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I'M THE FIRE AND BLOOD
NARRADOR.
Valientemente, Daenerys avanzó unos pasos hasta quedarse rodeada de las personas. Ivar continuaba viéndola hipnotizada, parecía como si quisiese comérsela con la mirada. Parecía idiotizado por ella.
Dany se irguió y no pasó desapercibido que muchos hombres se fijaron en sus pechos, pero Dany poca importancia le dio.
—Yo soy Daenerys Targaryen, esposa del Gran Ivar el Deshuesado —Dany comenzó a hablar y podía jurar que la gente contuvo la respiración. Dany sintió como uno de los pequeños Dragones que tenía en el hombro comenzó a chillar —He renacido gracias al Gran Ragnar Lothbrok y a las Valquirias —La gente comenzó a murmurar en ese momento — Soy hija del fuego y la sangre, soy hija del Dragon.
Dany raparo su vista en los hermanos Lothbrok y estos la miraban sin poder creer la escena que estaban viendo. Llegó su vista hacia abajo y ahí estaba el hombre que más amaba. Missandei, rápidamente se abrió paso entre la gente que continuaba murmurando el épico renacimiento de Daenerys. Missandei, en sus manos traía una pequeña manta la cual sería suficiente para tapar a Dany y alejar las miradas viciosas de los hombres.
Ivar, cuando reparo de ese detalle, grito fuertemente.
—¡LARGUENSE!—Toda la gente comenzó a irse pero no sin antes darle una mirada a Dany a los Dragones. Cúando la gente finalmente se fue, solo quedaban allí Hvitserk, Ubbe, Sigurd, Bjorn y Missandei.
Daenerys comenzó a reír y todos la miraron como si estuviera loca, pero de pronto las risas se convirtieron en sollozos y Daenerys se echo a llorar y tomó a los tres Dragones en sus manos y los comenzó a acariciar y verlos. Ivar comenzó a arrastrarse hacia ella y la tomó entre sus brazos.
—Tuve miedo —Dany dijo —Estaba sola y me asuste, pero vi a tu padre, Ivar —Todos la miraron expectantes —El se ve... Feliz, esta en el Valhalla, con Odín.
—¿como lo viste? Tu debiste ir a Helmein, no al Valhalla —Respondió Ubbe frunciendo El ceño.
—Una de las valquirias... Ella me dijo que Odin quiso llevarme al Valhalla, pero no es el momento —Dany dijo pero recordó algo de repente —Brunilda, la valquirias, dijo que cuando llegue el momento de mi muerte, podré ser una valquiria —Presumio Dany.
—Hablaremos en cada —Fue lo único que Ivar dijo, su rostro estaba serio y un tanto afligido. Sin más, todos se fueron del lugar.
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Ya llevaban tiempo sentados los dos, Ivar no decía nada y sinceramente, Dany comenzaba a preocuparse por la situación pero sin embargo, ella estaba concentrada en los pequeños Dragones que tenía en las piernas.
Los Dragones eran de color negro, plomo y verde.
Al de color verde, había decidido colocarle el nombre de Valyrio, para recordar sus viejas raíces y de donde provenía su familia. Valyria actualmente no existía, pero la vieja tata le había contado a Dany que de Valyria sólo había quedado ruinas. Pero Dany esperaba ir algun día a visitarlo.
Después, al plomo, había decidido colocarle el nombre de Drago. Cuando Daenerys era niña, había encontrado un pajaro herido, Dany lo llevó a casa y lo curó y lo adoptó. Dany realmente lo quería, pero un día, cuando llegó a casa después de haber estado jugando con Ivar, se encontró con Viserys comiendo carne. No le dio importancia hasta que fue a su habitación y no lo encontró. Ahí comprendió que Viserys lo había asesinado y posteriormente, se lo había comido. Dany quería recordar a ese pequeño pajaro que le trajo tantos momentos felices colocándole el nombre a uno de sus hijos.
Finalmente, al negro, le puso el nombre de Boneless. "Deshuesado" ese era el nombre para el negro. Ella decidió colocarle ese nombre para recordar a su gran amor y la incapacidad que lo hacía sumamente especial y diferente al resto. Quería recordar al hombre de su vida.
—¿Como fue? —La pregunta de Ivar La sacó de su ensoñación.
—¿Como fue que? —Preguntó Dany alejando su vista de sus hijos para centrarla en su esposo.
—Tu muerte.
—Luchando, estaba luchando —Comenzó Dany —Mataba a todo sajon que veía pero cuando anunciaron su retiro estaba feliz... Todos estábamos felices, pero sentí algo en mi pecho, algo que lo atravesó, era una espada. El hombre que me mato dijo "Robert envía saludos"
—¿Fue Robert? —Preguntó Ivar conteniendo la ira.
—Lo fue —Contestó Dany —Pero lo más extraño es que yo conocía la voz del que me mato... —Dany dejó su oración al aire cuando conecto todo.
Dany, sorprendida y enojada, se paro de su lugar y dejó a sus hijos en la cama. Ivar la miró extrañado.
—¿A dónde vas? —Preguntó Ivar.
—A tomar mi venganza. —Susurro Dany y salió de la tienda con Ivar detrás de ella.
