draco, sino supieran que es él el que escucha su conversación detrás de una pared y seguro se asustarían, porque seguro lo odian y lo temen por ser un exmortífago.
- ¿Pero ya se mudó? No desearía que esa pobre chica tenga que pasar un momento más con un Malfoy.
- Aún no, unos alumnos de quinto me dijeron que se mudaría en la noche.
Hermione después de un largo día de clases y de pasar con sus mejores amigos, pensó que sería mejor apresurar las cosas, ya les había contado a ellos que se mudaría, pero al parecer ya lo sabía todo el colegio, ahí las noticias vuelan. Fue a la torre de premios anuales solo para comprobar que nada se le había olvidado ahí, pero al entrar en su habitación, notó que todo estaba como antes; su ropa estaba perfectamente colocada en el armario, su uniforme bien doblado en una silla y todos sus zapatos y demás en el puesto. No entendía qué es lo que pasó ahí, se supone que todo estaba listo para que ella se fuera, las cosas para ese entonces debían estar en su recámara en Gryffindor. No entendía nada, tendría que ir con Dumbledore a preguntarle sobre lo sucedido, seguro él les dio la orden a los elfos de acomodar todo como estaba desde un inicio.
- Granger, me enteré que te ibas.
- Sí Malfoy, eso se suponía, al parecer Dumbledore cambió de opinión – estaba mirando todas sus cosas, el director ya había accedido por fin a su petición y ahora otra vez se negaba.
- Lo sé, le dije que te quedarías, que ya no pensabas mudarte y que preferías seguir viviendo aquí en lo que resta del año – Hermione lo miraba con ira, su corazón le latía más fuerte por la rabia, ya todo estaba planeado y él lo había echado todo a perder.
- ¿Por qué Malfoy? ¿No querías tú al igual que yo, estar lo más lejos posible el uno del otro? Pues eso es lo que había conseguido y tú lo acabas de arruinar, eres la persona más egoísta que he conocido, solo quieres que me quede para poder expresar tu enojo conmigo después de un día difícil, tú me odias y yo a ti, quiero que vayas donde Dumbledore y le digas que yo sí quiero cambiarme de torre.
- No lo haré. – Lo decía con su típica voz pretenciosa.
- ¿Por qué? – se lo dijo casi en un grito.
- Me gustas, Granger – ella se había quedado sin voz, no sabía qué decir ante eso, no podía creer que Draco Malfoy le estaba diciendo aquello, su corazón parecía haberse detenido cuando escuchó esas palabras. Ahora, ¿qué respondería ella? ¿También le gustaba o no? De eso iban a depender muchas cosas para su futuro.
*Espero que les esté gustando, por fin Draco tomó valor para decírselo.
Gracias a todos por leer, de a poco vamos sumando más lectores a esta humilde historia de Dramione.
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Si me enamorara de ti... [Dramione]
FanfictionLos Malfoy han logrado manchar su apellido por la fidelidad que tenían con el señor tenebroso, tanto así, que la comunidad mágica ya no los respeta para nada. Narcissa Malfoy deberá reparar eso por su bien y el de su hijo, por lo que lo obligará a c...