SUPERHUMAN. [ JohnMark ] Finalizada.

07. Corto, corto.

— No habla nada conmigo, y contigo, parece que no sabe lo que es guardar silencio.— Murmuró molesto John hacia Jungwoo, con el cual conversaba escondidos en la cocina.

— Es que no eres sutil, ten calma, ya verás como Mark va soltándose contigo.— Woo palmeó el hombro del chico antes de ir de vuelta con Mark, quien esperaba paciente sentado. — ¿Hace cuanto te hiciste esto, bebé? Es un buen tinte.

— Mh... Es de nacimiento... — Respondió mientras jugaba con la orilla de su nuevo suéter.

— Wao, tienes muchos secretos.— Jungwoo terminó de cortar y acomodar el cabello de Mark, ahora se veía más arreglado que antes, además que le había ver más tierno aquel corte de honguito. — Te ves precioso, bebé, y tu mechón luce, ven, vamos al baño para que veas.— Johnny vio como Jungwoo se llevaba al chico al baño, por su parte se encargó de levantar el cabello que estaba en el suelo, lo extraño era que no había ningún cabello verde, y estaba totalmente seguro que Jungwoo lo había cortado.

— Señor Seo, ¿me veo bien? — John llevó su vista a la dulce voz del chico dibujando una sutil sonrisa.

— Te ves bien, Mark, muy bien.— Mark agitó un poco su cabeza para acomodar su cabello recién cortado, se veía cómodo.— Sube un rato a tu habitación, ¿sí? Necesito hablar con Woonie.— El menor asintió yéndose a su recamara. — No está su cabello verde.

— ¿Mh? Tiene su mechoncito.— Respondió Jungwoo sin entender del todo.

— Del cabello que cortaste, no está.— Explicó.— Mark no es un niño normal, nadie tiene un mechón verde de nacimiento, su cabello cambió de color al cortarlo, Jungwoo, dime que estás entendiendo esto.— Las manos de Johnny sujetaban los hombros del contrario agitándolo un poco.

— Tal vez... No sé, es que es imposible que Mark sea un tipo de alien, eso es muy ficticio.— Jungwoo suspiró un tanto confundido, no sabía qué pensar en ese momento.— Trataré de descubrir qué sucedió con él, pero hay que se pacientes, Seo, seamos pacientes.— El mayor asintió soltando poco a poco a su amigo, no quería perder la cabeza, pero aquello era tan anormal, y eso asustaba demasiado.

Para la comida pidieron pizza, y Mark, como un buen niño, comió todo y de manera rápida, tenía un buen apetito. Jungwoo tenía que volver a casa, por lo que difícilmente se despidió del pelinegro, este mismo igual se sentía algo triste cuando Woonie se iba, y el ambiente pesaba un poco más con solo ambas presencias.

— Señor Seo...— Mark terminó de bajar las escaleras y a paso lento se acercó a él.— Jungwoo es agradable.— Por primera vez Johnny podía observar la sonrisa de aquel menor.

— Lo es, Mark, es muy agradable.— John cuidadosamente pasó su mano sobre el cabello del chico, este solamente se encogió un poco de hombros.— Mark, ¿quieres ir a mi recamara? Me gustaría hablar contigo, como amigos.

— ¿Amigos? — Murmuró en cuestión mientras andaban hacia la habitación del dueño del hogar.

— Amigos son.— Hizo una pausa mientras abría la puerta de su habitación dejando que su acompañante pasara primero.— Personas en las que confías.

— ¿Confías? — Ambos tomaron asiento sobre la cama observándose mutuamente.

— Confiar es contar con la otra persona, sin que se defrauden.— La mente de Mark parecía volar con tantos conceptos nuevos que se sumaban a su vocabulario.— Yo soy tu amigo y puedes confiar en mí.

— ¿En serio? — Johnny asintió sonriendo.

— Yo tengo veintiocho años, ¿tú cuantos tienes? — Mark bajó la mirada antes de responder.