Omega Imperfecto~Omegaverse Jainico/Besdoc

Capítulo 18

Después de realizar los exámenes médicos necesarios.Los resultados fueron muy preocupantes, ya que estos demostraban la fuerte desnutrición en la que se encontraba el Doc, el doctor le advirtió que si no mejoraba su alimentación perdería al bebé.Desde ese día el Bestia se había quedado a vivir con el omega, siendo este último consentido en todo.Comprándole lo que el deseaba. El joven de lentes había dejado de ir a la universidad para su salud.Pero eso no implicaba que el alfa lo hiciera también.La primera vez que dejó solo al joven, lo encontró sentado frente la puerta mientras abrazaba sus piernas y escondía su rostro.Cuando el alfa iba a hablar, el omega se lanzó en sus brazos para luego refregarse en el.
Su comportamiento era algo extraño, había momentos en donde era muy cariñoso con el canoso y otras veces era un dolor de cabeza para este.

Los demás venían seguido a visitarlo,entre ellos los que más destacaron fue el Pesho y el Edgar quienes se habían vuelto más cercano al Doc, aún así se la pasaban conversando entre ellos y el canoso se relajaba un rato fumando. Se quedaba en el patio observando las casas que se encontraban por aquel sector o algunas personas que pasaban por ahí, las que más llamaban su atención eran aquellos padres que salían a pasear junto a su hijo. No podía verlo a él en aquella imagen familiar.

Ya habían pasado un mes.Ahora el joven omega tenía una destacada barriga que hacía su embarazo notable.Aunque los demás le parecía algo tierno su aspecto para el era lo peor.Se sentía gordo ante el espejo, cada vez que un atuendo no le caía se echaba a llorar durante horas siendo consolado por el alfa canoso.
La última vez que ocurrió aquello, fue el viernes.El Bestia se encontraba sobre la cama del más bajó, mientras este estaba sobre el recibiendo acaricias de parte del alfa para consolarlo. Las palabras simplemente salieron de su boca.

-Soy horrible....ya entiendo porque no me amas-¿ acaso acaba de confesarse ante el canoso mientras lloraba en sus brazos? Debía arreglar las cosas, pero sentía que sus palabras salieron de su corazón.No quería que esos sentimientos volviera, se supone que los había encerrado dentro de él, pero es imposible ocultar tus sentimientos. Algún día no aguantaras más y aquellas saldrán.No debes sentir miedo ante eso cada uno siente de  igual forma que piensa de  distinta manera.Pero si los guardas dentro de tu ser, estará ahí envenenandote lentamente hasta que ya no puedas más. Por eso, el omega al decir aquello sintió un fuerte alivió dentro de él.

-No es por eso, tu cuerpo era perfecto, pero fue una equivocación haberte embarazado...

¿Se supone que esas palabras lo harían sentir bien?. Las palabras del alfa fueron como dagas que atravesaron su corazón.Se alejo de este lo que más  pudo dándole la espalda.Se cubrió el rostro, no quería que lo viera llorar.
El canoso lo observó por varios segundos, no sabía que decirlo, la había cagado, ahora se sentía como una verdadera mierda.Si intentaba arreglar las cosas, terminaría siendo peor.Sus pensamientos fueron interrumpidos por unos golpes en la puerta de la casa. Enseguida sin dudarlo bajo a abrir dejando al omega  solo en su tristeza.
Al abrir la puerta, se encontró con el beta barbón.Este le sonrió para luego saludarlo alegremente.Dejó que pasará,le indico uno de los sillones para que se sentará, pero se dio cuenta que este se había detuvido su caminó porque algo había llamado su atención, fueron los fuertes llantos del omega. Este se giró hacia el alfa mientras fruncia su ceño.

-No me mires así,no le hice nada malo o eso creo yo- se defendió el canoso, pero eso no bastó para que el beta soltara un suspiró para luego subir las  escaleras para encontrarse con el omega.
Al llegar al lugar, se encontró al joven envuelto en las sábanas. Se acercó a este, dispuesto a hablar y tranquilizarlo pero se arrepintió. Lo mejor sería que el Bestia hablara con el.Agarró la mano de su amigo arrastrandolo fuera de la habitación, cerrando la puerta detrás suya.

-Lo mejor será que te disculpes, Bestia- se dirigió el beta a su amigo, que observaba su muñeca al ver la marca que había dejado, sabía que el Edgar tenía una fuerza increíble para ser solo un beta, la mayoría sospechaba que ocultaba su verdadero ser pero este lo desmentia.Pero nunca lo había comprobado hasta este momento.

-Si tienes razón tengo que explicarle todo, no quize decir esa mierda- el alfa soltó un suspiró, observó como su amigo le daba una sonrisa de apoyo. Sin más preámbulo, se dirigió hacia la habitación a arreglar el desastre que había hecho.

El Edgar observó satisfecho a lo que había hecho.Sacó su celular al sentirlo vibrar en su bolsillo del pantalón.Le había llegado un mensaje de parte del Jaime avisando que el junto al Nico se dirigían a visitar al Doc,le había preguntado si quería ir con ellos pero alegremente le respondió que ya estaba en donde el omega y que los esperaba a los dos.Volviendo a guardar a donde estaba el objeto se quedó pensando en aquella beta, esta se había ido de viaje por algunos días a la casa de su familia. La amaba tanto, todo lo que hacía era por ella. Sintió que golpearon la entrada de la casa.Se habían demorado muy pocos sus amigos en llegar, tal vez estaban rondando por aquí cerca. Al abrir la puerta, se sorprendió al observar que frente a él se encontraba el Pesho sosteniendo una bolsa  en su mano izquierda.

-Edgar, ¿se encuentra el Doc? - preguntó el omega pasando al lado suyo sin más. Dejó las bolsas en el sillón para luego girarse al barbon con una ceja alzada esperando una respuesta.

-Esta arriba con el Bestia pero no los molestes-aquello había salido tan frío, tanto que podía congelar todo tu ser.Sus palabras hicieron que el Pesho abriera sus ojos como platos.Sin pensarlo corrió dirigiéndose a la habitación del menor pero fue detenido por el Edgar, quien le sujeto fuertemente la muñeca.

-Te dije que no los molestes-estaba furioso, intentaba aguantar sus ganas de lanzarse a golpear al omega. Pero si lo hacía toda la mentira acabaría por ser descubierta.

-No pueden tener relaciones en ese estado,¿acaso no te preocupa que es lo que le pasará al bebé? -hablo alterado el Pesho. Mientras intentaba zafarse del Edgar, pero cada movimiento que hacía, le provocó dolor.

-No están haciendo nada de eso, además eso no te incumbe- soltó la muñeca del omega quien lo observó con una sonrisa en su rostro.

-Tu eres un alfa ¿verdad?

El Pesho soltó una risa al observar el rostro de pánico que había puesto el Edgar.

-Eres demasiado obvió, todos cayeron en tu mentira menos yo-dijo aún con una sonrisa burlona en su rostro, se acercó al oído del barbón-ya se lo que planeas. Que gane  él mejor-Se dirigió hacia la salida pero antes le dijo al barbón que le avisara al Doc que había dejado unos regalos.Y sin más que decir se fue de la casa,dejando al Edgar en el mismo lugar  empuñando sus manos.