❝ Incluso si jamás nos hubiésemos encontrado, siempre llevarías mi corazón contigo. ❞
Camila está enamorada de su vecino y compañero de clase, Shawn. Conseguir enamorarlo ha sido su objetivo desde siempre pero cuando Luke aparece en su vida junto...
— No soy un bebé, idiota, esperame aquí, voy por mi mochila — me dirigí a la habitación, una vez en la puerta tomo de mi mano antes de bajar las escaleras del edificio
Al bajar nos topamos con Shawn que al instante de vernos dirigió su mirada hacia nuestras manos entrelazadas, bufo y siguió su camino a su departamento.
Idiota exclamó luego de azotar la puerta haciendo que el sonido se escuchase bastante fuerte, ¿ahora que le pasa?. Ignore por completo lo que minutos antes habia hecho Shawn, quería disfrutar completamente el paseo con Luke, conocerlo aún más.
Me parecia un chico encantador, desde que había llegado no dudaba en siempre preguntarme como estaba o si necesitaba algo, me ayudaba mucho y queria recompensarle todo poniendo mi atención solo en él y en nadie más con nombre Shawn así que mi plan era borrarlo de mi mente por unas horas.
— Te llevaré a mi casa, ahí tengo mi guitarra ¿te parece bien? - dijo volteando a mi dirección y poniendo su bella sonrisa.
— Me parece bien, ¿conoceré tus sucios secretos?
— Quieres ver mis sucios secretos, eh — no respondí — Vamos, tesoro dí algo - no pude evitar no sonrojarme ante la palabra tesoro
— Ya cállate y apresurate que ya quiero oirte tocar — dije intentando que no notara que me habia sonrojado.
Ahora estábamos en su casa y el empezaba a tocar cuerdas creando una melodia de lo más hermosa, yo no sabia de música y estaba segura de que nunca sabria de ello. A pesar de que cantaba no era una experta, sólo imitaba las cosas que hacían los cantantes, pero no hacia falta porque era obvio que Luke era realmente talentoso, no encontraría las palabras para describir todas las emociones que solo con su voz y una guitarra me transmitían.
— Y bien, ¿te gusto? — cuestionó con un brillo en sus ojos, yo asentí — Wow, ¿es en serio? — dijo con una sonrisa
— Me encanto, en verdad — dije mientras lo abrazaba. Nuestro primer abrazo.
— Que bueno, no sabes cuanto pratique para no fallarte — Y eso basto para hacerme sentir especial.
La tarde siguio en ver peliculas junto al rubio, que solo hacia otra cosa que mirarme durante la pelicula, no me incomodaba para nada pero ciertas veces pensaba que seguro tenia algo en el rostro.
Estaba subiendo las escaleras hacia mi edificio, en el camino encontrándome a Shawn que bajaba mientras cargaba unas cajas.
