GOLPÉAME

7

- y... ¿que te parece éste? - miro por arriba de mi teléfono y niego con los ojos cerrados. Le envío un HELP ME a Johnny a lo que el responde con un YA CASI.

- Y éste? ¿Qué tal? - dice Evangeline tomando otro vestido negro.

- no tienes mucha variedad - dice con una mueca y tomando con dos dedos otro vestido negro, Tatiana.

- ya sé que ponerme, dejen de urgar en mi ropa. Más les vale que esté ordenado cuando salga de la ducha.

Meto mis piernas en el agua, seguido del resto de mi cuerpo, tiro el teléfono sobre la alfombra y me sumergí por completo en la tina, quizás alguien me llamaría loca por estar metida así con el agua tan fría y con esta temporada; pero... ¿Qué puedo decir? Amo el frío. Las vibraciones de mi teléfono hacen que saque la cabeza de inmediato.

Video llamada grupal?

- ¿hola? ¿Qué diablos sucede?

- Lucy, debemos hablar.

- y tenías que ver que hacía para hablarme, Sebastiano.

- esto es serio Aisha, debemos vernos en persona.

- ahora, ¿qué sucede Derek?

- iremos a tu casa - hablan al unísono.

- saldré de casa y no estaré de regreso hasta las 12.

- hasta entonces - y cuelgan.

Puff, ¿ahora qué querrá el jefe?

Termino de hacer mis necesidades y salgo envuelta en la toalla y me seco con otra el cabello. Miro con seriedad a las chicas, que están dándome la espalda, cada una con un vestido y mis botas puesto.

- creo que les queda algo grande - ambas se asustan y de inmediato se los quitan - vamos, que ya debemos ir al restaurante, la reservacion es a las 8.

- son las 7, por que no me habías dicho - dice corriendo Evangeline al baño.

***

- señor, ¿podría apresurarse?

- Eva, ya te dije que no importa, igual llegaremos a tiempo - digo sin dejar de mirar mi teléfono.

- ella es así, se tarda un montón y luego desespera a todos - dice Tatiana prestándole la misma atención que yo.

Miro por sobre mi teléfono las calles que el taxista toma, le indique la dirección por el camino más largo así Evangeline no sabría que iremos a su casa.

- Tatiana, vendale los ojos - dije al ver que ya nos estábamos hacercando.

- ¿Quéeeeeee? - expresa asustada - no porfavor, quiero ver el camino. ¿Y si me matan O me secuestran? - dice impidiendo que su amiga le ponga la venda.

- de ser así, ya estarías muerta. - dije con toda la calma. Vi como tragaba en seco y cedía.

- llegamos - nos indica el taxi, le pago y ayudo a Eva a salir.

- cuidado que hay un escalón - le aviso para que pise con cuidado, la sostengo del brazo hasta abrir la puerta, le quito la venda y...

- SORPRESA! - gritan todos a lo que yo doy un paso hacia atrás, pero la muy tarada me abraza con fuerza.

- Gracias, muchas gracias. - me besa la mejilla y corre en dirección a sus amigos.