Mi Tutor Es Mi Cuñado✔

Capitulo 10: Hermanos problemas

Toda la paz que me había dejado estar con Franco, desaparece en dos segundos.

¿Porque? Oh pregúntenle a mi hermosa hermanastra que se metió en mi habitación.

-Ya dime que buscas Raquel- dije cruzada de brazos con total fastidio en mi voz.

-Se que estas con alguien, dime ya con quien- me dijo señalandome.

-Si estaba con...- intente decirle pero me interrumpió.

-¿Sabes que? No me interesa, si eres una put* así será, adiós Perra- dijo y se alejó por el amplio pasillo en modo diva.

En cambio yo quedé estática, estuvo metida en mi habitación durante 15 minutos buscando y dando vueltas todo.

Nose que pretende ella está entrando y saliendo con su novio todos los días y yo no tengo "permiso" de estar con un amigo, que justo.

(...)

Los días transcurrieron muy tranquilos, de la escuela a mis tutorías y de ahí a casa, nada más, no más visitas de noche.

Raquel no estuvo con su novio por las tardes, sólo invitaba a sus amigas y se la pasaban en la pileta criticando a muchas chicas y creo que entre ellas estaba yo.

Pero bueno la parte feliz es que hoy es viernes y mi madre volverá de su viaje, me dijo que traería una sorpresa, así que estoy muy contenta por eso.

Ahora estoy en el patio tomando sol, leyendo una revista, escuche el timbre de la casa asique deje la revista, coloque mis lentes sobre mi cabeza y me dirigi a la entrada.

Al abrir la puerta dos nenes entraron corriendo con pistolas de agua, empezaron a mojarme, intente hacer que paren pero los dos Diablillos reían como unos condenados y que decirles me contagió su alegría.

-Niños, dejen a Ana en paz- les dijo mi madre a los pequeños, quien le obedecieron sin chistar.

-Perdón Ana, yo soy Trevor...-

-Y yo Vladimir y juntos somos...-

-¡Los hermanos problemas!- gritaron ambos pequeños a la vez.

Me reí ante su saludo tan especial, mire a mi madre desconcertada, nunca había visto a estos chicos.

Pero cuando intente hablar un chico de cabello negro al igual que sus ojos, de piel blanca, vestido de negro entro a la casa.

Me quedé con la boca abierta, el venía con una mochila en su hombro junto con un libro en su otra mano.

-Hija, el es Tayler, son hijos de la hermana de Juan, ella tuvo unos problemas y necesita que le demos alojó- me dijo mi madre pero yo solo miraba al apuesto chico frente a mi.

Juan entro por la puerta y me pego con una carpeta en la cara.

-Quita esa cara niña- dijo entre risas el marido de mi madre.

Fingi una risa nerviosa y coloque un mechón de mi cabello detrás de una de mis orejas.

Nose que me estaba pasando, me comporto muy rara por la sola presencia de este chico, lo peor de todo es que el solo me dirigió la mirada y luego entró, se fue escaleras arriba mientras los empleados de Juan acarriaban sus pertenencias.

Cuándo salí de mi transe intente caminar pero mi caí, mire mis pies y tenía los cordones atados.

Mire a mis costados y los niños se reían como locos por no haber fallado.

-¿¡Que es todo este alboroto!?-

Y si señores llego la reina del drama, como no podía hacerse faltar Raquel apareció.