Explicaciones

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-¿No piensas que es demasiado evidente que Muzan está tramando algo?- Mitsuri detuvo sus dedos de trenzar los cabellos negros, volviendo su completa atención al adolescente- Ahora que sabe lo de Nezuko...Debe estar pensando algo en verdad grande-

-Puede ser- la chica volvió a su tarea, relajada- pero no debemos preocuparnos, el señor Oyakata siempre va un paso adelante de él- sonrió, volteando su atención a Shinobu a medida que se acercaba a ellos con una sonrisa, como siempre, ambigua. Al menos agradecía que les hubiera permitido verla aproximarse.

-Ese peinado te queda bien- concedió, con ese dejo de sarcasmo que no les permitía saber realmente si era honesta. Tokitou la miró fijamente, sin atender su halago- me alegra haberte encontrado, llevo varios días intentando hablar contigo, pero si no estabas durmiendo, estabas escurriéndote con Kamado y su hermana y era difícil llamar tu atención. Así que si Kanroji no tiene problemas, me gustaría que me acompañaras-

Tokitou, a pesar de incorporarse y comenzar a caminar tras ella, aprovechó un momento de descuido de Shinobu para mostrarle la lengua.  Mitsuri se quedó, pensando lo lindo que el chico lucía con ese peinado.

Se sentía realmente cómodo ahí. Podía distraerse con lo que deseara, libros, esquemas, los frascos de vidrio con sustancias extrañas. Aunque la mujer sentada frente a él tenía una expresión serena, esperando a que le dirigiera su atención, era evidente que comenzaba a irritarse por la incapacidad de Tokitou de concentrarse, así que se aclaró la garganta para atraer su mirada de vuelta.

-He estado haciendo miles de análisis, tu recuperación fue muy extraña por decir lo menos- con la misma sonrisa calmada, le mostró una serie de escritos que no tenían ningún significado a los ojos del chico, aunque le gustaba la forma en que los símbolos se amontonaban en la orilla, con esos pincelazos negros que le recordaban otras figuras- de alguna manera, logras redistribuir los nutrientes para curarte. Es un caso extraño, tu metabolismo se ha adaptado a los ataques y a la reparación casi instantánea. Es similar al de ciertas plantas que son capaces de regenerarse después de ser cortadas-

-Eso es bueno ¿No? Significa que puedo soportar una gran cantidad de daño sin morir-

-Sí, claro. Lo que me preocupa son... Otras cuestiones que también pueden estar vinculadas a tu redistribución nutrimental- Tokitou pestañeó curioso ante el casi imperceptible nerviosismo en la sonrisa de ella- no he encontrado ningún caso humano documentado así que sólo he podido guiarme con el estudio de las plantas. Me gustaría seguir de cerca tu progreso, Muichirou-

-¿Te preocupa que ahora necesite comer igual que Kanroji? ¿O que necesite comer tierra como las plantas?-

-Las plantas no comen tierra- la mujer se echó a reír, negando con la cabeza- me preocupa la parte reproductiva. Las plantas tienen miles de mecanismos reproductivos y...-

-¡Genial! Voy a poder hacer copias de mí mismo-

- De alguna manera, sí, como todo el mundo. Todavía eres muy joven así que no deberíamos preocuparnos por eso, pero necesito descartar un par de hipótesis-

-¿Descartar qué? ¿Poder copiarme a mí mismo? Sería genial ¿Por qué te pones tan nerviosa de pronto?-

-¿Entiendes de lo que te estoy hablando?- Shinobu tragó saliva al ver el gesto sinceramente confundido del muchacho. Deseó que dejara de interesarse por esa conversación y ella pudiera simplemente observarlo desde lejos. Tomó una estrategia equivocada. Calculó su discurso sin tomar en cuenta que Tokitou quedó huérfano muy joven, que la vida de cazador de demonios no contemplaba una educación más allá de la estrictamente bélica. Era lógico, estaban pensando su vida en torno a un único y demandante propósito, lo demás parecía frívolo. Y aún así... -¿Sabes cómo se reproducen los humanos?-

-Realmente no- tomó uno de los cuadernos del escritorio, hojeando sin interés- supongo que alguien debe morder a otra persona o algo así, como los demonios -

Shinobu nunca se sintió tan agradecida de ver la sombra de Giyuu cruzar el pasillo como en ese momento, llamándolo suavemente. El hombre entró, viendo con gesto de duda al par.

-Bien, puedes preguntarle lo que desees a Giyuu, yo debo seguir revisando a los demás, Inosuke ha tenido un poco de dolor estomacal últimamente- Shinobu salió de la habitación, agitando la mano en despedida. Giyuu miró al adolescente, con su mentón recargado en su mano, ya más aburrido que curioso.

-Shinobu quiere que me expliques la reproducción humana- aclaró. Y el adulto apenas atinó a sonrojarse y maldecir a la mujer, queriendo escapar de la insistente mirada menta. Debía ser algo importante para que los dos adultos hubieran tenido esa reacción.

-Yo... ¿Por qué no mejor le preguntas a Uzui? Él tiene tres esposas, seguro sabe explicarlo mejor- 

Tokitou resopló divertido mientras se levantaba, dejando a un muy rojo Giyuu, alcanzando a escucharlo maldecir por quinta vez a Shinobu.

No podía esperar por ver la reacción de Tengen.

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