Media noche 🌃 Mi Dilema

¿Qué Debo Hacer?

Los preparativos de la boda iban muy bien ya que la señora Katerine había seleccionado con éxito a los invitados. Serían un total de 76 invitados, entre los cuales la mayoría serían familiares y amigos de la señora Katerine que vendrían en diferentes lugares del país y Canadá. Por parte de Roger solo habría algunas amistades lejanas y obviamente nuestra familia, el sentía cierta desconfianza ya que no conocía como tal a la familia de Katerine, seria algo complejo ver su reacción ya que la primera impresión siempre es la más importante.

Durante la noche de ese día, Me encontraba en mi portátil checando mis redes sociales, una sugerencia de amistad llamo mi atención. No podía creer de quién se trataba; era Brand, con una apariencia diferente. como muchos saben, Brand es mi archienemigo de toda la vida y la última vez que nos vimos en el parque donde casi todo termina en un problema mayúsculo tenía una apariencia totalmente diferente a la que podía ver en su foto de perfil. Sebhabía cortado el cabello. Usaba ropa más formal y utilizaba zapatos, «¡zapatos!» lo cual me parecía raro ya que él, por ningún motivo usaría esos atuendos. Quería ver si había más fotos de el pero esa cuenta había sido creada recientemente.
Tomé captura de pantalla y dejando aún lado las absurdas disputas, se las mandé por mensaje privado a Carlos y Diego, quizás ellos podrían darme alguna respuesta. Sonó el teléfono de la sala y me levanté para responder la llamada, pero antes de que llegara al mismo, mi tío Roger salió de la habitación de huéspedes corriendo y tomó el teléfono respondiendo la llamada, parecía como si el estuviera esperando esa llamada, en voz baja y con señas, me dijo que él se encargaba, se me hizo algo extraño. Regresé a mi asiento y pude notar que hablaba con mi abuelo materno.
Roger hablaba algo nervioso y tartamudeaba, respondía preguntas sobre la boda pero no podía lograr escuchar con claridad algunas cosas desde mí lugar. En cuanto terminó de hablar me levanté y me acerique a Roger, tenía mucha curiosidad de saber por qué habló con ellos. Hacía tiempo que no sabía nada de mis abuelos.

—¿Todo bien, tío? —pregunté.

—Sí, sobrino. No te preocupes. era tu abuelo... Está un poco enfadado conmigo porque no le avisé que vine a Survilla — respondió.

—Ha sido una semana muy ocupada, ya sabe, los preparativos, el salón y el banquete —contesté.

—Eso mismo traté de explicarle, pero es una persona muy susceptible; dijo que hablaría conmigo durante la boda de no sé qué. Al menos logré convencerlo a tiempo de que viniera —dijo él.

Eso me recordó que yo jamás pude convivir como tal con mis abuelos maternos, recuerdo que mamá dijo que ellos se alejaron durante mucho tiempo. Fueron muy pocas las veces en los que pude verlos en persona, son recuerdos bastante borrosos y tristes, pero durante la boda podría volverlos a ver.

—Sabes, Markus. Esto de la boda empieza a ponerme bastante nervioso. Nunca he conocido a los padres de Katerine, no quisiera que pensaran que soy muy poco para su hija. No sé qué opinen de que un mexicano se case este con una canadiense. y qué pasará si no les agrado —contó Roger.

—Vamos, de que hablas tío, eres una persona increíble no te subestimes —respondí.

—Markus, no sabes todo lo que he pasado estos años, lo poco que conozco de la familia de Katerine nunca les he sido de su agrado, y apenas pude lograr ganarme el cariño de Judy... Sé que esto es solo la punta de iceberg  pero es demasiada presión para mí —contó él.

—Le aseguro que se preocupa demasiado por nada, usted preocupese por pasar la noche más importante de su vida totalmente serenó y calmado — dije, tocando el hombro de Roger.

