Mi Tutor Es Mi Cuñado✔

Capítulo 26:Ya no eres divertida

Tristeza, decepción, desesperación eso que trasmiten los ojos de mi mejor amigo, se ve mal y ahora entiendo porque.

La sola idea de que se van me dejo en estado de shock, ellos dos son los únicos amigos que tengo aquí, no soporto saber que se van o que se pueden llegar a ir.

No se muy bien como reaccionar, hago lo que mi instinto me indica. Me paró y abrazo a Adam, tarda en corresponderme pero enseguida lo hace.

-No quiero irme Ana- me abraza fuerte, se que está haciendo fuerzas para no llorar.

-Yo tampoco quiero eso- digo a llanto libre, no voy a contener lo que siento.

Luna se nos une al abrazo, que haré sin este par. Aún recuerdo cuando me topé con ellos, parecían tan alegres y estaba tan contenta de conocerlos.

-Esperemos que papá no acepte el trabajo- hablo Luna, tenía los ojos cerrados. Parece que graba este momento en su memoria.

Adam nos suelta bruscamente, camina unos pasos y con la misma velocidad se da vuelta, tiene los ojos rojos.

-¿¡Porque te engañas!? ¡Es obvio que aceptará!- habla duro y fuerte.

Luna lo mira triste, quiere entender a su hermano pero no puede, no sabe cómo hacerlo. Siente el dolor, porque ella está pasando por exactamente lo mismo, pero no se cierra a las posibilidades.

-Adam, podemos convencerlos...-

-¡No! Abre los ojos, nos iremos y no cambiarán de opinión- Adam irradeaba odio por los ojos, bronca, resentimiento.

Trate de ir por él, se está alejando pero Luna toma mi brazo.

-Déjalo, necesita estar solo- me hace una mueca triste y me suelta.

Siempre creí que de los mellizos el más maduro y centrado era Adam, porque siempre tenía una respuesta sensata. En cambio su hermana estaba todo el tiempo riendo, haciendo bromas y hablaba sobre cosas totalmente descabelladas.

Ahora que los veo a ambos, frente a está situación puedo ver que no es así, Luna acepta mejor las cosas, no se desespera ni se ahoga en un vaso de agua. Adam, por otro lado, se lo ve mal, es como si no pudiera ver que tiene opciones. No sabe enfrentar situaciones que están fuera de su control.

Volvimos a nuestras clases, Adam al parecer se fue, fuimos al estacionamiento para que nos lleve a casa como siempre y el auto no estaba.

Pedimos un taxi porque la casa de Luna está lejos y a mi me da flojera caminar.

Me despido de mi amiga y entró a la casa de Juan. Aunque intento llamarla mi casa es imposible, no me hallo aqui.

Al entrar veo a Tayler en los sillones, ni siquiera levanta la mirada para verme. Sus ojos están fijos en un libro.

Los gemelos están jugando a la play station en la sala, me saludan desde el piso.

Voy a la cocina, mamá no está, es raro, entran a trabajar a las dos.

Juan tampoco está. Mejor, no lo soporto. Me incómoda que todo el tiempo quiera caerme bien, aunque últimamente está raro.

Me sirvo un vaso con jugó y escucho la puerta abrirse, voy corriendo para ver si es mamá pero no.

-Agg eres tú- digo al ver a Raquel entrar.

-También me alegra verte tonta- habla con su usual voz chillona que me saca la cabeza.

Miro de reojo a la sala mientras vuelvo a la cocina, los chicos se miran cómplices y ríen.

No dicen nada pero se que algo traman.