Capitulo 6.

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Fuera de la residencia de los padres de Julien,se estacionaba un carruaje,del cual un elegante Alfa bajo de el. Se aproximó a la entrada del hogar,percibiendo un conjunto de aromas,siendo que el único aroma que le importaba no era tan notorio como los demás.

La madre Beta al ver el carruaje fuera de su hogar,entro en pánico y rápidamente llamo a su esposo para que recibieran adecuadamente al invitado que esperaba impaciente al otro lado de la puerta,a la cual había llamado tres veces.

El padre del hogar abrió la puerta encontrándose con un apuesto lobo. Él no tenía idea de quién podría ser,y jamás pensó que sería alguien tan joven.

—Buenas noche señor.—Evan saludo como un caballero, levantando su sombrero de copa.

Mucho gusto.—Estrecharon las manos.—Puede pasar. Ella es mi esposa,Clarisse,y yo soy Robert.
El Alfa llegó hasta la mujer y beso su mano.

Tienen un hogar muy hermoso.—Comento Evan.

Oh,es usted muy amable.
La Beta parecía encantada con aquel Alfa,su esposo solo la observó.

En la entrada del lugar se hizo presente un pequeño Omega, cuyo olor atrajo la atención de Evan,quien parecía perdido ante tal belleza de criatura.

—¿Me permite su abrigo y sombrero,señor?.—Julien mantenía la mirada baja. Por orden de sus padres debía fingir que era el criado del lugar, aunque eso no sería difícil.

Y-Yo puedo hacerlo por mi cuenta, pequeño.—El Alfa se hallaba tan embobado que no noto como los padres de Julien intercambiaban miradas,su hijo estaba insultandolos con lo que provocaba.

Ya te puedes retirar,yo te llamaré para servir la cena.—Clarisse tuvo que fingir simpatía por el Omega. Julien abandonó el lugar tan rápido como se hizo presente.

¿Quién es él?.—El señor Evan pregunto,viendo como la hermosa figura de aquel Omega desaparecía.

Es solo el criado.—Respondió tajante Robert.

—Ya veo.—Que sinvergüenza.Pensó el alfa.

Evan no podía creer lo que escuchaba,negaban ante él que aquel Omega no era su hijo,y lo hacían pasar por un criado. Estaba al tanto de los maltratos que sufría Julien,pero jamás pensó que llegarían a tanto.

—Pero no nos quedemos aquí, que está congelando,pasemos al comedor,la chimenea está prendida para poder abrigarnos.—La beta le indico a su marido que lo llevará al lugar,mientras ella se dirigía a la cocina.

Ahí se hallaba Julien acomodando una vez más los platos y servicios.

—Escúchame bien.—La mujer llegó desafiante ante su hijo.—No quiero que te insinues como una zorra ante el Alfa que acaba de llegar. Él es un comerciante muy importante en el pueblo,y quizás quiera hacer negocios con tu padre,así que no estorbes,solo dedicaté a lo tuyo,¿Entendido?.

—Si,madre.—Julien quería llorar, pero no era el momento.

Clarrisse salió del lugar haciendo eco con sus tacones que golpeaban con rabia el suelo,no permitiría que su asqueroso hijo tratará de dejarlos mal ante el señor Evan.

—Disculpen la demora.—La Beta se hizo presente en el comedor con su cínica sonrisa y se sentó al lado de su marido,en el sofá.

No hay problema.—Evan sonrió igual de falso. Algo no le agradaba de esa Beta

Por cierto,¿A qué se debe su visita?,nuestro hijo dijo que tendríamos a un invitado muy especial con nosotros en la cena de hoy.—Robert estaba más que intrigado.

El especial no soy yo,sino el motivo por el cual estoy aquí.—Los observó con astucia.

¿A qué se refiere?...

—Evan.—La Beta fue interrumpida por Adrián quien se hizo presente con su Omega.

¡Adrián!.—El Alfa se levantó de su asiento,y como si fueran niños se abrazaron amistosamente.

¿Cómo has estado?.

—Nos vimos hoy,recuerda que trabajo para usted.

—Es cierto,es cierto.—Ambos sonreían.—¿Pero el es tu Omega?.—Adrian asintió orgulloso.—Me alegra por fin conocerlo. Es muy lindo cómo para estar con un Alfa tan feo.—Adrian gruñó molestó.—Jaja, solo bromeó. Por cierto,¿A qué hora comemos?,tengo mucho apetito.

—Con mucho gusto.—Dijo Clarrisse.—Le diré a los demás que vamos a cenar para que nos reunamos en la mesa. Adrián ve y dile al criado que puede servir la cena.—Su hijo la miró molestó.

Él Alfa fue a la cocina para comunicarle a su hermano,y cuando llegó lo vio sentado en la silla con el codo apoyado en la mesa y la mano sosteniendo su cabeza,mientras dormía.

—¿Julien?.—Lo sacudió un poco, y este inmediato abrió los ojos.
Dice mamá que ya debes servir la cena.

—S-Si.—Se froto los ojos,dando un bostezo mientras se levantaba lentamente de la silla.

¿Quieres que te ayude?...

—No gracias,no quiero que mamá se moleste,tú ve con ellos y espera sentado.—Adrian hizo caso.

Julien acomodo el ganzo que yacía sobre una bandeja de plata,le unto un poco más de crema de espárragos,y siguió acomodando lo demas:los pimentones rellenos con huevo y queso,las tortillas de zanahorias, albóndigas hechas con pescado y decoradas con especias,entre otros platillos para acompañar.

Él Omega camino al comedor cargando la bandeja con el ganzo,y cuando se hizo presente en el lugar,todos prestaron atención a la comida,pero Evan solo tenía ojos en ese momento para Julien. Se dió cuenta que era el mismo Omega que había ayudado con el mercader del puesto de los pescados,no lo había notado por qué tenía la cabeza baja y su mirada se concentraba nada más que en el suelo,aunque su aroma lo delataba

—Eso luce delicioso.—Le dijo Ross a su Alfa.

Julien fue trayendo los demás platos,acomodandolos sobre la mesa,y para finalizar con los preparativos,encendió el candelabro con velas que estaba en el centro de la mesa.

—E-Espero lo disfruten.—Dijo una vez todos se sentaron. A Evan se le hizo algo tan tierno su comportamiento.

Ya te puedes retirar.—Hablo prepotente Robert.

—S-Si...

Julien abandonó el lugar,sin dejar de sentirse observado por la mirada de Evan,quien deseaba que el Omega estuviera con ellos compartiendo la deliciosa comida que preparo. Tuvo que conformarse con verlo caminar tristemente a través del umbral de la puerta.

Todo se dispusieron a comer,el aroma de la comida los hizo babear .

JulienDonde viven las historias. Descúbrelo ahora