— ¿Tú crees, Markus?— preguntó dudoso.

—¡Seguro! —afirmé

— Ojala todo fuera como eso, Markus. Gracias.

Llevé a Roger a su habitación y me quedé en la sala toda la noche revisando mis redes sociales. Quise saber un poco sobre ella, sobre Anna, revisando su perfil de Facebook, eran poco más de las 2 de la mañana y buscaba en algún sitio su estado, ella no se había conectado desde hace 3 días atrás, dejándome muchas dudas de que había sucedido con ella. Quizás ella no me echa de menos como yo a ella en momentos de soledad como Ahora. Pero si nuestro orgullo seguía dominando nuestra transparente relación, no resolveríamos nada.

No recuerdo cómo pasó pero, a la mañana siguiente, me levanté en la sala de mi casa, tapado con los pequeños colchones de mi sofá. Alguien tocaba la puerta de la entrada muy temprano, me levanté y fuí a ver de quién se trataba. En cuanto abrí la puerta, ví a Jessica, Andy y a Karen que entraron sin previo avisó a la casa sin decir nada.

—Ah... ¿Pasen?— dije dudoso.

Cerré la puerta y y volteo a verlas un poco confuso.

—Antes de que digas algo, queremos pedirte disculpas por nuestra reacción de la última vez que nos vimos —dijo andy.

—Bueno, yo no sé de qué se trata esto. Solo me hicieron venir — dijo Karen.

—Has estado muy ausente en el grupo, Karen —Respondió Andy.

—Está bien, no importa— contesté.

—No. Sí importa, Markus... Responde algo ¿Enserio no piensas solucionar el conflicto que tienes con Anna? —preguntó Jessica.

—Chicas... Otra vez lo mismo, ya les dije que no sé, necesito solucionar otras cosas que están pasando ahora conmigo— dije yo.

— Markus, Anna está cometiendo el error más grave que jamás haya hecho— dijo Andy.

—De qué... Error hablan— contesté dudoso.

Ellas se miran entre si y algo dentro de mí sentía que subía y bajaba tras la duda que surgió.

—Anna... Ella está considerando seriamente en tener una cita con Brand —contó Jessica.

Cuando escuché eso, sentí cierta incómodidad y decepción. Anna Smith no podía caer tan bajo, pero el pensar mucho en lo nuestro, solo hizo que mis sentimientos por ella cayeran al suelo, sentí que algo se rompió en mí.

—Ella puede hacer lo qué quiera... Ya no somos nada— respondí muy decepcionado.

— Markus ¿Estás completamente loco? Vas a permitir que Anna acepte salir con ese tipo tan machista— dijo Andy.

— ¡Es decisión de ella y no mía!, Ambos hemos sellado la última página de este cuento y si cree que saliendo con Brand va hacer que la busque sin más, está muy equivocada— dije con un tono alto.

Las chicas me miran confundidas, quizás ellas tenían la esperanza de que reaccionara como ellas querían, pero Anna cruzó la línea está vez. Me senté en el sofá sin decir nada, mientras sacudía mi cabello.

— Markus... Tu amas a Anna ¿Lo recuerdas?— dijo Karen.

—T yo creí que ella a mí... Pero da igual ahora, entre nosotros aún hay amistad,  si eso les preocupa.

— Tu sabes que contarás con nosotros cuando quieras, markus.— contestó Jessica.

— Markus, cumplimos nuestro deber como amigos en contarte esto... Ahora está en tí decidír si luchar por un amor que tanto te costó recuperar o perderlo para siempre... Que tengas buen día— dijo Andy.

Andy sin decir más, salió de la casa cerrando la puerta, Jessica y Karen me vieron una vez más y salieron de igual manera. Me quedé viendo hacia el techo unos segundos para después levantarme y subir a mi habitación. Es increíble como un par de palabras pueden cambiarte el día, siendo de manera positiva o negativa ¿Que harías tú en mi caso?.