Acto 20. -Hora de la Verdad-

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Chris Evans... lleva más de un año viviendo en la Ciudad de México, y ha cumplido un año de relación con Alfonso. Después del incidente que hubo con Miguel, su noviazgo siguió con mucha normalidad, e incluso parecieron que se hicieron más unidos de lo que eran antes. Tanto que se había hecho costumbre que tres veces a la semana, Chris fuera por él al trabajo sin importar si lo reconocieran en la calle.

Era la madrugada de un miércoles de octubre; toda la noche estuvo lloviendo y el sonido del agua caer hizo que se relajaran en un sueño profundo. Por única ocasión ambos durmieron con una ligera pijama por el frío que hacía. Ambos una playera sencilla y un pantalón de algodón para estar cálidos esa noche. Chris despertó un poco antes y miraba fijamente a su novio, mientras acariciaba su cabello y le daba pequeños besos en la cabeza. Te ves tan tierno mi Alfa hermoso. Muy tierno.

-Chris... ¿Qué hora es?.- Preguntó somnoliento  Alfonso.

-Son las 6:45 de la mañana Soldado.- Posó sus labios al terminar la oración. No me canso de besarlo.

-¿Qué? ¡Chris porque no me despertaste temprano!- De un gran salto salió de la cama, mientras Chris se reía de la maniobra que había hecho.

-Te veías muy hermoso dormido. Quería disfrutar del paisaje... Además como tu Capitán puedo decidir por ti en algunas cosas.- Dijo mientras lo seguía al baño.

-Pero si llego tarde a la casa el Capitán no podrá castigarme. Sin mencionar que te tengo una sorpresa.- 

-¿Sorpresa?- Su reacción fue como la de un niño pequeño al ver su primer juguete. -Soldado, tu Capitán exige que le des tan importante información ¡ahora!-

-Ni con tu tono de Steve Rogers muy serio, me harás decirlo.- Replicó Alfonso quien ya se encontraba dentro de la ducha en un cubículo de vidrio. Pero Chris sabía la forma de obtener dicha información. Le encantaba derrotar a Alfonso en lo que se trataba a sus sorpresas.

-Vamos Alfa, dime... ¿cuál es la sorpresa que me tienes preparada?- Preguntó, pero esta vez ponía una cara tierna, sus ojos azules se agrandaron e hizo un leve puchero con sus labios. Sabía que esa era la manera de obtener lo que quería.

-Vale Chris.- Dijo en tono molesto Alfonso. -Recibí una llamada de mi papá, quería saber cómo estaba, y aproveché para decirle que quería que viniera con Alejandra y mis hermanos a visitarme... El motivo es para presentarles a mi nueva pareja.

Asomó su cabeza del cubículo de la ducha para ver la reacción de Chris, éste tenía una mirada perpleja y seria que poco a poco se transformó en un sonrisa inmensa y sus ojos se llenaron de luz.

-¡Eso es increíble Soldado!- Gritó para entrar a la ducha con él, teniendo puesta su ropa con la que durmió, y empezó a besarle y abrazarlo de felicidad

-¡Chris! ¿Estás loco? Te metiste con la pijama puesta.-

-Soldado, no sabes cuanto tiempo estaba esperando para conocer a la familia de mi novio. Y esta noticia se tiene que celebrar como se debe.- Poco a poco tocaba a Alfonso y se bajó el pantalón ya húmedo.

-Chris... Tengo que... llegar temprano al trabajo... Además...- Chris lo interrumpía con besos y manoseos, así que Alfonso no tuvo otra opción que acceder a la "celebración" y hacerlo en la ducha. No puedo negarme a este hombre perfecto. Lo amo.

Al darse cuenta que tenía el tiempo justo para llegar a su oficina, Chris lo llevó en el auto (como en algunas ocasiones) para que llegara lo antes posible.

-Capitán, salgo temprano hoy, como a las 5:30 de la tarde.-

-Estaré aquí esperándote Soldado.- Contestó Chris dándole un beso en la frente y acariciando su mejilla. Se retiró del lugar al ver que Alfonso ya había entrado al edificio de su trabajo.

¿Será esto AMOR o CONFUSIÓN? (Chris Evans) (Yaoi) (Fanfic) (Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora