La feria de la salud casi había terminado, pero Hannah aún no podía descansar y todos seguían tan ocupados como al principio.
En un momento dado, estaba ofreciéndole a la gente hacerles análisis para ver el nivel de azúcar en la sangre cuando apareció un hombre mayor que se detuvo delante de ella.
-Puedo comprobar su nivel de azúcar en la sangre- le dijo ella.
-No. Preferiría pintar de rosa mi establo.
Era alto, de unos sesenta años, con el cabello blanco, delgado y con unos penetrantes ojos azules.
-Addie me ha dicho que le dé esto al médico.
Sacó entonces un pedazo de papel que contenía los resultados de sus análisis.
-Yo soy la doctora Hannah Morgan.
-¿Qué me dice? ¡Pero si es solo una niña!
-Como si hubiera empezado a andar hace dos días...- murmuró ella.
-A mis oídos no les pasa nada.
-Me alegro de saberlo- respondió Hannah sonriendo artificialmente y leyó el nombre del papel: Clovis Evans-. Encantada de conocerlo, señor Evans. Voy a echarle un vistazo a sus análisis.
-A mi no me pasa nada.
-Parece que tiene una salud excelente...
Hannah miró los numeros del papel y frunció el ceño antes de añadir:
-Veo que tiene la tensión alta. Me gustaría que fuera a donde está Bonnie Potts y que se la tome.
-Ya lo ha hecho. Me ha dicho que la segunda vez da lo mismo que la primera - dijo el hombre preocupado-. ¿Qué me pasa?
-Señor Evans, la tensión alta puede ser algo serio.
-¿Cómo de serio?
-Se le llama a menudo 《la asesina silenciosa》, ya que puede provocar un ataque al corazón o un infarto sin previo aviso.
-Pero yo me encuentro bien.
Hannah asintió.
-Eso es parte del problema. Si uno se siente mal, hace algo al respecto, pero es difícil creer que algo va mal cuando no hay síntomas.
-¿Y qué puedo hacer?
-Me gustaría verlo en mi consulta. Tenemos que hablar de las posibles medicaciones. Y la dieta y el ejercicio pueden ayudar.
-Mire, jovencita. No es como si estuviera sentado todo el día en el rancho sin hacer nada.
-Seguro que no. Y tampoco hay necesidad de estar preocupados permanentemente...
-¿Quién dice que estoy preocupado? Estoy tan sano como un caballo.
-Ignorar esta enfermedad puede llevarnos a un problema que es tan malo como lo que está usted pensando. Me gustaría que nos llamara para concertar una cita.
-Tal vez cuando el doctor Holloway vuelva...
Hannah se enderezó en toda su altura, pero aún así, tuvo que seguir levantando la mirada.
-Señor Evans, ¿Ha oído alguna vez la expresión de que, cuando se entierra la cabeza en la arena, dejas el trasero al aíre?
-Mire, señorita...
-Clovis, no empieces- dijo entonces Addie Ledbetter cuando entró en la habitación, y miró duramente al hombre-. No te quiero ver poniéndoselo difícil a la doctora Morgan.
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Un Solo Beso (Completa)
RomanceLa única meta de Hannah era darle un mejor futuro a su mamá sacarla de ese rancho, llevarla a la ciudad con ella y atenderla como a una reina. Lo que Hannah no prebvio fue que su mamá no quería esa vida a ella le encantaba trabajar para Dev Hart y c...