¿Lo Intentamos?

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Al día siguiente durante la mañana, me encontraba en la cocina leyendo el periódico matutino del vecindario. Era un desperdicio de papel no leerlo. En una de las noticias apareció que en la preparatoria Bulls De survilla, un grupo de adolescentes habían causado un incendio accidentalmente en los salones de química. Judy se encontraba preparando café y tuve que contárselo.

—Es increíble que esto ocurriera  un año después desde que estudié allí y estos alumnos causando incendios, espero no haya heridos.

—¿Alguna vez te paso algo similar? —preguntó ella.

—No pero sí pasamos por muy malos momentos en química; muchos reprobaron esa materia y podría decir que era excelente en ella. ¿Qué tal quedó el café?.

—Por qué no lo pruebas tú mismo y me dices.

Ella tomó mi taza favorita, y me sirvió un poco del café que había hecho, puso la taza encima de la mesa para después darme un beso en la mejilla. Aún era extraño, fue todo muy rápido, no podía meterme en la cabeza que ella y yo estuviéramos intentándolo. Me agrada su compañía; salir con ella a divertirnos en el vecindario, abrazarla, sentir su agradable calor al ver televisión, cantar canciones viejas, jugar como niños en los viejos columpios de los parques. Sin embargo aún me limitaba a hacer algunas cosas con ella, como por ejemplo el día en que intento meterse a la ducha conmigo, o cuando intentó seducirme durmiendo sin camisa abrazados en la cama. No sentía la necesidad de querer algo más, era feliz y me sentía satisfecho por su manera de tratarme. ella me dice "Te quiero, Markus" yo le respondo "Yo también te quiero" y terminamos abrazados expresando nuestros momentos de tristeza; Judy era linda pero de algún modo, cuando salimos a pasear por las calles de Survilla,  pareciera que estuviese con una amiga cualquiera. No sentía el mismo amor cómo lo sentía al estar con Anna, extrañaba que Anna me abrazara por la espalda haciéndome cosquillas, que me besara y nos escondieramos en su habitación. Todo eso no era lo mismo con Judy, no quería conformarme, quería estar seguro de lo que sentía por ella. Quizás era cosa de acostumbrarme. pero algo era seguro: no importa si me acostumbro o no, una vez Roger casado con la madre de Judy las cosas no volverían hacer igual, aunque ella no pensará lo mismo.

una puesta de sol de un sábado frío, me encontraba con Judy respondiendo preguntas con opción múltiple mientras ella daba vueltas en círculo con una patineta sobre la calle. Yo me encontraba sentado en la banqueta sosteniendo el libro con preguntas que respondíamos una por una.

—Esta es Interesante: poder corregir  errores del pasado o poder saber el futuro ¿Qué escogerías? —pregunté.

—Esa pregunta es sencilla de responder, me gustaría corregir el pasado, hay muchas cosas de las cuales no me siento orgullosa—respondió ella.

—¿De verdad? — dijem

—No. Escogería saber el futuro- afirmó ella riendo—. ¿Y tú?

—Pues creo que igual, saber futuro, así me ahorraría muchas preocupaciones, quizás para saber si seré mejor persona, si tendré hijos o si algún día mi tendré propio auto —respondí, riendo.

la plática iba bien mientras el viejo libro de preguntas se iba haciendo cada vez más y más delgado, preguntas interesantes, curiosas y estúpidas. Hasta que en un descuido por parte de Judy, resbaló de la patineta, cayendo sobre el suelo húmedo. Por instinto me levanté rápidamente de la banqueta para auxiliarla, dejando aún lado el libro.

—¿Nena, Estás bien? —pregunté ayudándole a levantarse.

— Sí, estoy bien. No te preocupes.

Judy se levantó rápido, riendo y sacudiendo su camisa que se había llenado de tierra húmeda.
La ayudé con eso.

Media noche 🌃 Mi DilemaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora